No siempre el logro se alcanza como efecto de una genialidad o de la buena suerte; en todo caso, el desespero te alejará de alcanzar tus resultados mientras que la esperanza fundamentada en creatividad y conocimiento te garantizarán siempre el éxito.
¿Cuántas veces el desespero te ha alejado de los resultados esperados?
A veces en medio del desespero sale una genialidad para alcanzar lo deseado o el logro se alcanza como producto de una casualidad; pero en realidad no siempre se podrá mantener la genialidad en medio del desespero ni las casualidades jugarán a tu favor si no existe la sobriedad de la esperanza que se traduce en creatividad y premio.
Desespero significa desesperanza o desesperación y esta segunda se interpreta como pérdida total de la esperanza o “alteración extrema del ánimo causada por cólera, despecho o enojo”, según definición de la Real Academia de la Lengua Española.
Recuerda que los tres grandes pasos para atraer lo que deseas consisten en SER:
Solicitar
Estar Convencido y
Recibir
Al contrario de la desesperanza o la desesperación, estar convencido es un proceso dinámico que se mueve al ritmo de la esperanza y la fe en su más estricta definición. Veamos un ejemplo:
Cuando subes a tu auto para manejar hasta tu lugar de trabajo puede ser que en el camino surjan situaciones que te generen desespero: la congestión vehicular, el sistema de semáforos que se encuentra muy lento, la lluvia que no te deja avanzar a la velocidad deseada…etc., Sin embargo, el lugar donde se encuentra tu sitio de trabajo no te genera ningún tipo de desesperanza, pues sabes y tienes la certeza de que así llueva, así el tráfico vehicular esté lento o sea lo que sea, tu lugar de trabajo está ahí y lento o no, tu avanzas con seguridad hacia él.
Pues bien; así mismo, y en referencia a la certeza, funciona el “Estar Convencido”.
Estar convencido es avanzar con alegría, esperanza y fe hacia el objetivo o la meta deseada pues sabes y tienes la certeza de que así la lluvia o las tinieblas no te lo dejen ver, ahí se encuentra para ti, esperando a que llegues pues eres tú el que debe llegar. Evita la desesperanza y la alteración extrema de tu ánimo pues en ambos casos estarás obteniendo como resultado una angustia que contradice y te aleja de tu propósito o deseo.
Si puedes hacer uso de la elección consciente y darte cuenta de que en un momento dado estás experimentando desespero, entonces está en tus manos decir: “Esto no es lo que quiero pues me aleja y me desconecta de mi deseo, así que a partir de este mismo momento comienzo a mirar y a avanzar hacia mi objetivo con esperanza y fe”… Eso es Estar Convencido y te saca del desespero para llevarte al logro de lo deseado.
En conclusión, si el desespero te visita revístete de elección consciente y aplícale una dosis de convencimiento y fe. Afronta ese momento con alegría y mantén la certeza de que tu objetivo será alcanzado pues lo has planeado, desarrollado y puesto en marcha con conocimiento y pasión.
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