Harold F. Davidson fue un sacerdote de la iglesia de Inglaterra, más conocido como “el Rector de Stiffkey o el padre de las prostitutas“. Fue expulsado en 1932 en la catedral de Norwich, por un supuesto estilo de vida no acorde a sus funciones eclesiásticas.
Harold se convirtió en rector de Stiffkey en 1906, profundamente preocupado por las “mujeres caídas“, pasó gran parte de su tiempo en Londres rescatando a pobres niñas que habían descendido irremediablemente a la prostitución. A veces pasaba hasta seis días a la semana en la ciudad para coger el tren de regreso a Norfolk el domingo por la mañana, justo a tiempo para su sermón. Respetado y considerado un alto clérigo antes de la guerra, llevó a cabo algunos matrimonios importantes en la capilla Real del Palacio de Saboya, incluso asistió a algunos actos ceremoniales de la corte del Rey Jorge III.
Pero fue después de la guerra cuando su vida comenzó a dar un vuelco de contradicciones, acompañadas de un triste final.
Durante la Primera Guerra Mundial sirvió como capellán de uno de los barcos de la Armada Real Británica, cuando regresó, su esposa Molly quien se había casado después de un periodo de seis años de noviazgo, estaba embarazada de otro hombre. Después de esto, la relación de la pareja era inestable y había algo de presión sobre él para salir de ella. Pero Harold se negó alegando que los votos matrimoniales eran de por vida.
Ante tanta presión decidió aceptar un puesto como tutor del hijo del Maraja de Jaipur durante un año en la India. La iglesia sancionó el viaje y la autorización para el rector fue cancelada. Después de esto Harold se arrojó de nuevo a sus “buenas obras“ dedicando cada vez más tiempo a las prostitutas del área de Soho, como había hecho antes en 1914.
En 1930 el mayor Philip Hamond una de las personas más influyentes de Norfolk, quien había tenido varios altercados con él por no permitir que sea canónigo, acusó a Harold de inmoralidad presentando una reclamación a Henry Dashwood, el abogado de la iglesia de Inglaterra.
Tras un año y un montón de dinero gastado, los detectives privados descubrieron poco de los incansables viajes del rector de Stiffkey a los suburbios de Londres. De las 40 chicas que entrevistaron solo 1 ofreció versiones contradictorias sobre él, y sólo cuando estaba borracha, retractándose una vez alcanzado el estado sobrio. Pero las presiones hacia el abogado de la iglesia, junto a las quejas de los descuidados feligreses de su parroquia local, aumentaron una historia acerca de un rector con un inmoral comportamiento con las prostitutas,… a pesar de las contradicciones. Incluso los periódicos fueron capaces de ofrecer en sus portadas una historia de inmoralidad con impresión de culpabilidad…Como suele ser habitual.
A pesar de no ofrecer ninguna prueba, La Iglesia de Inglaterra celebró una ceremonia en la catedral de Norwich el 21 de octubre, donde fue “depuesto y degradado “
Y qué hizo Harold Davidson para publicar sus tremenda injusticia?…
Durante un año estuvo sentado en un barril en el paseo marítimo de Blackpool proclamando su inocencia a turistas que habían pagado 2 peniques por ver el famoso rector depuesto.
Finalmente acabó en las famosas atracciones de circo Thompson en Skegness donde fue presentado como “Daniel(Dios es mi juez), en la guarida del león“. Un espectáculo donde Harold compartía compañía en una enorme jaula, con un fiero león llamado Fredi y una leona llamada Toto, donde por un espacio de 10 minutos hablaba a los presentes sobre las injusticias que se habían impuesto sobre él
Las actuaciones parecían desarrollarse sin ningún contratiempo, hasta que un 28 de julio de 1937, mientras se movía en el interior de la jaula, tropezó accidentalmente con la cola de la leona cayendo sobre ella. Presumiblemente esto se podía percibir como un ataque y Fredi el león se avalanzó sobre él, en defensa de su pareja. El león lo agarró por el cuello y salió alrededor de la jaula agitando al pobre Harold de un lado a otro. El público pensando que era un acto de risa dejó pasar el tiempo antes de ir en su ayuda. Minutos después y ante las evidencias de la agresión, intervino el asistente de domador que separó con mucha dificultad a Harold de las fauces del león.
Aunque las lesiones no fueron de muerte instantánea, una complicación posterior de una avanzada diabetes sumió al rector en un estado de coma profundo, muriendo a la mañana siguiente. Su ataúd fue llevado a hombros por todas las calles de Stiffkey, la multitud se agolpaba para dar su último adios al rector. Su viuda se negó a vestirse de negro y llegó al funeral con un elegante vestido blanco como celebración de la vida tan limpia y dedicada que tuvo el rector de Stiffkey.
http://elbauldejosete.wordpress.com/2010/01/27/harold-davidson-el-padre-de-las-prostitutas/