En muchas ocasiones la vida no nos llena porque buscamos la felicidad que sólo emerge cuando somos quienes somos, plena y profundamente. Lo femenino crece espiritualmente cuando aprende a vivir en amor, en lugar de vivir esperando al amor. Lo masculino crece espiritualmente cuando aprende a vivir en libertad, en lugar de vivir luchando por la libertad. El concepto de femenino y masculino no trata sobre la diferenciación entre hombre y mujer, sino de la energía en sí.
La filosofía tántrica pone mucho énfasis en estos roles para tratar de desarrollar un relación de pareja elevada y no caer en el falso amor como el apego o la necesidad para terminar convirtiéndose en un camino destructivo.
El tantra, contrariamente a la filosofía vedántica, no solo respeta las acciones e interacciones en el mundo real y físico, que además las usa como una herramienta para la propia revelación del ser y el camino evolutivo. Siendo la relación de pareja y el acto sexual como uno de sus estandartes en esta materia concreta.
SIN APEGOS
Uno de los principales aspectos y en los que suelen caer la mayoría de las parejas es en el apego. Toda relación empieza como una chispa, la cual podrá nacer o no por alguna necesidad concreta. Más allá de ello, en una primera instancia no existe esa necesidad primordial por el otro. Con el tiempo, el amor acaba convirtiéndose más en una necesidad por tapar algún bloqueo emocional o la necesidad de sentirse queridos que la realidad última del “amor”. Este hecho bloquea el propio progreso y estanca la relación pues nos refugiamos bajo esa tela de polvo hasta que un día muere, la relación se rompe y tu mundo se desmorona. Es por ello que es importante saber crear y mantener el espacio de cada uno y saber que el amor y la relación de pareja es un aprendizaje mediante el compartir de caminos momentáneamente, ya que, por ruptura o por muerte, un día, pronto o tarde, estos se separaran. Viviendo bajo esa certeza, la relación se valora por lo que es y cada segundo es un regalo en nuestra existencia.
POLARIDAD
Este es uno de los aspectos básicos y elementales en el Tantra y una de las claves para mantener una relación de pareja sana y pasional por mucho tiempo. Basándonos en el hecho de que todo y todos somos energía y en que los polos opuestos crean atracción, las relaciones también están fuertemente influenciadas bajo este concepto. El motivo por el cual podemos sentirnos atraídos o no por otra persona, es directamente proporcional a la polaridad que exista entre ambos, no a nivel de carácter sino de energía. Para mantener esa atracción, es importante saber mantener dicha polaridad. ¿Cómo hacerlo? Básicamente manteniendo siempre el espacio de cada uno y no mezclarse completamente. El dormir todas las noches juntos y pasar mucho tiempo con el otro sin tener el propio espacio acaba creando una energía neutra, con lo que acaba convirtiéndose más en una amistad que en la pasión propia de los amantes. Es un proceso lento, casi imperceptible, pero esa pasión y esas ganas del otro van desapareciendo poco a poco hasta llegar al punto de preguntarse ¿que nos ha pasado?
Desde el punto de vista tántrico se recomienda no dormir juntos en la misma cama cada día, o a poder ser, vivir en casas separadas. Del mismo modo, pactar semanalmente uno o dos días de descanso sin verse e interactuar para gozar y convivir con el propio espacio de cada uno. Es importante desarrollarlo desde las primeras fases de la relación, más de lo contrario, al haber creado ya cierto patrón y apego, suele ser complicado (no imposible) comprenderlo por una de las dos partes y entenderlo como fruto de un problema en la relación.
Si se aplica dicha separación aun sintiendo el deseo de estar con la otra persona, genera posteriormente un deseo mayor por él/ella, manteniendo la relación viva y pasional todo el tiempo sin llegar agotarse.
COMPASIÓN Y COMPRENSIÓN
Normalmente solemos identificarnos en exceso en nuestros pensamientos, maneras de ver y vivir el mundo, bloqueos, caracteres, etc. y nos olvidamos que en la vida hay mucho más color que sólo blanco y negro. Cuando no logramos entender algo de nuestra pareja y con ello arranca una discusión, cada uno se mantiene firme en su postura recriminando desde su modo de ver el mundo, como debieran ser las cosas y como debería el otro actuar. Así, una tras otra, jamás se logra llegar a un fin y poco a poco acaba deteriorando la relación. Es importante tener esto presente y aceptar e integrar que las emociones, su modo de manifestarse y la razón por la cual lo hacen no tienen una regla básica. Lo que para mi puede ser algo altamente ofensivo, para mi pareja puede no afectarle y viceversa. Si nuestra intención es la de mantener una relación sana, vivir de y para el amor, y ayudar a nuestra pareja a entender sus bloqueos, entienda los nuestros, y fortaleza la relación en sí, es importante mantener siempre este concepto vivo y vivir desde la compasión y comprensión en lugar de querer implantar una manera de pensar, vivir o hacer , para buscar el equilibrio, conocerse mutuamente y saber como hacer feliz a esa persona que está a tu lado en lugar de producir mas daño.
COMUNICACIÓN
La falta de comunicación es uno de los mayores problemas y la causa más común de rupturas y peleas. Como todos sabemos, nuestra mente es un continuo torbellino de pensamientos. Crea, imagina, idealiza conceptos e ideas constantemente. Si en una relación no existe una buena comunicación CONSTANTE, HONESTA, ABIERTA y SINCERA, deja libertad absoluta a la mente de cada uno a imaginar, proyectar e interpretar las acciones del otro de un modo, normalmente, destructivo. Lo que causa un efecto dominó a partir del cual algo que en su raíz podía ser insignificante como un gesto, una palabra o algo que mal interpretamos, acaba convirtiéndose en un motivo de ruptura. Una buena comunicación no da pie a la interpretación y cualquier mal entendido puede solucionarse de inmediato.
ENTREGA
Entregarse a menudo se entiende como rendición, debilidad o admisión de una derrota. Aunque es cierto que estas pueden ser algunas de las definiciones de esta palabra, aquí la utilizamos con otro sentido. Entregarse significa dejar de oponer resistencia a la apertura total de lo tú eres. Significa soltar la tensión de lo que crees ser y comprender el profundo poder de lo que realmente eres. Significa abrirse sin barreras, emocionales o físicas y relajarse más allá de cualquier sensación limitante de uno mismo que pudiéramos tener. Entregarse significa amar sin límite. Significa bajar la guardia para que tu pareja pueda sentir tu centro: auténtico, descubierto e indefenso. Pero la auténtica entrega no consiste en adaptarse simplemente a lo que le plazca a tu pareja. Ni en entregarse a sus necesidades emocionales. La verdadera entrega consiste en atravesar estas necesidades secundarais, tanto las propias como las de tu pareja, relajarte y aumentar el deseo esencial de dar y recibir amor sin límite y sin condiciones.
Así como todo lo dicho en el artículo anterior podría aplicarse a cualquier relación de pareja sin “clasificarse” necesariamente como tántrica, los 5 siguientes son en cierto modo los que crearían está diferenciación reuniendo una perspectiva y filosofía en el comportamiento de una pareja basada complemente en aspectos de la filosofía tántrica y con un enfoque directo en la búsqueda del desarrollo de una relación espiritual.
MADUREZ ESPIRITUAL
Enfrentarse cara a cara con nuestros bloqueos, apegos, lados oscuro y ego no es tarea fácil, y si nuestra intención es desarrollar una relación para la propia evolución, nos encontraremos constantemente frente a frente con lo más oscuro de nosotros mismos. Es por ello que requiere cierta fortaleza y madurez espiritual para no caer en el torbellino de emociones y bloqueos que florecerán una vez tras otra para estar siempre en una posición centrada capaz de llevar los procesos de un modo armónico y fluido sin destruir ni caer en el propio abismo.
SHIVA / SHAKTI
El concepto de Shiva/Shakti podría decirse que es la columna vertebral del tantra. Tanto es su práctica de yoga y filosofía como en la aplicación a la pareja. Con este concepto se intenta encontrar el equilibrio entra ambos polos, masculino y femenino, para alcanzar la perfección en la unión.
De nuevo, mencionar que el concepto masculino y femenino expuesto aquí no tiene nada que ver con la diferenciación de sexos, hombre y mujer.
Es por ello que es importante establecer unas bases sobre lo que realmente trata.
La energía masculina, representada en el Tantra como el Dios Shiva, es la conciencia pura que trasciende todo. Aquello que es atemporal y omnipresente. A nivel más práctico, vendría a ser la capacidad de estar centrado en todo momento sin dejarse llevar por las emociones o circunstancias que nos rodeen en un instante concreto. Debe ser el punto de seguridad en el que sujetarse en cualquier estado, sabiendo que no importa que o como, siempre estará allí presente y sujeto.
La energía femenina, Shakti, es todo lo contrario. Es danza, creación, movimiento, nacimiento. Es vida. Cambio. Es todo lo que da belleza al mundo, al universo. A nivel práctico podrían ser las emociones, pensamientos, la impermanecia, el nacimiento.
No existe Shiva sin Shakti; ni Shakti sin Shiva. Aunque en el hombre, por norma general, predomine más una energía masculina y en la mujer la femenina, no excluye el hecho de en cada uno de nosotros existen ambas energías que se manifiestan en distintas actitudes y acciones de nuestro día a día y nuestro carácter.
¿Pero qué importancia tiene esto en una relación? Muy sencillo. Sino hay equilibro, hay destrucción. Es un juego de roles en el que cada uno debe desarrollar su función en un momento concreto y alternativamente. Si uno de los dos esta en un momento excesivamente emocional (shakti), y si su pareja no crea el equilibrio actuando bajo una posición centrada, sin dejarse llevar por el torbellino de emociones de Shakti (shiva), se creará una gran tormenta de emociones entre ambos que acabará por romper y dañar la relación y no llegar a ningún punto común y de evolución. Lo mismo sucedería de modo contrario si ambos permanecieran en un rol constante de shiva, donde no habría lugar a la danza de la vida y todo acarrearía un aspecto estéril, sin vida, pasivo.
Es por ello que este juego de roles es extremadamente importante llevar de un modo consciente en cada momento, ya que de lo contrario, causaría un choque entre polos difícilmente de solucionar.
DEVOCIÓN / ADORACIÓN (TRANSFIGURACIÓN)
Uno de los aspectos más hermosos dentro de la filosofía de pareja tántrica es la adoración entre ambos. Desde el punto de vista tántrico, cada miembro de la pareja debe admirar al otro como un dios o diosa. Debe trascender el cuerpo, el aspecto físico, el nombre, su historia y ver más allá de todo ello para conectar con lo más profundo, con su energía fuente. Shiva o Shakti. Cuando la pareja ve en el otro la representación de la energía masculina o femenina, su respeto y adoración es tan inmenso que solo puede nacer amor y el equilibrio alcanzado ofrece los frutos de una relación más allá de los límites de la mente y el ser humano.
A este proceso se le llama Transfiguración. Un buen ejemplo de transfiguración es puede apreciar en la película de Jhonny Deep, Don Juan de Marco, en la que es capaz de ver la belleza en cada mujer mas allá de su aspecto físico.
RITUAL (sexualidad)
Otras de las características de la pareja tántrica que le ofrece un toque creativo, carismático y sensual es su manera de interpretar el sexo. Este es un concepto que requería páginas y páginas de explicación por la cantidad de técnicas, consejos y demás que ofrece el tantra como ayuda y soporte para las parejas, sin embargo aquí haremos solamente una pequeña exposición de su significado.
Para el tantra, el acto sexual es la fusión entre Shiva y Shakti. Es la comunión entre los dioses, entre las energías fuente. El equilibrio máximo mediante el éxtasis. El lugar en el que la mente se funde en su Ser más puro y desaparecen todos los bloqueos, problemas, juicios, etc. de la vida común. Así, dicho acto, en contra de mostrarse como algo impuro, tabú, malicioso, se lleva a cabo como una práctica espiritual por sí misma. Es en realidad, un acto SAGRADO.
Para ello, en muchos casos se desarrollan rituales para facilitar una atmósfera y un estado de consciencia posible para destacar y gozar de la experiencia sagrada del amor en toda su plenitud, dejando de lado toda la morbosidad y fornicación propia de nuestro tiempo.
Los rituales deben interpretarse simplemente como un mero juego que ayuda a la mente a conectar con algo mucho más allá de la simple satisfacción física. Algo parecido a lo comentado en un post anterior sobre los Dioses como arquetipos.
CONTINENCIA (BRAMACHARYA) / SUBLIMACIÓN
Bramacharya (continencia sexual), es el cuarto de los cinco YAMAS. Desde el punto de vista védico, bramacharya no es mas que celibato. Los grandes maestros, santos y yoguis de todos los tiempos descubrieron el gran potencial e importancia de la energía sexual y como, por lo tanto, su derroche para algo menor a la evolución espiritual era el peor de los desafíos para aquel que quisiera alcanzar la “libertad”.
Sin embargo, el tantra, con su filosofía de hacer uso del mundo real y todas sus acciones, profundizo mucho más allá hasta el punto de descubrir que el problema no era el acto sexual en sí, sino la pérdida de su energía. ¿Qué significa? dicho claramente, la eyaculación para el hombre y los orgasmos explosivos para la mujer.
Todos, sobre todo los hombres, habremos experimentado como al excitarnos obtenemos muchísima energía repentinamente que al eyacular , no solo desaparece, sino que es mucho menor a la que teníamos antes de la excitación, dejándonos en un estado somnoliento.
El Tantra, mediante distintas técnicas, promueve el control de la eyaculación, llevando a cabo el acto sexual sin llegar a dicho extremo para poder extenderlo y usar la energía para otro propósito. Posiblemente, sea la parte más dura, la que requiere más paciencia y más tiempo para el hombre de practicar y asimilar, ya que en otro palabras se le está privando del placer del orgasmo. Sin embargo, la realidad es otra, ya que a largo plazo los orgasmos son muchísimo más intensos y múltiples en un mismo acto sin la necesidad de eyacular. Dicho en otras palabras ”uno se convierte en un hombre multiorgásmico”. Algo verdaderamente impensable para la mayoría.
Pero además, el tantra va mucho más allá, mas, no solamente entrena para desarrollar la capacidad de no perder esa energía sino que además desarrolla distintas técnicas para moverla y aplicarla en chacras superiores para el despertar de la energía Kundalini y del Camino hacia la “liberación”. A este proceso se le llama SUBLIMACIÓN.
Conclusión. Nadie dijo que el camino fuera fácil, sin embargo, sus frutos son mucho mas sabrosos, importantes y significativos. Además de transformar una relación de pareja en un camino evolutivo inmejorable siempre potenciando los valores del amor, adoración y respeto por encima de todo, consiguiendo una relación estable, sana y elevada para algo más que para un simple ¨cubre bloqueos emocionales¨
Pero lo más importante de todo y el primer paso para ello es que:
“NO HAY TANTRA SIN AMOR”
Fuente:
http://www.laguiasana.com