¿Cómo se hace para acompañar a una mujer anorgásmica a recuperar su sensibilidad si tiene, por distintas razones, renuencia a conocer su cuerpo? Por ejemplo, a mirarse o tocarse los genitales.
Todas las mujeres del mundo sienten, tienen sensibilidad. Lo que ocurre es que muchas veces no la conocen. No se puede ir demasiado rápido. No tiene sentido querer ir directamente a los genitales. El proceso debe ser de sensibilización muy paulatina. Por ejemplo, detectar qué le gusta, qué la erogeniza. Si está viva es porque algo la erotiza, si no, estaría muerta.
Es importante comenzar nuevamente a despertar la sensibilidad, a estimular los sentidos. Por ejemplo, se puede preguntar: “¿te gusta la música, el canto, la pintura?” Si le gusta la música, se puede empezar cantando, o cantando con las manos o con el pelo. Se puede tocar suavemente la piel con una pluma. Se puede también pintar con acuarela y cuando salen los colores, despacio ir llevándolos al cuerpo, por ejemplo, con pinturas para el cuerpo, de teatro.
El problema fundamental es que las mujeres muchas veces suelen ser erotizadas desde una perspectiva socialmente masculina, demasiado directa y a veces brusca. Eso de querer ir directamente a los genitales suele ser muy masculino.
Hay mujeres que dicen, por ejemplo, “yo no siento nada”. En estos casos, significa que están sobrepasadas de estímulos. La vibración en el cuerpo es tan fuerte que resulta insostenible. Cuando esto ocurre, el cuerpo ya no puede soportarlo y se cierra y la sensación es “no sentir nada”.
También es posible que una mujer esté tan afuera de su cuerpo, que su sensibilidad esté tan alejada de su piel que puede llegar a tener un orgasmo a la distancia, sin necesidad de contacto físico.
Es un proceso. No se va a lograr la sensibilización en una, ni en dos ni en 4 sesiones. La genitalidad es la parte más íntima y profunda, por eso es lo último a lo que hay que llegar.
Muchas veces, si la persona está muy caliente y no puede ir llevando paulatinamente el proceso de contacto con el otro, es como si estuviera teniendo relaciones sexuales sola. La calentura implica una sensación de urgencia tal que es como una desesperación por sacársela de encima. Es lo que suele verse en las películas cuando una pareja desesperadamente se besa y se saca la ropa a los apurones. Están desesperados por sacarse de encima la urgencia. Es una diferencia entre tener relaciones sexuales y hacer el amor con conciencia.
Los problemas sexuales no existen. Sin embargo, a muchas personas se le manifiestan en la sexualidad. Los problemas en la sexualidad, sin embargo, son el síntoma y no la causa. Es como cuando alguien dice que tiene problemas de dinero: “si tuviera dinero…”. Todo el mundo sabe que el problema real no pasa por el dinero. Con la sexualidad pasa lo mismo. Son problemas de aproximación a la vida. Por suerte, tienen solución.
Fuente:
http://senderosdelplacer.com.ar/