La importancia de los gemidos en el sexo. En el sexo, nadie reacciona igual, y una de las mejores muestras de ello es a la hora de expresar el placer que sentimos. Muchas personas hablan en la cama, otras están completamente calladas, y algunas gimen de manera ostentosa, lo que excita mucho a sus parejas.
Gemir es un primer paso para ser capaces de expresarnos y decir a nuestra pareja lo que necesitamos cuando estamos en la cama. Un pequeño gemido de placer le guiará por el buen camino, sin necesidad de palabras, y uno de desacuerdo le demostrará que algo no te está gustando.
Los gemidos de cada mujer son diferentes según cada momento. Empezando por no reprimirlos, puedes empezar a utilizarlos para excitarle más en vuestros juegos, graduando su intensidad según lo que sientes. Comprueba el efecto que producen en tu amante, y no olvides que a todos los hombres les gusta escuchar los gemidos de placer de su pareja, incluso presumen de haber hecho gritar a más de una.
Como curiosidad, te diremos que no solo las hembras gemimos. Se ha demostrado científicamente que las hembras gimen en el acto para estimular a los machos y que éstos logren llegar al clímax, y sin ello, en muchas ocasiones, su pareja nunca eyacularía.
En resumen, quédate con la idea de que la sensibilidad del oído humano hace que los sonidos de la pareja sexual se conviertan en un poderoso afroidisíaco, que podemos usar a nuestro antojo para mejorar nuestras relaciones.
Jaume Guinot