“Si decidís ampliar vuestra actividad, la actividad del pensamiento y del sentimiento, un día seréis capaces de enviar alimento a todo el mundo, un alimento celestial. Os preguntaréis
¿cómo es posible? He aquí un ejemplo. Os encontráis un hombre o una mujer que os inspiran admiración y amor. Decíos que, en el invisible, vuestros pensamientos y vuestros sentimientos viajan, y no alcanzan sólo a este hombre o a esta mujer, sino también a muchos otros que se encuentran aquí en su camino y que, de pronto, sin saber cómo ni porqué, se sienten ellos mismos habitados por el amor, la alegría y la esperanza.
¡Cuántas ondas circulan de esta forma por el espacio, sin saberlo aquellos que las emiten ni aquellos que las reciben! Intentad a partir de ahora tomaros en serio esta verdad, a fin de
que podáis dar a todos los mejores alimentos de vuestro corazón y de vuestra alma. “
Omraam Mikhaël Aïvanhov