Uno de los caminos más rápidos que conducen a la infelicidad es creer que la felicidad está basada en cosas tremendamente positivas que han de sucedernos. Nada más lejos de la realidad. Hoy voy a proponerte un ejercicio muy simple para que te des cuenta de que realmente la felicidad está fundamentalmente basada en pequeñas cosas que en su mayoría dependen únicamente de nosotros y de nuestra voluntad.
Los seres humanos nos sentimos atraídos hacia las listas. La prueba de ello es que si miramos a nuestro alrededor encontraremos un montón de ejemplo de listas: los libros más vendidos, las canciones más escuchadas, las mujeres más elegantes, los mejores vinos, las mejores universidades….
Hoy voy a invitarte a que confecciones una lista mucho más especial que todas esas. Voy a proponerte el ejercicio de elaborar tu lista de “las mejores opciones para ser feliz”, que incluya todas aquellas cosas que te aportan una sensación de paz, bienestar, plenitud,… En definitiva, todo ese conjunto de cosas que te hacen sentir esa emoción a la que llamamos felicidad. Para ello puedes apoyarte en las siguientes guías:
-Todo lo que te hace relajarte y sentirte en paz.
-Las personas más importantes en tu vida.
-Las cosas de la vida por las que sientes ganas de decir “gracias”.
-Los libros, películas o música que te gusta especialmente.
-Las actividades que más placer te producen.
-Los retos que has superado a lo largo de tu trayectoria vital.
-Los sueños que más anhelas y estas dispuesto a perseguir.
-Los pequeños placeres cotidianos de la vida.
Este es un ejercicio tremendamente poderoso, por que una vez tengas confeccionada esa lista, te servirá como antídoto frente a esos momentos de duda o dificultad que a veces se presentan en la vida. En esa lista tendrás reflejadas un montón de cosas que te hacen sentirte feliz… Y al hacer esta lista, te darás cuenta de que hay innumerables cosas que te hacen feliz que no cuestan nada y que dependen exclusivamente de ti. Empezarás a darte cuenta de que lograr ese estado emocional de felicidad es mucho más sencillo de lo que crees. Por ejemplo, esa lista puede incluir cosas similares a esta:
-Un momento de charla con buenos amigos.
-Una caminata por la naturaleza.
-Unos minutos de tranquilidad al sol.
-Leer un buen libro.
-Utilizar tus dones para ayudar a alguien que lo necesite.
-Ver una comedia.
-Sentarte junto al fuego de la chimenea.
-Tomar un te.
-Comprar unas flores.
-Abrazar a un ser querido.
-Reir con tus hijos.
-Dedicar unos minutos a no hacer nada.
-Tomar un baño relajante.
-Disfrutar de un amanecer o un atardecer.
-Escuchar música que te apasione.
-Dedicar un rato a leer y visualizar tus sueños y objetivos.
-Aprender una nueva habilidad.
-…
Las posibilidades a incluir en esa lista son infinitas.
¡Empieza a darte permiso para ser feliz! ¡Multiplica tus opciones de felicidad!
Y como comprobarás en su gran mayoría son cosas que dependen absolutamente de ti y de tomar una simple decisión. Pero en definitiva son esas cosas las que te acercan al gran objetivo de todo ser humano: el logro de la felicidad.
José María Vicedo –
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