Los demonios son seres malignos y sobrenaturales que disponen de inteligencia, ingenio y poder. Invaden nuestros hogares y se adherieren a los objetos. Los ataques a los seres humanos se pueden producir de varias formas: o bien influyen en sus mentes causándoles la tortura emocional utilizando sus puntos débiles o poseyendo sus cuerpos. Su poder les permite transformarse en cualquier forma que deseen, desde seres humanos a animales. Los demonios son los más comúnmente vistos como masas negras, de pie en las puertas o en esquinas de la habitación y en otros casos son descritos con cuernos largos. Odian a la humanidad de tal forma que piensan que deberíamos desaparecer, o en todo caso ser una raza esclava de ellos. La mayoría de las entidades demoníacas pueden hacerse pasar por espíritus buenos o puede parecer que se han ido en un momento determinado, pero en algunos casos son increíblemente pacientes y esperaran entre las sombras solo para enfrentarse de nuevo en el momento menos esperado y cuando nos encontremos mas vulnerables. Su principal objetivo es romper con el libre albedrío de las personas con el fin de dar paso a la posesión, a partir de la opresión. Esto puede tardar días, meses o años, pero el tiempo no es de interés para ellos… pues no se dan por vencidos fácilmente.
Apariciones demoníacas
Las apariciones demoníacas por lo general comienzan de una manera muy sutil. Sin embargo hay que ser consecuente con cada caso y analizar bien todas las situaciones que se producen a fin de poder determinar con objetividad y exactitud los fenómenos que se están produciendo. En algunos casos comienzan con los siguientes fenómenos: arañazos en las paredes, fuertes ruidos o pitidos muy agudos además de voces que llaman a alguien en particular. Estas y otras conductas son las que suelen compartir las diferentes características de un inquietante poltergeist. Pero cuando la gravedad del fenómeno avanza, por ejemplo se puede sentir como si alguien tirase de las mantas de la cama, los objetos caen solos de las paredes o estanterías, en incluso en algunos casos se pueden comenzar a oír sonidos guturales.
¿Por qué realizan los demonios estos actos?
Debido a que quieren que sepas que tu formas parte del control y quieren que les temas, puesto que ellos se alimentan de esta energía…la energía del miedo. Puede ser agotador si la persona se encuentra en un estado bajo de animo. Ya no digamos si hay una depresión o tristeza profunda…
El miedo es lo que necesitan los demonios, solo cuando se libera esta energía pueden acceder a las personas, así que cuanto más les temamos más fuertes se vuelven. Una vez que logran crear una atmósfera de miedo concreta, empiezan a exagerar sus poderes, a continuación, los ataques personales comienzan, rasguños en la piel, empujones y golpes. Una marca a menudo asociada con un ataque del demonio es un cero de tres líneas, que se cree que es el signo de la burla de la Santa Trinidad. El aire en la zona afectada se siente espesa como la niebla y la temperatura cambia drásticamente, por lo general cada vez más frio, esta es la señal más clara de que una entidad muy negativa o diabólica de otro plano ha entrado en el nuestro.
Accesos demoníacos
Estos demonios siempre utilizan el mismo sistema, entran en nuestro mundo a través de una puerta de entrada…y a menudo son espejos, esquinas, alcantarillas, y también se sabe que utilizan lugares de mucho dolor (como ciudades en guerra) o incluso cuevas naturales. Los lugares que se cree que utilizan para cruzar son las líneas “ley” que también actúan como un imán o un portal de demonios, así como de otras entidades. Otra forma para que puedan entrar es a través de un portal energético, por lo general abierto mediante el uso de un tablero de Ouija o bien a través de algún ritual de magia mediante una sacerdotisa o sacerdote.
La lucha contra los demonios
Una acción demoníaca requiere una acción inmediata, porque cuanto más tiempo permanece en un lugar mas fuerte se vuelve. Se tendrá que buscar la ayuda de un experimentado grupo paranormal o bien (y esta es la recomendación mas razonable) hay que pedir ayuda a un demonólogo profesional. Por lo general el exorcismo será realizado por un sacerdote ordenado para librar a la casa o a la persona en cuestión del demonio. Hay, sin embargo, otros métodos que pueden funcionar. Se dice que las personas poseemos la capacidad de hacer frente a los demonios y de poderlos controlar, pero hasta que el ser humano no llegue a la siguiente fase de evolución, a “ser angelical” no podremos conseguirlo. Sin embargo en algunos casos si se consigue reuniendo las suficientes fuerzas dentro de nosotros mismos ayudados de seres de luz, ángeles o “guías”, es posible que podamos conseguirlo. Hay que ser precavido y tener cuidado en no caer en sus juegos, jamás, nunca un insulto, no es valido el enfrentamiento, ni el enojo, y sobre todo no mostrar miedo. Se cree que es como un código de conducta con ellos. A veces es posible que te dejen de inmediato. El secreto está en la persistencia y sin miedo. Los demonologos aseguran que a los demonios no les gusta ser ignorados. Si no se puede conseguir que los demonios tengan temor de nosotros entonces el juego habrá terminado.
Hay una cosa que se debe entender, las técnicas que se han dado pretenden ser una solución temporal, no de carácter permanente, y por lo tanto estos métodos son posibles que no siempre funcionen. Si realmente se sospecha que hay una presencia demoníaca, recomendamos encarecidamente que NO utilices ningún método o cualquier intento para librarse de esta presencia. Una creencia muy común es que si tenemos una cruz o agua bendita el demonio no nos hará daño y se alejará de inmediato. No hay nada de verdad en esto. De nuevo, repito lo mejor es dejar a los sacerdotes o demonólogos cualificados realizar su trabajo.
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por gerundio Hoy a las 13:00
