Muchos de los factores que intervienen en las etapas de tomas de decisiones de cada persona dependen del individuo en sí, y aunque algunos de los factores puedan depender de otras personas o de circunstancias ajenas a la propia voluntad, se puede entrenar para manejar de forma eficaz los que se tiene control sobre ellos.
Cuando se trata de dar soluciones a problemas los obstáculos más comunes que nos solemos encontrar son:
- Incapacidad de cambiar las respuestas fijas, de siempre.
- Incapacidad de adaptar las formas de percepción a las circunstancias cambiantes.
- Excesiva confianza en un asunto.
- Bloqueos sociales o culturales.
- Bloqueos emocionales.
Algunas recomendaciones para desbloquear inconvenientes en los procesos de tomas de decisiones en la vida.
Desde un principio permítete el equivocarte, y tómate cualquier resultado como un aprendizaje, con ello te evitaras tanto la posible frustración por los fracasos, como la vanidad por los excelentes resultados, consiguiendo con ello salir fortalecido de todo proceso.
Aunque en la decisión tenga mucho peso la racionalidad, ten en cuenta, en la medida de lo posible, tus emociones y sentimientos, pues será el factor personal y subjetivo lo que permitirá que te sientas, como que has tomado la decisión correcta, ya que somos seres integrales, y son las emociones indicadores base de adhesión o rechazo para tomar la decisión adecuada.
En decisiones que sean significativas para ti, ten en cuenta tus valores y prioridades, así mantendrás una adecuada calidad de vida, la cual no se verá condicionada por unos posibles beneficios temporales, al tiempo que fortalecerás tus propios principios.
Posibles objetivos, como son la perfección absoluta, ser siempre ganador o el número uno y tener todo bajo control, lo has de desestimar para poder elegir en cada momento, sin perder de vista opciones posibles y reales.
Gestiónate en el tiempo de forma adecuada, siendo consciente de tus ansiedades y temores, pues si los conoces y los puedes controlar, podrás elegir sin las urgencias ni las presiones que los pensamientos negativos pueden crearte.
Aunque has de tener en cuenta las personas que puedan estar involucradas en tus decisiones, no esperes de ellas tus decisiones, y considera como afectarán tus decisiones, en las relaciones con ellas.
Has de tenerte en cuenta a ti mismo, los humanos no vivimos la perfección como para nunca equivocarnos, ni tampoco eres tan inexperto como para no poder actuar de forma correcta, las realizaciones reales no suelen estar en ninguno de los dos extremos, así que ponte en la acción.
Has de ser consciente de tus miedos tratando de remediarlos antes de ponerte en acción.
No vivas un mundo de excusas para no hacer lo que te corresponde realizar con el fin de lograr tus objetivos, ponte en acción, aunque lo que hagas pueda ser mejorable.
Tu sabes lo que quieres y cómo quieres ser, no lo observes no lo razones o justifiques, si eres capaz de hacerlo el cambio se te dará solo. Tú eres el que cambia así que el cambio no es ajeno a ti, ni lo vas a aprender, pues si tú quieres ese cambio, en sí, ese cambio ya está en ti.
Permítete la suficiente flexibilidad para lograr superar los límites tradicionales de tu experiencia y de tu conocimiento.
Dver.
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