¿Sabes que conocerte más y mejor a ti misma te puede reportar datos maravillosos sobre ti? ¿Sabes que al observarte te puedes dar cuenta de detalles que te pasaban desapercibidos y que estos pueden mostrar cualidades extraordinarias innatas en ti?
El punto de partida para empezar a observarte no necesariamente tiene que ser una mala experiencia, este puede ser sencillamente el plantearte contundentemente conseguir una meta perseguida y nunca alcanzada, o anhelos de sentirte mejor y más feliz.
Ser la protagonista de tu vida y a la vez espectadora de la película de tu vida es una valiosa técnica para aprender de ti misma, sí, has leído bien: aprender de ti misma y por ende conocerte más y mejor pudiendo así hacer cambios que emponderen tu vida y te encamines hacia el guión que realmente quieres interpretar.
Si para algo sirve el pasado es para aprender y mejorar, evitando caer una y otra vez en la misma piedra. Sin duda aprender de vivencias pasadas nos ayuda a conocernos, madurar y cambiar aquello que creamos necesario. Para esto necesitas lucidez, motivación y obervarte. Todo, por supuesto, sin obsesiones que te atrapen y paralicen.
Conocer mejor tus habilidades y limitaciones se ayudan a:
Tener control en tu vida, tu llevas las riendas, no las circunstancias, no las diferentes situaciones, no las personas más cercanas a ti, no tus compañeros de trabajo, no tus alumnos. Tu tienes las riendas y vas dirigiendo tus propios pasos.
Identificar fácilmente tus talentos innatos.
Qué te interesa cultivar y practicar
Qué cosas eliminar o en todo caso minimizar
Como sabes todo requiere esfuerzo, y a mayor esfuerzo mayor será la recompensa. Para empezar con el hábito de observarte te dejo dos claves:
Al terminar el día, antes de ir a la cama repasa los acontecimientos de la jornada, intenta observarlo como si estuvieses viendo una película, anota aquella reacción, palabras, actitud… que creas necesites analizar, cambiar, mejorar.
Constancia. Practica con constancia el ejercicio anterior, te aseguro que descubrirás cosas sobre ti de las que no eras consciente.
Recuerda tener una actitud abierta, esfuerzo y practica. No juzgarte ni criticarte, aprovecha para felicitarte por aquello que te gusta y/o consideras que has hecho bien y de lo demás sencillamente dite que es cuestión de tomar acción para mejorar, cambiar o eliminar.
Mercedes Mata
"La Coach de la Maestra"
www.lacoachdelamaestra.com