Un pequeño sitio al aire libre podrá convertirse en nuestro oasis cotidiano: un balcón, un pequeño patio o una gran terraza o fondo; con pocos arreglos es posible generar un lugar encantado que nos sirva para recargar energías y oxigenarnos, pero también como hábitat para seres mágicos.
Tanto los seres fantásticos, como hadas y duendes, o los pájaros, mariposas y plantas, son todos ellos seres puros, llenos de vida que atraen energías positivas y protectoras al ambiente que habitan. Rodearnos de esta flora y fauna encantadoras es una sencilla y excelente idea para que nuestro hogar se armonice y atraigamos a nuestras vidas dicha y buena suerte. Recuerde que hadas y duendes son un buen barómetro para conocer las vibraciones de nuestra casa, puesto que si hay energía negativa, se irán, también las plantas y los animales se enfermarán.
Preparar el ambiente
Antes de empezar habrá que estudiar el espacio disponible y los elementos que allí se disponen hasta el momento. Algunas personas realizarán más modificaciones que otras: no se desesperen. Estos son algunos consejos muy útiles para realizar una limpieza energética del lugar:
- Elimine las plantas enfermas, muertas o marchitas.
- Si el lugar recibe muchos ruidos molestos de los alrededores (motores, bocinas, máquinas, etc.) deberá amortiguarlos con alguna cortina absorbe ruidos, sin que quite la luz en demasía (pueden ser arbustos en los laterales o esterillas).
- No debe haber basura en el lugar como ser chatarra, artefactos viejos, trapos, etc.
- Si hay postes de electricidad a la vista habrá que ocultarlos con plantas.
- Las columnas cuadradas se consideran desfavorables, ya que cada arista esta enviando energías que apuntan como flechas hacia las cuatro direcciones, es por eso que se aconseja cubrirlas con enredaderas.
- Si hay un gato o perro agresivo o muy revoltoso, podrá espantar a las hadas, a los pájaros y a otros habitantes. Procure que la mascota se amigue con el hábitat sus habitantes.
- Macetas o recipientes rotos deberán ser reemplazados por otros en buen estado.
- Si no hay tierra a la vista, y los pisos son de material, contemple la posibilidad de al menos tener un cerco de tierra, es vital para el jardín, pues los duendes y muchos bichitos benéficos viven allí.
Sería erróneo pensar que el jardín encantado debe ser un lugar sumamente prolijo y limpio, con diseños artificiales y geométricos. Por el contrario, lo que se busca es que tenga una personalidad muy natural, que sea frondoso, colorido y fresco, pero sutilmente cuidado por su dueño.
Un espacio armonioso
Una vez eliminados los objetos que ensuciaban y bloqueaban la libre circulación de energía, habrá que disponer con criterio armonioso distintos elementos:
Plantas: los colores y aromas que ellas aportan son la estructura soporte que dará personalidad a nuestro jardín y ofrecerá el entorno adecuado para duendes y hadas protectores. Pero también atraerán a los pájaros, cuyo canto encanta a los seres fantásticos. Si hay flores de colores, sin dudas vendrán mariposas, que con su revoloteo y alegría divierten a las inquietas hadas. No se asombre si las confunde. En cuanto al tipo de plantas que debe elegir no hay restricciones, escoja las que mejor se adaptan a las condiciones lumínicas, de viento y humedad del lugar. Procure combinar distintas texturas y tamaños, arbustos, arbolitos si tiene lugar, plantas más pequeñas. Es importante que el jardín tenga rincones sombreados para el descanso. También son fundamentales las especies perfumadas y aromáticas, pues esto complace mucho a sus habitantes (especialmente a las sílfides) y también al ser humano que así purifica energía a través del olfato.
Las predilectas: jazmín, rosas, tomillo, tréboles, crisantemo, lavanda, petunia, verbena, zinnia. Cuide mucho sus plantas, manténgalas sanas mediante el riego y fertilizantes orgánicos, nunca químicos.
Cercos: Los cercos juegan un papel importante en el jardín. No es conveniente realizar la poda de ligustrinas y otras plantas para lograrlos, ya que esto priva a las plantas y árboles de sus formas naturales y los fuerza a crecer en línea recta, ocasionándoles sufrimiento. Los arbustos de hojas anchas de color verde oscuro (por ejemplo, jazmín del cabo, farolillo japonés, rosa china) son buenos conductores de la energía. Un cerco puede generar intimidad y protección. Si se lo coloca a lo largo de un camino curvo, puede conducir a los habitantes a lugares específicos con fragancias y colores diferentes dentro del mismo jardín. También puede lograr pequeños cercos con macetas, piedras o troncos.
Escondites: las hadas y los duendes (especialmente los trolls) adoran esconderse entre las plantas, en huecos de troncos, de la pared. Allí descansan o juguetean. Procure crear estos pequeños espacios de intimidad, ya sea con troncos huecos, regaderas, piedras, casitas para pájaros, o con la distribución misma de los arbustos.
Agua: Cambia mucho tener agua en el jardín o no tenerla. Este elemento es imprescindible no sólo en el momento del riego, sino como presencia permanente del lugar. El agua es vida y si está en circulación trae buena fortuna. El suave sonido del agua en movimiento es muy terapéutico y endulza los oídos de humanos, seres fantásticos y animales en general. Si coloca estanques, cascadas o fuentes tendrá asegurada la visita frecuente de pajaritos y ninfas (espíritus del agua). Si hay poco espacio en su jardín o si no quiere instalar un estanque, puede usar tinajas grandes o barriles. Un bebedero para pájaros y también una pequeña fuentecita con agua cayendo son fáciles de instalar en poco espacio. No se prive de este placer, da un toque muy especial.
Comederos: los habitantes del jardín se sentirán muy complacidos si les deja semillas. Para que los pájaros se acerquen a buscarlas estos comederos deben estar a cierta altura, sobre la rama de algún árbol que los haga sentir seguros como lugar de refugio en caso que se asusten. En los viveros se venden comederos para aves, pero también puede confeccionar uno: simplemente una bandeja de madera colgada con tirantes de la rama, sobre la que apoyará semillas, de girasol, mijo o alpiste, y un recipiente playo con agua limpia y fresca. A los duendes déjeles nueces y algunas frutas (cuide que no se pudran) cerca del suelo, en algún escondite.
Otros señuelos: las guías de plantas son fáciles de conseguir en los viveros. Vienen con formas de hadas y duendes guardianes que se clavan en las macetas. Servirán como elementos llamativos para los seres fantásticos ayudando a su orientación dentro del espacio. Los llamadores de ángeles son un accesorio perfecto para colocar en el jardín, la brisa hará que emitan sus mágicas notas con frecuencia.
Los jardines son uno de los lugares favoritos de los seres mágicos. Gnomos, duendes, hadas… a todos ellos les encanta vivir rodeados de flores, de animales, al amparo dela Madre Tierra.Cantar con los pájaros, resguardarse del sol bajo una hoja que da algo de sombra… Normalmente permanecen ocultos a los ojos de los humanos, a veces demasiado curiosos… pero también se dice que se muestran en ocasiones a las personas buenas que realmente tienen fe en ellos.
http://vardablog.wordpress.com/2012/11/05/como-tener-un-jardin-magico-en-su-hogar/