Cuidar de ti mismo abarca esas actividades que ya conoces: comer y dormir bien; hacer ejercicio; relacionarte con otros; desconectar y practicar tus aficiones, etc.
Es decir, lleva su tiempo. Tiempo que a veces es ocupado por obligaciones y demandas secundarias.
Pero, lo primero es lo primero. Y lo primero eres tú: Cuidar de ti, que también es un excelente regalo para aquéllos que te quieren.
A continuación, te proponemos medidas imprescindibles con vistas a ese objetivo.
Reserva un poco de tiempo para ti cada día
Así sean 30 ó 15 minutos. Un tiempo para desconectar, hacer lo que te plazca y recobrar energías.
Reserva un día para ti
Un día a la semana o uno al mes; lo que puedas.
De acuerdo, tu agenda está llena de cosas que hacer para los demás o en pro de tus objetivos. Quizás aplaces ese día de descanso que mereces, esperando que aminore el ritmo, pero el ritmo sigue como siempre.
Reclama tu tiempo. Necesitas un respiro y lo sabes. Por eso sería buena idea que le hicieras desde ya un hueco en la agenda.
No sientas culpa
¿Te sientes culpable por descansar? ¿Culpable por algo tan básico? Combate esa sensación, porque todos somos más productivos, pacientes y amables cuando nos tomamos tiempo para descansar.
Para tu tranquilidad, que sepas que esa sensación de culpa va desapareciendo conforme veas que, efectivamente, rindes más cuando estás despejado.
Desconecta el teléfono
El teléfono y todo adelanto tecnológico que te haga localizable: Desconecta de la tecnología para conectar contigo.
Y, si no, atiende sólo las emergencias. (Qué remedio…)
¿Qué consigues con medidas así? Cuidar de tu salud, reenergizarte y aumentar tu calidad de vida. ¿A que vale la pena?
http://tusbuenosmomentos.com/2012/05/tiempo-cuidar-de-uno-mismo/