Conviertete en Amor

Sed de amor,

Muchos de nosotros estamos sedientos de amor – literalmente muriendo poco a poco cada día por falta de amor. Y, sin embargo, mientras más desesperados estamos por ello, menos probable es que lo obtengamos. ¿Por qué? La razón es que estamos ciegos. Pensamos que el amor tiene que venir en una forma específica y de personas concretas, pero esto es una ilusión. El amor está en todas partes que miramos. La persona que te sonríe en la calle te ofrece un regalo de amor. La persona que sostiene la puerta para que entres o salgas de un edificio te ofrece un regalo de amor. Cualquier persona que se ofrece a ayudarte de cualquier manera, te ofrece amor. A veces, la gente te ofrece amor sólo viéndote, o pensando en ti, o escribiendo un comentario a algo que publicaste en Internet. Todo eso es amor.

Tienes Derecho a Conectarte

La razón por la que no lo vemos es que estamos ciegos a ello. Nos negamos a verlo porque estamos condicionados para no hacerlo. Se nos dice que no somos merecedores. Que estamos solos en el mundo y que todo el mundo solo ve por sí mismo, pero esto no es cierto. La verdadera naturaleza de las personas es el amor y la conexión. Somos una comunidad, lo creas o no. Y estamos aquí para ayudarnos unos a otros. Ofrecer pequeños regalos de amor es una parte del pacto que hacemos cuando nacemos. Fomenta el sentido de pertenencia y de conexión que se nos ha otorgado en espíritu al entrar en el mundo físico. Sin él, estamos perdidos y solos y sintiéndonos abandonados.

Recibir

Pero incluso si nos las arreglamos para ver el amor que se nos es ofrecido por los que nos rodean, a menudo no sabemos recibir ese amor. Decimos – oh, es sólo esa persona – ¡eso no cuenta!. O, bueno en realidad no se trata de mí, así que no lo tomaré. Nos negamos el regalo del amor, al negarnos a recibirlo. Literalmente, tomamos ese hermoso paquete que ha sido envuelto con gran cuidado y aprecio y lo tiramos a la basura sin siquiera abrirlo para ver la belleza interior.

Teniéndo Sed

Y así, seguimos sedientos – añorando aquello que sentimos que no podemos tener – deseando la pareja que nos quitará el dolor y saciará nuestra sed para siempre. Pero eso es poner demasiada presión en una sola persona. Es más de lo que será capaz de darnos – porque nunca iba a ser de esa manera. Se requieren pueblos que te amen. Se necesita cada persona cada día que te llene y una sola persona nunca podrá ser la fuente de amor que necesitas en el largo plazo.

Sé Amor

Y cuando digo que se necesita cada persona cada día para que te llene, esto te incluye a ti. Debes aprender a ser amor, si realmente deseas ser pleno en el largo plazo. Es tu voluntad de amar a aquellos a tu alrededor – no darles, no hacerte cargo de ellos, no tener sexo con ellos, sólo amarlos- no importa quienes sean – lo que finalmente se convierte en tu fuente interior que te mantiene lleno para desbordarlo.

Comienza poco a poco

Sé que esto es un cambio de mentalidad de lo que se te ha enseñado. Sé que es extraño a tu condicionamiento, pero empieza poco a poco. Observa todas las formas en que la gente se preocupa por ti cada día. Realmente recibe el amor y el afecto que te es ofrecido en formas sutiles diariamente. El conductor que espera un momento más para que puedas subir al autobús. La cajera, que te brinda una sonrisa mientras buscas a tientas en tu bolsa tratando de encontrar tu cartera. La persona que te cede el paso en el tráfico. La persona que limpió la cafetera anoche en la oficina para que puedas comenzar fresco el día de hoy. Pequeñas cosas que juntas forman un gran depósito de amor esperándote para que te sumerjas en él.

Convirtiéndote en amor

Y cuando comienzas a recibir estos regalos, encontrarás que te estás llenando con el amor que está a tu alrededor. Cuando recibes lo suficiente, podrás empezar a amarte a ti mismo también. Aprenderás a cuidar de ti mismo tan bien como lo haces con otros. Y cuando aprendes esto, llenarás más aún hasta que desbordes amor hacia el mundo que te rodea y te conviertes en uno con el amor que te rodea. Es algo hermoso

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