Thor es el Dios nórdico por excelencia, apodado el Dios del Trueno. Se bastaba de un cinturón, el cual le doblaba su fuerza; y de un martillo que desprendía rayos. En la mitología, el trueno y el rayo eran representados por el guerrero más poderoso, el sumo protector.
Thor vivía en lo alto del árbol mítico, en Asgard (la morada de los dioses). Era hijo de dos dioses, su padre Odín (Dios de los cielos) y su madre Jord (Diosa de la tierra). También tenía una hermana llamada Freya (Diosa del amor y el sexo). Además, tenía un lugar de veneración, un roble, el llamado “Roble de Thor”.
Se encargaba de mantener el orden en la Tierra combatiendo a gigantes, pero la némesis de Thor (su enemigo por excelencia) era la serpiente gigante de Midgard (según la mitología era tan enorme que podía dar la vuelta a la Tierra).
El mito de Thor contrasta con la realidad
Todos los paganos creían en Thor, pero todo iba a cambiar a partir del 723 d.C., cuando una nueva religión llegó decidida a convertir a todos, en creyentes de Jesucristo. El cristianismo hizo mella entre los nórdicos, cuando San Bonifacio, reunió a todo el pueblo y dijo: “Si Thor es tan poderoso, si talo el Roble de Thor, seguro que vendrá y me abatirá”; pero no fue así y la caída del roble, fue un duro punto de inflexión para los nórdicos. Sin embargo, muchos paganos no renunciaron a su dios, y crearon un símbolo para contrarrestar a la cruz cristiana, el martillo de Thor.
De este modo llegamos a uno de los muchos mitos de Thor, en esta historia Thor pierde su martillo, y con las manos desnudas es impotente ante los gigantes. Thor ha de recuperarlo y envía a su siervo a la tierra de los gigantes a por él, pero cuando se encuentra ante el rey ogro, éste lo chantajea, y le dice que le devolverá el martillo, si le entrega a Freya en matrimonio.
Los dioses convocan una reunión, y acuerdan un plan arriesgado; disfrazar a Thor como si fuese su hermana y enviarlo a la tierra de los gigantes para contraer matrimonio. Thor sabe que no tiene elección y accede. Cuando llega a la morada del rey ogro, éste le devuelve el martillo (creyendo que era Freya), y en ese instante, Thor recuperó todo su poder.
La ironía de este suceso, es que Thor, ha perdido su martillo (símbolo de la masculinidad y fuerza) y por ello no puede seguir siendo un hombre y debe transformarse en lo contrario (una débil mujer) si quiere recuperarlo. En la realidad, este mito fue utilizado por los nórdicos para simbolizar el resurgimiento de Thor ante el cristianismo. Aunque finalmente, los paganos acabarían cediendo ante el cristianismo.
Con los cristianos abriéndose paso por el norte de Europa a través de la resistencia pagana, hasta llegar a Uppsala (Suecia), donde encontramos un segundo mito: el defecto de Thor. A pesar de ser un dios no podía vencer a las fuerzas de la naturaleza. La historia cuenta que un rey ogro desafía a Thor a tres pruebas (todas ligadas en secreto a las fuerzas de la naturaleza).
El primer reto era beberse un cuerno lleno de cerveza, pero inexplicablemente la cerveza del cuerno nunca se acaba y el nivel no desciende, Thor ha fracasado. El segundo reto consistía en levantar la pata de un gato gigante y Thor vuelve a fracasar. La tercera prueba era luchar contra una anciana y vencerla en un combate, pero Thor es derrotado.
Así el rey ogro consigue su deseo, humillar a Thor ante los ojos del mundo. Y revela su secreto: primero, el cuerno era en realidad el mar y nunca podrías haberte bebido el mar. Luego, el gato era en realidad la serpiente de Midgard y nadie puede coger en peso algo que da la vuelta a la tierra. Y por último la débil anciana representaba la vejez y nadie puede vencer ni escapar a eso.
Así, llegamos al Ragnarök (libro sagrado nórdico), último mito de Thor, en él se dice que todo acabará con la destrucción de la tierra en un juicio final. Aquí, encontramos coincidencias con otras culturas, por ejemplo, con la profecía de Nostradamus, con los mayas o con la propia biblia (con el apocalipsis). Pero hay una diferencia, en el Ragnarök, los dioses mueren.
Este juicio final, acaba con la batalla entre Thor y la serpiente de Midgard, Thor le asesta un golpe letal a la serpiente, pero desgraciadamente se queda indefenso ante el veneno de ésta, así la batalla acaba con la muerte de los dos.
Según el Ragnarök, todo quedará destruido, excepto el árbol de la vida, en el cual un hombre y una mujer se ocultarán dentro, para cuando todo acabe, salir y crear un nuevo cosmos. Una vez más, otra coincidencia con la religión cristiana, son los Adán y Eva vikingos. Es decir, el final nórdico es similar al comienzo bíblico.
Pero realmente, no se trata de una coincidencia, sino que, cuando se escribió el mito del Ragnarök, los cristianos ya estaban bien asentados por aquellas tierras, y cambiaron las escrituras nórdicas, por el comienzo del viejo testamento, así, los dioses nórdicos mueren y nacen Adán y Eva.
El cristianismo acaba por imponerse
Los seguidores de Thor fueron desapareciendo poco a poco. Aún así, en la lengua inglesa, el día de la semana “Jueves”, fue nombrado en su honor “Thursday”, proveniente de Thor. Hoy día, sigue vivo entre nosotros, como héroe del cómic y del cine.
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por gerundio Hoy a las 11:56
