El Miedo y los Ángeles

A que le tienes miedo, pregunta tu ángel. Nuestros temores pueden ser infundados por circunstancias externas, por algo que no ha sucedido pero pensamos que va a suceder, la mayoría de éstos miedos son heredados, si lo piensas un instante tienes miedos que no son tuyos, son de tus padres y se lo aprendiste a ellos, pueden ser infundados por creencias, o pueden ser infundados por campañas a nivel mundial que solo saben sembrar el miedo a través de noticias como ataques terroristas, ladrones, por desastres naturales, por los accidentes, etc., y esto sin sumar el miedo a la soledad, el miedo a hablar en público, el miedo a los cambios, el miedo a….todo. Dicen los Ángeles: éstos son miedos irracionales que paralizan tu voluntad y te limitan a expresar tu verdadero ser y evitan que Dios pueda manifestarse a través de ti.

En nuestro camino hemos ido dejando atrás mucho de esos paradigmas y nos vamos liberando de miedos, hoy en día tenemos muchísima asistencia por parte de nuestros amigos angelicales para ayudarnos a reconocer y desprendernos de los temores, lo hacen a través de sus mensajes en libros, artículos, personas, películas etc., sin embargo me insisten en que ustedes deben preguntarse porque le dan tanto poder a lo negativo? Resulta más fácil creer en lo malo que pueda pasar “que aun no ha sucedido ”, que en lo positivo, si solo le diéramos a los ángeles la oportunidad de mostrar toda su grandeza, tendrías milagros cada día solo es cuestión de creer.


Frente a tus miedos:

Escribe en un papel cada miedo que tengas, sin razonar nada…solo escribe.
Reconoce de donde viene, fue heredado? alguien te anticipo que te ocurriría algo malo?, crees que te hicieron algo? Naciste con ese temor?, etc.
Enfrenta cada miedo y piensa “que es lo peor que me puede pasar?”
Llenas tu mente de pensamientos-sentimientos positivos: Yo estoy perfectamente protegido, mis Ángeles me acompañan, Dios me ama, yo me amo, por lo tanto a partir de ahora este miedo…(mencionas tu miedo y tomas el papel en que lo escribiste) ya no tiene poder sobre mí, se lo entrego a mi Ángel de la Guarda (si conoces el nombre de tu ángel lo mencionas en ese momento) porque creo en el poder de los Ángeles como mensajeros de Dios y la luz de Dios nunca falla!
Olvídate del desenlace solo confía en que tu Ángel se ocupará de él. Suéltate y relájate. Esto es un entrenamiento, educa tus pensamientos para que sean solo positivos llenos de confianza, bondad, gratitud y contemplación.
No me creas lo que te digo, solo hazlo y confírmalo por ti mismo, si estás con tus ángeles que malo te puede pasar?.

Sandra Castellanos