JuzgarJuzgar es un acto humano, nacido de la simpleza con que suele funcionar nuestra mente.
Somos seres que juzgan todo, a sus semejantes, a la Naturaleza, al Universo, a Dios…
En este primitivo acto cotidiano de juzgarlo todo perdemos la visión mayor, la visión amplia de un Universo maravilloso, creativo, y amplio en conceptos y en leyes.
Pero sobretodo, perdemos valioso tiempo que podríamos utilizar para provecho propio y de todos, utilizando las leyes universales que nos proveen del éxito y la abundancia que tanto deseamos.
La abundancia que nos rodea y que es nuestra por haber nacido humanos, comunicadores de deseos, elegidotes de destinos…
Juzgamos todo, hasta nosotros mismos en lugar de intentar comprendernos como seres humanos completos que somos, con nuestras virtudes y nuestros defectos, con mayores o menores posibilidades en cada área.
Juzgamos y criticamos sin poder detenernos, perdiendo así nuestras facultades creadoras de un futuro mejor, desperdiciando tiempo valioso de ser felices y exitosos.
El éxito y la abundancia tocan a tu puerta cada día, brindándote la real oportunidad del cambio, aprovecha tus oportunidades, deja de perder el tiempo.
El Universo no nos juzga, solo nos provee de consecuencias, lecciones y de oportunidades para equilibrarnos y aprender a través de la ley de la causa y el efecto.
C.G. Jung
Fuente:
www.creaturealidad.com