Kant proponía que el espacio y el tiempo son
las condiciones
de la posibilidad del conocimiento
de la física,
de la matemática y
de la geometría y que estas condiciones no provienen
de la experiencia sino que son intuiciones
de la razón; que el objeto
de conocimiento no tiene una realidad en sí y por sí sino una realidad objetiva en relación con el sujeto; y que lo que la razón conoce por intuición asombrosamente coincide con la experiencia externa.
Desde este enfoque, cualquier teoría que tenga un fundamento matemático es digna
de tenerla en cuenta, aunque parezca descabellada e imposible.
Dieter Lüst, profesor
de física matemática y teoría
de cuerdas en la Universidad Ludwig Maximilian, Munich, Alemania, y director del Instituto
de Física Max Planck,
de ese mismo país, se pregunta si la teoría
de cuerdas es una ciencia o si es una teoría metafísica y expone su perspectiva, en la edición
de setiembre pasado
de “Investigación y Ciencia”.
La teoría
de las cuerdas podría llegar a convertirse en una teoría del todo, pero todavía desafía los paradigmas
de la física.
Esta teoría propone que nuestro universo no estaría compuesto
de partículas sino
de cuerdas, o sea
de pequeños objetos unidimensionales que vibran; y esta vibración se manifestaría como partículas elementales.
Según algunos físicos teóricos, esta teoría exige la existencia
de otros universos, los cuales serían diferentes al nuestro, con otras leyes
de la física, otra forma
de partículas elementales y con bajas probabilidades
de que estuvieran habitados por seres humanos como nosotros.
Hasta ahora, para describir distintos dominios
de la física existen la teoría
de la relatividad general
de Einstein que explica la fuerza
de la gravedad en el cosmos; y la física
de partículas que se fundamenta en
las leyes
de la mecánica cuántica, pero es un hecho que ambas teorías se excluyen entre sí.
Todavía no hay una teoría unificada que pueda explicar el funcionamiento
de todo el universo, tanto del microcosmos como del macrocosmos.
La existencia
de otros universos resulta difícil
de demostrar, dado que si realmente existen es probable que nunca tengan contacto entre si y que estén fuera del alcance
de nuestra percepción.
Sin embargo, parece que los universos paralelos además
de existir podrían también sufrir transformaciones y cambiar
de posición según su energía y hasta producir nuevos universos.
Así por ejemplo, el nacimiento
de nuestro universo podría ser la explosión debida a la transición
de un estado energético superior a otro.
Existen numerosas críticas a la teoría
de las cuerdas debido a sus afirmaciones indemostrables sobre los múltiples universos y por su incapacidad para explicar
las constantes y
las interacciones en la naturaleza
de nuestro mundo.
Sobre esta teoría existen tres corrientes
de opinión:
Una
de ellas rechaza en forma terminante la idea del multiverso porque cree en la existencia
de un solo universo que debe ser descripto por una sola teoría.
Otra opinión científica acepta que existan varias formas
de describir un universo pero sólo con fines recreativos, no científicos, y que es necesario encontrar una explicación que priorice nuestro universo entre el resto
de las soluciones que propone la teoría
de las cuerdas. Sin embargo creen que tal vez en un futuro esta teoría pueda explicar por qué nuestro universo es como lo vemos.La tercera opinión acepta la idea
de la existencia
de muchos universos, basada en el principio antrópico que explica por qué surgió la vida inteligente en el universo, principio que a numerosos científicos les resulta insuficiente.
Este principio dice que nuestro universo tiene que ser el adecuado para desarrollar vida inteligente, porque si no, no existiríamos para observarlo.
Zegún Lüst, el principio antrópico soluciona dos interrogantes
de la física: por qué
las leyes físicas son
las que observamos y por qué
las constantes naturales se ajustan tan exactamente para permitir la vida.
La teoría
de las cuerdas se basa en un conjunto
de ecuaciones, que además
de exigir la existencia
de universos paralelos, por razones matemáticas; agrega seis dimensiones espaciales, a
las cuatro dimensiones espacio tiempo, que por ahora no se pueden observar. Por esta razón, esta teoría muchos no la consideran una teoría física sino metafísica.No obstante, los nuevos descubrimientos sobre la materia y la energía oscura pueden brindar la posibilidad
de someter a verificación experimental a la teoría
de las cuerdas.
http://filosofia.laguia2000.com/ciencia-y-filosofia/la-teoria-de-las-cuerdasun beso y una linda sonrisa