Serpol (Thymus serpyllum L.)
Se utiliza el tallo florido.
Contiene aceite esencial rico en timol, carvacrol y p-cimol. Ácidos-fenoles (ácido caféico, rosmarínico, ursólico y oleanólico). Posee abundantes alcoholes terpénicos (linalol, terpineol, geraniol y cineol). Flavonoides (derivados del apigenol, luteolol, diosmetol, scutellaceol), tanino, saponinas.
Su riqueza en timol y carvacrol le confieren propiedades expectorantes, balsámicas, antitusivas, antisépticas, antivirales, antiespasmódicas, eupépticas, carminativas, antigonadotrópicas y parasimpaticolíticas, a las que contribuyen el resto de sus componentes.
Los flavonoides además le proporcionan acción diurética, tónica venosa y vitamínica P (aumenta la resistencia capilar y disminuyen la permeabilidad).
En uso externo es antiséptico y vulnerario. Por lo que se usa en caso de llagas, heridas, infecciones cutáneas, estomatitis, vaginitis. En forma de gargarismos en afecciones respiratorias.
Se utiliza en trastornos digestivos (dispepsias, flatulencias, espasmos gastrointestinales, falta de apetito), respiratorios (bronquitis, catarros, gripes, faringitis, sinusitis, tos irritativa, etc.).
A grandes dosis puede producir anestesia ligera. Su esencia a dosis altas puede ser consulsivante. Utilizar con precaución en los niños por la posibilidad de reacciones alérgicas (broncoespasmos).