Si empleas demasiada energía, te sentirás cansado. Si has de recordarte constantemente que has de pensar en lo que deseas y esforzarte por ello, si la magnetización te parece una lucha y empleas una tremenda cantidad de energía para conseguir resultados pequeños o nulos, estás creando una excesiva intensidad magnética. Si tienes que emplear demasiado poder, es probable que vayas en contra de la corriente de tu camino superior. Si cuando piensas en algo casi lo puedes sentir, estás usando la energía adecuada. Si usas poca energía, no lo conseguirás o tardará mucho en llegar. Sabrás que la cantidad de energía invertida es demasiado pequeña, porque lo que deseas te parecerá lejano; parecerá más un deseo que una certeza.
Antes de atraer algo que tiene una energía muy superior a la que tú tienes ahora, aprende a armonizar con su energía. Si, por ejemplo, deseas una suma de dinero muy superior a lo que tienes, tendrás que estar preparado para ella, saber de antemano en qué la invertirás, cómo la usarás y de qué manera te ayudará en la vida. Tendrás que imaginarte cómo te sentirás cuando la tengas y resolver las posibles preocupaciones que te plantee su adquisición.
Antes de magnetizar cualquier cosa muy superior a lo que tienes actualmente, juega con "llevar" la energía de lo que piensas atraer. Imagínate que ya lo tienes y considera los cambios que tu vida sufrirá por ello. Puedes aprender a armonizarte y familiarizarte con las cosas antes de tenerlas; haciéndolo, irás siendo más magnético hacia ellas.
Una manera de armonizar con las cosas muy superiores a tu realidad actual, es engrandeciendo los objetos deseados. Si deseas una suma muy superior al dinero que tienes ahora, intenta "llevar" otra, aún mayor. Sigue intentándolo con sumas progresivamente mayores. Notarás que, en la medida en que crece la suma, tu modo de pensar y sentir cambia. Determinadas cantidades te parecerán cómodas pero otras, superiores, serán algo incómodas. "Llevando" sumas progresivamente mayores, verás que las inferiores que, en un principio, parecían incómodas ya lo son menos. Magnetiza sólo lo que te parezca cómodo y posible de conseguir.
Cuanto más cómodo te sientas con el dinero o cualquier cosa de un nivel energético antes de magnetizarlo, más fácilmente lo conseguirás. Observa detenidamente cómo puede cambiar tu manera de pensar en ti mismo, tus sentimientos y tu forma de vida. Esto debería aflorar todos los temores ocultos, como "La posesión de tal cosa podría implicar demasiada responsabilidad" o "Tendré que preocuparme más de los impuestos y los contables, la gente me querrá por mi dinero", etc. Afrontando estas dudas y preocupaciones, te convertirás en un magneta más potente de lo que deseas.
Al principio, los resultados de estos ejercicios podrían parecer poco consistentes y el momento de su aparición menos controlable de lo que hubieses deseado. Eventualmente, los pasos serán automáticos y la cantidad de esfuerzo empleado en la magnetización decrecerá con el tiempo. Practica los ejercicios sólo mientras te produzcan placer y te parezcan interesantes. Magnetiza lo que deseas con la frecuencia que deseas, durante unos minutos o media hora. Cuando hayas dominado un nivel de magnetismo, todavía podrías necesitar un poco más de trabajo para producir resultados en el siguiente nivel y atraer cosas que te sean difíciles de aceptar como posibles en tu vida.
Una vez dominado el proceso de creación de un tipo particular de cosas, normalmente, en el futuro, sólo tendrás que pensar en ellas para que se manifiesten en seguida. Si eres capaz de manifestar cosas fácilmente y luego el flujo se detiene o empieza a decrecer o su atracción requiere demasiada energía, sería el momento de examinar más atentamente el camino que estás siguiendo. Presta mucha atención a la menor indicación de direcciones nuevas que puedan estar surgiendo.
Puedes hacer estos ejercicios solo, con un amigo o con un grupo de gente
EJERCICIO 1 – Magnetización General
Puedes emplear este ejercicio para aprender a crear lo que deseas con energía y magnetismo. Puede tratarse de un objeto grande o pequeño, una suma de dinero o de la esencia de lo que quieres.
Preparación:
Elige lo que quieras. Es importante que creas en la posibilidad de tenerlo, pienses positivamente en ello y tengas la intención de conseguirlo. Sé lo más específico posible acerca de la cualidad superior que te aportará e imagínate esta cualidad mientras magnetizas. También has de magnetizar la esencia que te dará y su forma específica o la cantidad de dinero, si la conoces. Amplía tu imaginación e intenta conseguir aún más. Si no conoces su forma, puedes magnetizar un símbolo que lo represente. Piensa, por un momento, en lo que quieres
Encuentra un lugar donde puedas relajarte y pensar sin interrupción durante unos minutos
Recuerda que lo importante es la sensación de magnetismo. Se emplea la imagen de una bobina, porque se ha demostrado muy eficaz a la hora de conseguir la "sensación" de magnetismo. Una vez conseguido este estado emocional, utiliza cualquier imagen o pensamiento que te ayude a recrear esta sensación en el futuro. Este ejercicio se basa en tu imaginación; no hay maneras "correctas" o "incorrectas" de hacerlo. Los mejores resultados se consiguen jugando con las imágenes y las sensaciones, y siendo creativo e inventivo mientras magnetizas.
Pasos:
1. Piensa en aquello que has decidido magnetizar. Sé lo más especifico posible acerca de los detalles de tu elección ‑si los conoces‑ y todas sus características y funciones ‑las esencias‑ que deseas.
2. Visualiza o siente lo que deseas, haciendo la imagen real en la medida de lo posible. Crea una escena en la que te imaginas recibiéndolo y viviendo los sentimientos positivos que experimentarás cuando lo tengas. Potencia tu imaginación, como en el ejercicio Aprende a Relajarte, del Capítulo 1. Si no puedes visualizar lo que deseas, imagínate vivamente las sensaciones que su consecución te aportará. O elige un símbolo que represente esta cosa u objeto y trabaja con el símbolo. Emplea esta misma imagen o símbolo cada vez que magnetizas o piensas en la cosa elegida.
3. Imagínate que tienes dentro de ti una fuente que genera energía. Visualiza una bobina en forma de espiral que gira y gira. Esta espiral parte del área de tu plexo solar, en el interior de tu cuerpo, y se extiende hacia fuera y hacia arriba. Pon en circulación la energía a lo largo de esta espiral, alimentándola de tu fuente energética. Muchas personas creen que esta energía proviene de sus yos superiores o sus almas, o de un poder superior al que podríamos llamar Mente Universal, Dios o Todo‑Lo‑Que‑Es. Emplea como fuente de tu poder lo que te parezca más adecuado. Puedes imaginarte que tu espiral magnética se proyecta hacia la dirección que más cómodo te hace sentir.
4. Pensando en aquello que deseas magnetizar, haz que tu espiral tenga la longitud que te parezca necesaria para atraerlo hacia ti. ¿Debe tener el tamaño de tu cuerpo, ser más pequeña o más grande? ¿Cuánta energía has de emitir a lo largo de la espiral para atraer el objeto deseado hacia ti? Usa tu imaginación y juega con el tamaño, forma e intensidad de la espiral, hasta que sientas que es correcta. Haciéndolo, empiezas a generar un campo magnético en torno a tu cuerpo, que magnetiza lo que deseas como un imán atrae al hierro.
5. En este proceso de atracción, valora a qué punto de tu campo energético quieres introducirlo. Puede tratarse de un lugar específico de tu cuerpo. Puedes imaginarte una cuerda que sale de tu corazón, tu cuello o tu mente al encuentro de lo que deseas y lo atrae hacia ti. Quizá quieras imaginar que lo recibes con las manos. O quizá sea más cómodo dispersarlo en torno tuyo. Por ejemplo, una gran suma de dinero puede afectar a muchas áreas de tu vida; de modo que, cuando la atraigas hacia ti, prefieras imaginar que te rodea antes que recibirla en un lugar específico.
6. Mientras tu espiral se va expandiendo, imagínate los acontecimientos que han de suceder antes de poder tener la cosa deseada. Para conseguir lo que quieres, hay determinados pasos que has de dar y acontecimientos que deben ocurrir. Tú puedes controlar el ritmo de estos pasos y acontecimientos, sea uno, dos o cincuenta al día. Empieza a elaborar el elemento temporal en tu manifestación, creando una sensación o imagen de los pasos y eventos implicados. Intenta acelerar o decelerar su ritmo, hasta que sientas que has encontrado el más adecuado. Si tu atracción del objeto o suma de dinero es demasiado precipitada, tendrás una sensación de tensión o presión. Existe un ritmo de cambio que es el más apropiado para ti.
7. Observa la posición de tu cuerpo y tu respiración; notarás que la sensación de magnetismo se puede potenciar introduciendo ligeros cambios en ellas.
8. Continúa generando tu espiral magnética hasta alcanzar un punto donde sientas la culminación de tu energía. La percibirías como un "clic" o una parada, o como un gradual descenso energético. Quizá sientas 1a certeza de conseguir lo que magnetizas. Cuando la sientas, interrumpe tu magnetización. Verás que la energía se acumula, alcanza un vértice y empieza a decrecer. Construye tu espiral magnética y utilízala mientras te siente bien. Si se convierte en una lucha o un esfuerzo, si te parece que han aparecido barreras, detente; ya has hecho bastante. Descubre la cantidad de energía adecuada para atraer hacia ti lo que te has propuesto.
9. Ahora, adéntrate en ti mismo y pregunta a tu yo superior con qué frecuencia debes magnetizar lo que deseas.
10. Sal lentamente de este estado y estira el cuerpo. Durante los próximos días, observa si tienes alguna intuición referente al objeto deseado y el cómo conseguirlo.
Evaluación:
Sigue practicando este ejercicio hasta que puedas sentir, visualizar, imaginar o experimentar la espiral y la energía que emites. Si puedes percibir la acumulación y posterior decrecimiento de la energía, sentir un "clic" o sensación de culminación o percibir el retraimiento de la energía acumulada, habrás iniciado el proceso de atracción de lo que deseas. Cuando estés cómodo con la magnetización de un objeto pequeño, emplea este ejercicio para magnetizar algo más estimulante para ti. Habrás notado que, cada vez que magnetizas algo, tu espiral varía. En ocasiones, ésta y la cantidad de energía que la transita son pequeñas; en otras, te hace falta una mayor espiral y más energía. A veces necesitarás magnetizar durante al menos un minuto y otras unos pocos segundos serán suficientes. Recuerda pensar positivamente en lo que deseas y mantener cierta actitud de desapego frente a ello. Que no importe si llega de forma distinta a la que te esperabas; acepta que todo lo que viene es lo más apropiado para ti.