Hemos escuchado, “cuando lo vea lo creo” y, sin embargo, la gente sabia reconoce que no podremos verlo hasta que lo creamos primero. La ley universal del orden divino reza que primero está la Mente, luego las ideas que fluyen de esta Mente, y luego surge la expresión de estas ideas en lo físico. Jesús utilizó la ley del orden divino al pedir conscientemente, dar gracias con fe completa y recibir el bien de Dios. Sé que el orden divino, siempre presente y confiable, trabaja para mí hoy.
Ahora mismo, cualesquiera que sean los deseos de mi corazón, tengo fe en que los voy a recibir. Doy gracias con completa fe y confío en que la ley poderosa del orden divino manifiesta bendiciones abundantes en mi vida.
Por tanto, os digo que todo lo que pidáis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá. —Marcos 11:24