1. Conocer a los demás e identificar ante quien estas
Incrementar tu inteligencia social te permite conocer a las personas e identificar ante quien estas, de modo que puedes actuar apropiadamente ante esa persona, darle lo que le gusta y en la forma en que le gusta recibirlo.
Conocer como piensan, sienten, actúan y reaccionan las personas es sumamente importante para poder desarrollar relaciones interpersonales armoniosas y duraderas.
Hacer esto te permite ser percibido como una persona más inteligente, más sabia y más atrayente.
Su importancia radica en que tú puedes identificar qué es lo que cada ser humano quiere o necesita obtener, de modo que puedas dárselo desde su propia perspectiva y tu propia iniciativa
Hacer esto te permite ser percibido como una persona más inteligente, más sabia y más atrayente.
Por ejemplo, si te dedicas a cantar, deberás crear canciones que la gente guste de escuchar. Tú les das lo que ellos quieren. Ellos, en reciprocidad, compran tu CD, te dan. Eso es una rueda.
Tu te conviertes en un ser útil y eso te posiciona en un lugar privilegiado.
¿Qué relación tiene el hecho de querer obtener prosperidad con el de conocer a los demás?
Tiene una relación de reciprocidad. Debes de tener en cuenta que en cualquier actividad a la que te dediques siempre tienes la oportunidad de servir, de agradar, de dar. Simplemente hazlo.
Tratar a las personas armoniosamente es fundamental para dar y recibir amor, salud y dinero. Es por eso necesario que aprendas a reconocer los diferentes tipos de personas que existen y relacionarte con ellas de modo apropiado.
2. Convertirte en un excelente oidor.
En términos de relaciones humanas, es preciso que tú aprendas a convertirte en un camaleón frente a tus interlocutores, y, además, desarrolles la habilidad de escuchar a los demás.
¿Qué significa esto?
Significa que, en primer lugar, debes aprender a escuchar a tus interlocutores. Y, en segundo lugar, debes aprender a hablar el idioma de tus interlocutores.
La habilidad de decirles a las personas lo que quieren oír se desarrolla a partir del desarrollo de la habilidad de escuchar a las personas.
La habilidad de escuchar a las personas se desarrolla con la práctica continua de usar los oídos doblemente y la boca singularmente. Esto quiere decir, que debes aprender a prestar oídos a lo que las personas manifiestan o dicen continuamente.
Las personas por lo general manifiestan sus deseos o anhelos, así como sus necesidades o problemas.
Cuando tu estas frente a alguien debes captar qué dicen, qué buscan, qué necesitan, qué anhelan.
Al tener esta información tú puedes brindar una solución…
3. Convertirte en un excelente comunicador.
Es imprescindible aprender a dar el mensaje correcto y asegurarse de que tus interlocutores lo han recibido apropiadamente.
Un excelente comunicador sabe escuchar a los demás, sabe utilizar las palabras de manera apropiada, sabe llegar al subconsciente y persuadir a las personas hablándoles en su propio idioma. Sabe también utilizar el lenguaje del cuerpo, y desarrollar otras habilidades más.
Estas habilidades requieren de práctica y tú lo puedes lograr si te lo propones.
Lo importante es que aprendas a decodificar el mensaje que los demás te transmiten, así como a emitir un mensaje y asegurarte que los demás lo decodifiquen de modo apropiado.
Esto te garantiza una cordial y efectiva comunicación con las personas, sean tus familiares, compañeros de estudio, trabajo, o quien quiera que sea.
Convertirte en un excelente comunicador es sumamente necesario para entablar relaciones armoniosas y construir tu red.