Anclados en glorias Pasadas...."Deberíamos usar el pasado como trampolin y no como sofá"
¿Cuánto tiempo pasas celebrando un triunfo? ¿Un día, una semana, un año, una década? Hay quienes duran mucho tiempo celebrando un logro, algunos se sienten también en esa celebración, que permanecen más del tiempo necesario, a tal punto que llegan a anclarse de una manera, que no se dan la oportunidad de observar que están siendo llamados para alcanzar una Gloria Mayor.
¡Cuidado! Te pido que no te acostumbres a vivir de un solo éxito, tú eres tan poderoso que si lograste uno, puedes lograr muchos más, y aun más retadores. Quedarte celebrando un logro pasado, por mucho tiempo, te lleva a una zona de comodidad que luego es difícil moverse.
Cuando obtengas un logro no dejes de celebrarlo, y luego de terminada la euforia de la "fiesta" y recoger los primeros frutos, coloca tu mente y tus acciones en el nuevo reto, en la nueva meta, en la próxima parada.
Lenguaje del pasado
El anclarse en el pasado, inicia desde el lenguaje, mientras más hablamos de nuestro logro, de lo bueno que fue, de lo maravilloso que nos sentimos, de los grandes esfuerzos que hicimos para obtenerlo, nuestro cerebro comienza a crear un espacio de confort con este tipo de pensamientos, y mientras más los repetimos, más necesitamos pensar en ello, ya que genera una satisfacción individual.
El lenguaje del pasado, interrumpe el lenguaje de futuro, por ello, es que la celebración, mantenerse emocional y mentalmente en el pasado, es sumamente peligroso para enfocarse en el futuro.
Cuando te sientas, que pasas mucho tiempo hablando de tu pasado maravilloso, debes considerar hacer un esfuerzo mayor para comenzar a reflejar tu futuro a través de palabras, acciones, dibujos, planes, etc. Conéctate con el futuro con mayor frecuencia, y deja atrás los logros, esos nadie te los podrá quitar, ellos te sirven para impulsarte hacia delante, no están hechos para quedarte allí.