Esta enigmática ave tiene en su haber muchas historias y leyendas que la sindican principalmente como una señal de mal presagio, y esto viene desde muchos siglos atrás, pues se le encuentra en la mitología de muchas culturas antiguas de nuestra humanidad.
Se le reconoce una inteligencia superior a la de otras aves, pues su cerebro también es más grande que cualquiera de su especie, lo que incluso les posibilita dirigir a otros animales para que actúen a conveniencia de ellos mismos
Es, al parecer, debido al apetito por la carroña que se asocia al cuervo con momentos funestos de la historia, pues siempre se les ha visto rondando campos de batalla o en escenarios donde la muerte es inminente.
Su designación como heraldo de la muerte ha sido muy marcada en muchas culturas o mitologías, y se les ha conferido poderes especiales que generalmente están enmarcados dentro de la maldad y de las fuerzas demoníacas.
Al cuervo se le puede hallar en los hombros de Odín dentro de la mitología nórdica, además de que su figura era muy usada en las velas de sus embarcaciones. Igualmente, en la mitología griega se cuenta la historia de Apolo que envió un cuervo blanco para proteger a Corinis, una mortal de quien se había enamorado.
Se ha dicho incluso que el Rey Arturo no murió, sino que se convirtió en cuervo y, así como estos casos, al cuervo también lo encontramos en los relatos hebreos y hasta en el budismo. Así como para el ocultismo, donde el cuervo es el encargado de guiar las almas de los muertos hacia el otro mundo.
Sin embargo, más allá de todos estos hechos, se reconoce en el cuervo una gran habilidad para encontrar recursos, así como una prodigiosa memoria, lo que quizás le permite estar en los escalones más altos de superioridad animal.
Incluso son capaces, al igual que un loro, de aprender a imitar oraciones, frases o palabras cortas que pueden repetir fácilmente, pero, sobre todo, se les reconoce su habilidad para analizar las situaciones y calcular sus pasos siguientes.
Ciertamente, tienen todos los atributos para ser temidos por su sorprendentes características.