Adivinación por medio de las perlas, se colocaba una en un fogón cerca del fuego y se la cubría con un vaso puesto bocabajo, a continuación se le dirigían las pronunciaciones de los nombres de aquellos de quienes se sospechaban habían robado alguna cosa, en el momento en que se decía el nombre del ladrón, la perla daba un salto hacia arriba y rompía el fondo del vaso para salir, así es como se conocía al culpable