Adivinación que utilizaban los Celtas, los cuales sacaban sus pronósticos de los relinchos y movimiento de unos caballos blancos criados con todo esmero y veneración a expensas del pueblo.
En unos bosques sagrados, se alimentaban los caballos en el templo de los dioses, y los hacían salir antes de declarar la guerra a sus enemigos, cuando el caballo empezaba a andar con la pata derecha era favorable, cuando lo hacía con la izquierda, era mal agüero y renunciaban a la batalla