Deja que tu corazón se rompa.
En el transcurso de una conversación,
cuando escuchas esa canción,
en ese momento cuando la noche cae,
y antes justo de que salga el sol.
Mientras soplas al café,
al mirar los ojos de alguien
hablando de algo a lo que aman,
de alguien a quien aman.
Porque cuando nos rompemos es cuando estamos vivos.
En ese espacio de sentimiento
conseguimos expandirnos
y es entonces
cuando nuestra vulnerabilidad se abre
y alcanzamos la grandeza.
Y ahí
desde esa grandeza
constrúyete de nuevo,
invéntate otra vez,
invéntante distinto.
Como lo que surge de pronto
sin origen
Levanta un mundo nuevo
en esa nube de polvo
Eres lo que piensas. Vives como eres.