Cómo dejar de ser mediocre?… Si hay una forma de lograrlo…
En la vida hay algunas cosas que no deben ser toleradas, deberían ser borradas ó absolutamente destruidas de nuestras vidas. En otras palabras necesitan ser asesinadas.
Para la mayoría de las cosas, asesinar es una acto terrible que no debe tener lugar en una sociedad, pero en la vida hay una cosa de un individuo que es peor y que da al asesinato un uso.
Ésta cosa es la mediocridad
La mediocridad hace la vida complicada, dura y le cierra la puerta a cualquier cosa buena que pueda pasar en tu vida.
Hay cosas en nuestra vida sobre las que no tenemos control pero la mediocridad no es una de ellas, tolerar la mediocridad afecta nuestras elecciones, decisiones y resultados negativamente.
Mantenerte en la mediocridad combinado con experiencias difíciles puede causar que tu vida vaya en dirección a un circulo vicioso de apatía, pesadez y frustración.
Ésto puede llevarte a “aceptar” ser promedio y vivir basado en lo que dicten las circunstancias externas.
La actitud, elecciones y decisiones que tomas, determinan tu calidad de vida
Hay una forma de salir de la mediocridad y esa es asesinarla, pero…
¿Cómo asesinas la mediocridad?
Debes negarte a darte por vencido, cuando una situación parezca empeorar continua luchando por algo más alto y mejor.
Negarse a hacer las cosas de la forma ordinaria mata a la mediocridad. La mediocridad florece cuando las personas hacen cosas mediocres.
Si no quieres resultados mediocres evita hacer lo que las personas mediocres hacen! Hacer lo que todas las demás personas hacen produce mediocridad. Si haces lo que siempre has hecho, seguirás obteniendo los mismos resultados, sino es que peores.
Para ser capaces de eliminar la mediocridad de nuestras vidas no podemos quedarnos en nuestra zona de confort y familiarizarnos con ella.
Nuestra actitud y programación mental le dan vida a la mediocridad cuando pensamos si será bueno quitarla de nuestras vida o no, le damos consideración a aquello que nos mantiene alejados del éxito.
La vida es para ser vivida en abundancia, la mediocridad le quita vida a la vida y mata la alegría que deberías estar experimentando.
La mediocridad mata a la vida y es por eso que la debes asesinar a ella si no la quieres en tu vida. La vida es muy preciosa como para ser vivida en la mediocridad.
Si permitimos la mediocridad en nuestras vidas abandonamos nuestros sueños, comenzamos a perseguir encajar en clases sociales y acumular cosas superficiales que vemos como símbolos de vida, éxito y significado.
Muchas personas están atoradas en una rutina de mediocridad.
Además multitudes están atrapadas en una vida de sofocación lenta y sólo podrán respirar tranquilamente de nuevo si asesinan su mediocridad.
- ¿Tu vida parece ir simplemente con la corriente?
- ¿Sientes un vacío abrumador en tu vida?
- ¿Tu vida perece ser totalmente predecible y falta de esencia?
- ¿Parece que tu vida no tiene una dirección clara?
- ¿Sientes que la vida solamente está pasando?
- ¿Parece que inviertes tu tiempo haciendo cosas que no quieres hacer?
Si respondiste si a cualquiera de éstas preguntas, la mediocridad tiene sujetada a tu vida y debes asesinarla antes de que estrangule a tu vida.
Eventualmente causará que tu vida parezca inútil y sin esperanza porque tus sueños se ven tan distantes que ya parecen fantasías locas. Mientras ésto pasa, el desaliento y la infelicidad se pueden volver una parte natural de ti.
Ésto ocurre cuando aceptamos la mediocridad, usualmente éste es un resultado por aceptar bajos estándares, expectativas y filosofías negativas en tu vida.
La mediocridad es ser neutral, y ésta definición no es mala ni buena pero en su operación significa que vivimos en segundo plano y una vida de baja calidad. Ésto no debe tener cabida en tu vida, debes luchar por una mejor calidad de vida y hacer de ésto parte de tu día a día.
Aquellos que desean más, deben eliminar la mediocridad, no puede tener lugar en su vida, ésta no provee absolutamente ningún beneficio para ti.
Debe ser completamente eliminada de tu vida, Elimínala, No la toleres.
“Las grandes almas siempre se han encontrado con una oposición violenta de las mentes mediocres”.