La vida es un viaje, cuando el ser humano viene a la vida fisica qué busca?..... busca completarse. Nacemos fragmentados y vivimos en una sociedad que nos fragmenta aún mas, nos rompe y nos separa, por aquí está el cuerpo por aquí la mente, por alla los sentimientos, más lejos aún el espíritu... somos como las ruinas de las grandes civilizaciones antiguas: vivimos en ruinas, con las piedras esparcidas entre los retazos de nuestra historia, escondidas algunas, perdidas otras, enterradas la de más all,a inconscientes de la gran sabiduría que se esconde en cada una de esas piedras... inconscientes de la sabiduria que duerme en nosotros.
hacemos grandes viajes a lugares remotos buscndo una enseñanz, una sabiduría, una guia. Macchu Pich, Teotihuacán, Delfos, Egipto, y quizá el mensaje sea este: que venimos a este mundo para reconstruirnos para recordar... arua tarea la de colocar piedra sobre piedra, la de buscar donde encaja cada una de ellas, cual es su función, cual es su belleza, cual es su sentido. Ardua tarea sí, pero también apasionante aventur la de recorrer el mundo, salir de los límites de lo conocido, romper con las barreras de nuestras rutinas cotidianas para descubrir que podemos ser de otra menera, que podemos hablar de otra manera y hasta sentir y movernos de manera diferente para a asomarnos al cauce de otro arroyo o de otros ojos y descubrir que sus aguas cantarinas o su mirada transparente era lo que nuestro alma buscba, para reconocer por fin que el mundo es tan grande y el Universo tan amplio que todos los viajeros tienen su lugar a propiado y único para descansar y compartir.
Apasionante aventura de encuentro y reconciliación cn nuestra esencia, con la Esencia de todas las cosas. Viaje hacia nosostros mismos donde hemos de recoger los escombros de nuestro cuerpo, de nuestra mente y nuestro corazón para limpiarlos, reconstruirlos con mimo y cuidado.... y ordenarlos delicadamente para formar un todo coleto, un Ser pleno de divinidad, de amor armonia y vida. Viaje-vientre donde se gestan todos los principios, donde nos gestamos a nosotros mismos, felices o infelices, bellos o feos, solitarios o acompañados, luminosos o ensombrecidos..... según sea nuestro deseo, nuestra intención y nuestra voluntad, según sea nuestra meta y propósito.
Ojala cuando estemos de vuelta podamos decir que el viaje mereció la pena, que nos encontramos y completamos, que hicimos de un montón de piedras esparcidas un hermoso Templo Sagrado dedicado a la divinidad.
Abrazos multiformes.
En general los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, todos pueden ver pero pocos pueden comprender lo que ven. Pocos ven lo que somos pero todos pueden ver lo que aparentamos.