¿Amores para toda la vida? Mejor no lo leasHace unos años una persona me dijo que yo era senoidal. Que significa algo así como ser cambiante. ¡Vamos! como una montaña rusa. Y es cierto.
A mi, como es lógico, me costó un poco más de tiempo darme cuenta de que si hay una palabra que me puede definir es: inconstante. Necesito estar todo el rato en la curva más peligrosa, ascendiendo o descendiendo. En continuo movimiento. En esos puntos donde las mariposas de mi estómago se vuelven locas. Ahí es donde me gusta vivir. Y si no hay mariposas, prefiero no estar. Admito que estoy enganchada a esa sensación. A ese cosquilleo. A esa adrenalina. Y no sé cómo debo sentirme sin ella.
Igual por eso, cada vez creo menos en las relaciones. En las de pareja. Eso de que algo sea para toda la vida, lo veo complicado, por no decir imposible. Me cuesta creérmelo. A lo mejor es porque no ha llegado la persona. Quizá “esa persona” ni siquiera existe. No lo sé.
Pero no creo. Y a lo mejor lo uno va con lo otro y me estoy perdiendo algo de verdad, con estas expectativas. Igual sólo pienso así porque quiero que alguien me convenza de lo contrario. Pero eso de “el amor de verdad”, lo veo totalmente atípico. Pero soy sincera y cuando desaparecen las mariposas,… toca cambiar. Tengo otro problema y es que nunca aviso de cuando siento o dejo de sentir. Y aunque puede parecer un poco frío o insensible, cuando esa sensación está, tampoco suelo prometer o pensar que será para siempre.
Igual tengo varios problemas.
Puede que yo me haga mi historia. Puede que no haya empezado y ya esté pensando que no funcionará. Que en cualquier momento llega a su fin. Probablemente por eso a veces lo doy todo. Y otras, no doy nada.
Y aunque intento no pensar mucho en este tema, me gustaría encontrar una explicación.
Porque para mi el amor tiene que ser una montaña rusa. Tienes que estar en la cima. Y tiene que ser así SIEMPRE. Todo el tiempo. Que igual me falla el concepto. Es algo que no descarto en absoluto.
Pero me pasa que cuando veo a esas personas que llevan muchísimo tiempo tengo sentimientos contrapuestos. Me da una especie de “yuyu” aunque no sé si es la palabra más adecuada para describirlo. Por un lado pienso en que quizás se han perdido muchas cosas que yo considero imprescindibles vivir. Por el otro, siento admiración y sí, puede que un poco de envidia, porque yo no sé si sería capaz de lograr algo así, porque no sé si aún lográndolo, sería capaz de saberlo mantener.
Tal vez me suceda todo esto porque soy insegura. O porque necesito equilibrio. Seguridad. Madurez. O quizá sea porque los ideales me han comido mucho el tarro, y siento que no doy la talla.
Sea como fuere, sólo me queda decirte que mientras nos dure…. que sea eterno.
Fuente:
http://www.piensaesgratis.com/amores-para-toda-la-vida-mejor-no-lo-leas/