Son varios los científicos que ayudaron descubrir estas redes de energía que cubren la Tierra y afectan con sus vibraciones a todos los seres vivos, sean vegetales o animales, y entre ellos, a nosotros. Eso lo que captan quienes practican la Radiestesia (adivinación o captación de energías).
La red de Peyré
Peyré fue un médico francés apasionado por la Radiestesia que descubrió la “forma” que tenían las “energías de la Tierra”. Su hipótesis fue que una cuadrícula energética rodeaba al planeta. Éstas son sus palabras: “Se trata de una radiación Norte-Sur, aparentemente magnética y causada por el magnetismo terrestre, y una radiación Este-Oeste, perpendicular a la primera y de apariencia eléctrica. Son radiaciones rectilíneas, por lo que no pueden ser debidas a distintas influencias telúricas, como la composición del suelo o a presencia en el subsuelo de fallas o corrientes de agua subterráneas… (Estas radiaciones) cubren nuestra esfera de una red que marca zonas cuadradas neutras, compartimentando el suelo y elevándose en la atmósfera…”.
La “Red global” o “Red Hartmann”
Sin embargo, el verdadero emprendedor de las investigaciones sobre esta red de energía fue un médico alemán, el doctor Ernst Hartmann. Se dedicó a estudiar las influencias del medio ambiente sobre el ser humano, sobre todo, las del subsuelo y fue uno de los grandes investigadores de la Geobiología. Lo interesante es que logró unir disciplinas consideradas “esotéricas” con otras “científicas”, probando que el conocimiento es uno solo. La astrología, la medicina, la Radiestesia, todas confluyeron para demostrar la relación entre las energías de la Tierra y la salud humana.
La Red Hartmann
Junto con un equipo de físicos y médicos, y tras numerosos experimentos, concluyó que: “La tierra está recubierta por una red global de ondas fijas que parecen ser producidas por una radiación terrestre que proviene del interior del planeta y que se ordena en forma de retícula al atravesar las capas de la corteza terrestre”.
Esa red estaría tendría forma de cuadrícula, como si fuera una red de pescadores formada por grandes cuadrados de líneas de energía que se entrecruzan. Pero, no sólo están sobre la tierra cruzándose entre sí, sino que se elevan verticalmente y pueden alcanzar una altura de hasta 2.000 metros. La Red Hartmann está en todas partes, tanto en el terreno plano como en el montañoso, dentro del agua, por fuera y por dentro de los hogares.
Características de la Red Hartmann
Forman una cuadrícula de líneas verticales y horizontales que abarcan toda la superficie terrestre, pero no de forma uniforme. No se distribuyen de modo perfecto a lo largo de todo el planeta, pueden interrumpirse, ser más altas o bajas y cambian. Señalan zonas energéticas positivas o negativas, o equilibradas o desequilibradas. Se orientan en dirección Norte-Sur y Este-Oeste.
Las líneas se modifican y son alteradas por muchos factores, como la hora, el tiempo, otras energías, eclipses, movimientos sísmicos. Como norma, se considera que tienen 21cm de espesor y que trazan líneas paralelas a intervalos de 2,5m, en dirección Norte-Sur, y unos 2m, dirección Este-Oeste.