por Merlina MeilerEl sexo, ¿es mejor cuando estás en forma?
¿Realizar ejercicio físico puede ayudar a tener un mejor desempeño sexual?
Darío Pescador, en el blog Transformer, comenta que en el rendimiento y la satisfacción sexual influyen muchos factores: niveles hormonales, concentración mental y como no, las emociones. Pero incluso cuando todas estas variables están en orden, tu sesión amatoria puede torcerse si a los cinco minutos te quedas sin aliento, y con una luxación de codo.
Así mejorará tu sexo con un poco de ejercicio, ya que te aportará diversos beneficios:
Más ganas: el sexo es una función secundaria para nuestra supervivencia, eso quiere decir que necesitamos tener energía de sobra para tener deseo sexual. Puede parecer que el deporte cansa, pero en realidad te fortalece, y hace que el esfuerzo físico necesario para el sexo sea algo sencillo, y te puedas concentrar en disfrutar.
Mejor desempeño masculino: En un estudio reciente, los hombres de más de 50 años que hacían ejercicio tenían un 30 % menos riesgo de padecer disfunción eréctil que los sedentarios. A cualquier edad, la erección necesita una buena circulación sanguínea, y el ejercicio mejora tanto la vascularización, es decir, el número de vasos, como su capacidad. En todo el cuerpo.
Mayor atractivo: estar en forma nos hace más atractivos para el sexo opuesto. Esto es una verdad incontestable para hombres y para mujeres de cualquier edad y condición. Claro que hay otras situaciones que resultan atrayentes (tanto valores internos como condicionantes externos), pero el vernos bien y sentirnos mejor aporta para junto con los demás factores, seamos irresistibles.
Las flexiones, los abdominales, los ejercicios que fortalecen la espalda y toda actividad física que te resulte interesante y te motive (bailar, correr, caminar, etc.) pueden provocar cambios importantes en tu organismo, en tu autoestima y en tu seguridad interior que se verán reflejados a la hora del sexo.
Me parece importante mencionar que, no sea un ejercicio, dormir entre una cantidad de horas razonable puede mejorar en gran medida tu vida amorosa (y tu vida en general). Además, dormir bien te pone de buen humor (un componente indispensable para las relaciones sexuales).
Y no te olvides de ejercitar el músculo más importante para el sexo y que alimenta el deseo y la pasión: el que está entre tus orejas.