Qué es lo que hace distinto a un genio del resto del mundo? Su brillantez por supuesto, pero ¿tienen algo en
común entre ellos? ¿Hay algunas características que compartan las
grandes mentes de Einsten, Picasso y Mozart, entre otras?
Descubramos algunos
rasgos comunes que, podríamos decir,
definen a un
genio.
1. Dificultades para dormir
La
actividad mental de estos genios es seguramente el motivo por el que muchos de ellos sufran o sufriesen de
insomnio.
A la mayoría de genios les cuesta o les ha costado coger el sueño y han aprovechado la
noche para reflexionar y seguir
trabajando en sus proyectos. Algo que tiene bastante sentido, especialmente si observamos que durante la noche es cuándo hay más silencio y calma, el ambiente ideal de trabajo.
2. Analizar hasta la saciedad
Relacionado con el anterior insomnio, encontramos la capacidad de concentración y de
análisis constante de lo que les rodea. Mihaly Csikszentmihalyi, un célebre psicólogo, realizó
entrevistas a
90 genios con distintas especializaciones.
La conclusión a la que llegó es que todos tenían esta voluntad de cuestionarse y buscar el
máximo conocimiento de la realidad y una
curiosidad e impulsividad muy por encima de la media.
3. Plasmar ideas garabateando
Esta voluntad de conocimiento y compresión hace que los genios (de cualquier disciplina) desarrollen la costumbre de
garabatear plasmando las
ideas que tienen de una manera más
simple y visual. Poner en
orden sus ideas para luego desarrollarlas.
Esto es muy típico de personas con un coeficiente intelectual alto.
4. Autocrítica constructiva
Muchos genios, entre ellos Picaso y Freud, tenían una forma de trabajo basada en el
ensayo y error. Detectaban un problema, trabajaban en una solución, la probaban y de ese resultado extraían
conclusiones para obtener un
mejor resultado la siguiente vez.
Según Howard Gardner, psicólogo, pasaban mucho tiempo
reflexionando sobre qué querían conseguir y, una vez tenían los resultados, estudiar
qué se debería
cambiar o mejorar. Un método ordenado y siempre dirigido a
construir, sin importar el tiempo que emplees.
5. Mentes abiertas
Si algo tienen en común los
genios es su capacidad para descubrir
nuevas perspectivas, nuevos ángulos a partir de los que interpretar la realidad.
A pesar de que la sociedad los considerara locos o de ideas absurdas, ellos seguían alimentando este rasgo distintivo que los identificaba y los hacía
únicos.
6. Educación a un nivel medio, pero amor por su especialidad
Dean Simonton, profesor de la Universidad de California, realizó una investigación alrededor de los
informes académicos de más de
300 genios comprendidos entre 1480 y 1869 -entre ellos da Vinci, Galileo Galilei y Beethoven-. Simonton buscaba descubrir si había alguna relación entre la formación académica de los genios con su brillantez. El resultado fue sorprendente: los genios y creadores
más notables eran aquellos con un
nivel académico medio, podríamos decir que con una diplomatura. Sin embargo, los que tenían mayor y menor formación demostraban una creatividad menor.
Lo que sí destacaba era una
dedicación absoluta a aquello en lo que eran geniales.
7. Mentalmente algo inestables
Por desgracia, las mentes tan brillantes y desarrolladas también pueden conllevar
trastornos como déficit de atención o TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo).
8. Dedicación absoluta
Como hemos dicho, una de las patologías que pueden desarrollar los genios es el TOC. Lo cuál tiene mucho sentido si tenemos en cuenta la cantidad de
tiempo que emplean y emplearon estos grandes individuos en su
pasión.
Pablo Picasso y su mujer Jacqueline Roque
Esta dedicación se convierte en
obsesión con facilidad y, aunque sean geniales en lo suyo,
no implica que sean realmente
felices, puesto que aquello que les rodea acaba convirtiéndose en un impedimento para trabajar en sus proyectos.
9. Lobos solitarios
Lo dicho, si dedicas la mayor parte de tu tiempo a algo que te obsesiona, la
relación con tus allegados, poco a poco, va
debilitándose y, por otra parte, tampoco las trabajas con mucho ahínco, ya que te quitan tiempo para la obtención de tu objetivo.
Una ejemplo sería Einstein, quién vivía en la absoluta soledad porque así lo deseaba.
10. Una pasión sin precio
La mayoría de genios
no ponen tanta dedicación en sus proyectos buscando una
recompensa monetaria, sino porque sienten verdadera pasión por lo que hacen. Su
motivación era y es única y exclusivamente
creativa.
Imágenes:
torbakhopper HE DEAD,
Lee Nachtigal,
Martin,
will schrimshaw,
vassilis galopoulos,
Larry,
Hartwig HKDhttp://supercurioso.com/10-rasgos-que-distinguen-a-los-genios/