¿Cómo pudo surgir, en el pasado, una civilización como la Atlántida? ¿Cómo era su Sociedad?, ¿Porqué desapareció tragada por las aguas?
¿Cómo eran las Escuelas de Misterios?, ¿Cuántas eran? ¿Cómo evolucionaron?
¿Qué pasó? …
Las Escuelas de Misterios de la Atlántida
Podemos diferenciar tres periodos atlantes, y podemos ordenarlos según la edad. El primero, hace aproximadamente 40.000 años, el segundo, hace unos 25.000 años, y el tercero, hace unos 12.000 años.
Hace aproximadamente unos 40.000 años, seres procedentes de otras partes del Universo juntaron y guiaron a diferentes grupos, a diferentes partes de la Tierra. Una civilización en decadencia, la civilización lemur, que se alteró por miles de experimentos científicos, genéticos, energéticos, y debido a que grandes sistemas sacerdotales dogmáticos dominaban, controlaban, manipulaban, distorsionaban y utilizaban a toda la ciencia y la filosofía para su propio beneficio.
Cuando se hundió bajo las aguas el continente lemur, se originó una nueva fase. De las diferentes partes de lo que fue el continente lemur, surgieron varios grupos importantes de seres guiados desde el espacio por los grandes maestros de la Tierra. Uno de estos grupos fue instalado en lo que conocemos como Sudamérica, otro en lo que conocemos como China, otro en lo que conocemos como el centro del Brasil, y otro en la India. Grupos más pequeños se instalaron en África, en el centro de Europa, en Norteamérica. Etnias y grupos que poseían conocimientos mágicos, conocimientos humanos, conocimientos espirituales.
En aquella época tan lejana, los seres humanos poseían restos de tecnología lemur, de origen extraterrestre. Grupos de científicos, instalados en el centro de lo que se conoce como oceáno atlántico, unido y vinculado con lo que hoy es Sudamérica, comenzaban a aplicar y desarrollar esos sistemas tecnológicos, y desarrollaron una civilización sumamente avanzada, sumamente evolucionada.
La sociedad estaba estructurada y fundamentada en la formación cultural, ética y espiritual de las personas.
Las personas, según sus aspiraciones, recibían sus formaciones espirituales y prácticas. Sus estudios eran sobre los fundamentos y las leyes del Universo, sobre lingüística, ciencias naturales, tecnología, agricultura, artes, arquitectura.
Las Escuelas de Misterios estaban estructuradas en grados de conocimiento, pero estos no eran solamente teóricos, si no que eran prácticos, de forma que todos aquellos que se presentaban para asumir una dirección tenían que haber conseguido un determinado grado de formación práctica, de formación espiritual. Grado y compromiso.
El desarrollo espiritual y y la madurez espiritual eran determinantes para ser elegido como sabio, de entre todos aquellos que más hubieran sobresalido por sus capacidades, por sus conocimientos, por su servicio. Este procedimiento era plenamente aceptado por todas las personas, porque todos trabajaban, todos tenían cubiertas sus necesidades, y sabían que esa forma de gobierno era buena para ellos, pues les daba todo lo que precisaban.
Este proceso fue generado por un grupo de sabios que, cuando emigró de Lemuria, emigró a una zona más o menos primitiva, y comenzaron a crear un núcleo con ese modelo de convivencia. Las personas de alrededor se fueron acercando a ese grupo avanzado. Estos les iban formando y educando, y, de esta forma, se iban incorporando a la nueva cultura. Al mismo tiempo, se iban mezclando sus genes, creándose, al final, una genética enriquecida y mejorada por el grupo promotor.
Así. este sistema iba creciendo, se iba ampliando, cada vez a más tierras, creándose nuevas ciudades, semejantes en su forma de organización hasta surgir una gran nación, en un continente, una Civilización, la Atlántida.
Hace 12000 años hubo grandes cataclismos que destruyeron, parcialmente, esta civilización tan poderosa, debido a las guerras que hubo, algunas de ellas fueron entre las distintas colonias de extraterrestres que existían. Entonces, esta civilización tan avanzada perdió parte de su desarrollo tecnológico y dio origen a grupos más diversos que existieron en diversas partes del continente sudamericano. Estos grupos especiales predominaron en el centro de ese continente, en los andes peruanos y bolivianos y también en Brasil. También se extendieron otros grupos sobre otras partes de al Tierra.
El núcleo central de estos grupos existía en el continente atlante modificado, en Poseidonis. Aquella civilización había perdido mucho de su tecnología, debido a los grandes conflictos que hubo. Su tecnología era avanzada, pero sin comparación con la de épocas anteriores. Por eso, decimos, 12.500 años después, que las Escuelas que existían estaban organizadas todavía por sabios, sin embargo, ya empezaban a estructurarse de forma más jerárquica. El Iniciado empezó a transformarse en sacerdote, en Rey. Este sacerdote-rey-sabio, era elegido por el consejo de sabios. Asumía las directrices de un reino, de una nación, de un pueblo. Sus construcciones recuerdan el románico, con piedras talladas. Su tecnología les capacitaba para volar, aunque, en los conflictos que sufrieron, perdieron mucha información. Esta tecnología era capaz de producir energía eléctrica, mover telares, producir procesos alquímicos, cortar el mármol, construir, trabajar el hierro, metales, construir carros, Se trataba de una tecnología, para esa época, bastante avanzada.
En aquella época, existían siete escuelas de misterios importantes, con otras escuelas alrededor de ellas, no tan importantes. Estas sociedades teocráticas estaban situadas en lo que es, ahora, el centro del Océano Atlántico, las Antillas, el Norte de Brasil, América Central, México. Realmente, era una zona sumamente desarrollada. Había otras culturas en otras partes de la Tierra, pero no estaban tan desarrolladas o avanzadas. Estas sociedades, la mayoría, no poseían grandes ejércitos, no eran sociedades belicosas o conquistadoras, sin embargo, tenían ejército suficiente como para poder preservar el orden y la estabilidad en todo su territorio. No eran ejércitos para la lucha, si no para la organización de todas las funciones, algo más parecido a nuestra policía actual.
Podemos decir que cada uno de los siete reinos era una Escuela Iniciática importante. Vamos a nombrarlas a todas, en especial a las que más florecieron por su sabiduría y conocimiento.
Tres de estas Escuelas, los llamados “Profetas Blancos”, los “Daktilos”, y los “Coronas de la Luz Divina”, intentaron conservar lo mejor de su civilización, en Europa. A partir de ellos surge el “Proyecto Europa”.
Las Escuelas de la Atlántida
1.-La Escuela de la llama: Flámeres; cuando emigraron de la Atlántida, esta escuela derivó en los Olmecas, los Tupis, en los Lamas.
2.- La Escuela de la Alta Magia Blanca, o Profetas Blancos:, es la Escuela Druídica de los Celtas.
3.- La Escuela de los Filósofos, derivaron en los Daktilos, filósofos de Grecia.
4.- La Escuela de la Sabiduría Solar, derivaron los Mayas, los Incas.
5.- La Escuela del Poder Supremo, derivaron en Toltecas.
6.- La Escuela de los Seres Alados, derivaron en los Quetzátcoal.
7.- La Escuela de las Coronas de la Luz Divina, o Kobdas, constructores del Templo de la luz Divina; de ahí derivaron los Misterios de Egipto.
Estas Escuelas estudiaban el Universo, la Naturaleza, estudiaban las prácticas de desarrollo espiritual, la meditación.
Al principio, estas Escuelas cumplieron con sus funciones educadoras y transformadoras de los pueblos de la época. Sin embargo, estos grupos comenzaron a afirmar sus intereses sectarios, a mirarse con recelos y envidias, a desear los logros y las conquistas de los otros, a ocultar los logros y conquistas de cada uno de ellos, y a buscar, ante todo, la inflexibilidad en sus conceptos y conocimientos científicos y espirituales.
Su progreso fue muy grande en las ciencias, en la filosofía, en las artes, en el conocimiento de las Leyes del Universo y en el dominio de las fuerzas, Tenían sistemas de captación de energías poderosísimas del Universo, para observar los cuerpos, para despertar sus facultades paranormales. Vivían en armonía con la Naturaleza, en comunicación y expresión plena de de todas sus capacidades creadoras, con procesos educativos que son dignos de ser rescatados del pasado.
Mediante estos procesos educativos, se educaba al hombre como Un Ser Humano en Armonía Total con el Universo, en equilibrio con la naturaleza y en comunión con todos los seres que vivían alrededor. Vivan en Sistemas de Comunidades formados como anillos iniciáticos; es decir, eran comunidades de seres en diferente nivel de desarrollo espiritual, que conformaban anillos de convivencia, o sea, conformaban anillos de convivencia de familias y, según iban avanzando en su nivel de desarrollo espiritual, iban pasando y vivían en diferentes anillos o círculos de convivencia comunitaria. Esos anillos de convivencia estaban en diferentes lugares, con núcleos de viviendas o casas donde vivían, guiados por sabios, por magos, por filósofos y científicos que trabajaban en esos núcleos.
Cada uno de esos anillos tenía diferentes prácticas, cumplía con sus responsabilidades de trabajo, participaba de las labores de servicio, de higiene en la parte médica, organizaba todo lo que era la conservación de los alimentos, desarrollaba la tecnología imprescindible para conseguir energía eléctrica, etc. Estos anillos estaban estructurados por familias, a la cabeza tenían un grupo de sabios que elegía al que podríamos llamar representante de Dios o Rey, que, en un principio era elegido por el Consejo de Sabios, y, posteriormente, se transformó en un cargo hereditario.
De esta forma, esta civilización intercambió y desarrolló su proceso de forma natural. Sin embargo, hubo tres Escuelas que sobresalieron por sus conocimientos y sus logros espirituales. Una de ellas es la Escuela de la Llama, o templo de la Llama Eterna, donde estaba anclada la Llama Maxim. Otra la conocida como La Escuela de la Alta Magia, donde se trabajaban procesos alquímicos, con las fuerzas de la Naturaleza. Y otra, conocida como la Escuela de la Sabiduría Divina.
En realidad, eran Templos, más que Escuelas, pues el concepto de Templo en aquella época no tenía las connotaciones de ritual de los templos de ahora; Un Templo era algo semejante a lo que hora conocemos como Universidad de las Ciencias, pero, después, en el curso del tiempo, degeneró y se utilizó solamente para rituales de comunicación con las fuerzas del Universo. El Templo, en la época atlante, era un recinto cerrado de estudio y conocimiento.
Estas tres Escuelas comenzaron a progresar de forma muy grande y multiplicaron sus recursos, tuvieron un gran auge demográfico y y comenzaron a trabajar con los secretos profundos de la existencia, de la conservación de los cuerpos, alargando su tiempo de vida.
Estas Escuelas mantuvieron, siempre, relación entre ellas. También mantuvieron relación con los seres del espacio.
Especialmente, estas civilizaciones del espacio les mantenían en comunicación con los grandes retiros, los grandes templos de la fraternidad Blanca, tanto en el lago Titicaca, como en los Himalayas. Es decir, con los grandes Maestros y Guías de la Humanidad.
La Escuela de los seres alados, o Quetzatcoatl y la Escuela del Poder Supremo, de la que derivaron los Toltecas, comenzaron a degenerar sus prácticas y a transformar sus rituales en ritos de magia negra, Todos los secretos que ellos poseían fueron utilizados para el poder, para el dominio, estructurándose como poderosas fuerzas militares. Fueron organizando sus ejércitos, pues existía en ellos un interés por conquistar los demás reinos. El interés de la conquista, no era el interés del oro, si no el interés que tenían por conseguir los secretos de los descubrimientos que habían realizado las otras escuelas.
Las tres Escuelas principales deberían de haber unido sus esfuerzos, haber preservado y haberse preparado para contrarrestar las fuerzas de la oscuridad. Sin embargo, la falta de previsión de la fuerza y el poder de los contrarios, no les llevó a unirse y establecer, así, un plan de protección y conservación de todos sus recursos. Nunca pensaron hasta que punto las otras Escuelas serían capaces de destruir y dañar. Porque, ciertamente, desconocían mucho de las alteraciones y modificaciones que estaban dándose en ellas. De esta forma, se inició la conquista, por parte de las Escuelas degeneradas, y destruyeron a todas las Escuelas Verdaderas, asumieron el poder institucional, el político, y social de los reinos que conquistaron. Implantaron sus rituales, comenzaron a hacer esclavos, comenzaron a utilizar a los seres humanos en rituales macabros de placer y sangre. A través de todo esto, generaron la psicosis del miedo, dominaron las mentes, y, entonces, el mundo espiritual determinó permitir su destrucción, porque era demasiado peligroso lo que estaban generando y también porque, en un momento concreto, podrían poner en peligro a toda la civilización planetaria. Poderosos ingenieros espaciales comenzaron a trabajar sobre los retenes energéticos del planeta para servirse de posibles influencias cósmicas que pudieran producir las transformaciones necesarias para la modificación de esa parte del continente. Después de aproximadamente 1.000 años de corrupción, se aprovechó la presencia de un astro para modificar ligeramente el eje terreste y ajustar las capas tectónicas resultantes, y, consecuentemente, se produjo el hundimiento de esa zona del Atlántico.
Las Poderosas Jerarquías del Universo de Arcángeles actuaron en combinación con los espíritus de la Naturaleza, y liberaron la materia al dominio de fuerzas superiores, precipitando, drásticamente, el hundimiento de esa parte del continente. Porque, realmente, fueron hundimientos parciales de diferentes partes del continente terrestre. Al hundirse, pocos restos quedaron de esta civilización; Solamente algunos grupos fueron rescatados antes del gran hundimiento. Algunos grupos fueron rescatados por naves, otros recibieron el mensaje de trasladarse a los Andes, otros a los Pirineos, otros a los Himalayas y otros a África.
Todavía quedó uno de estos grupos en una de las islas, conocida como Poseidonis. Esta isla era muy grande, más que de isla, podríamos hablar de ella como de una gran nación, pues era tan grande como lo es España en la actualidad; fue la isla del Noé del diluvio de la Biblia, aunque podemos decir que existieron varios Noés. Estos eran los sumos sacerdotes del Templo del Sol, el cual, cuando conoció que iba a suceder una nueva modificación del eje de la Tierra, partieron, con toda su gente hacia una Nueva Tierra. En esta isla vivieron los profetas Anfión y Antulio, quienes cultivaron la filosofía y la mantuvieron durante miles de años.
Con esto, queremos mostrarles que ha habido grandes cambios en la corteza terrestre, cada 12.000, cada 25.000 años… En estos cambios, siempre ha sido necesaria la actuación de las grandes Jerarquías del Universo, para encauzar y ordenar los grupos civilizadores terrestres, para conservar aquello que merecía ser conservado.
Antes del hundimiento de Poseidonis, último resto del continente atlante, emigraron seres de las grandes Escuelas que allí existían, Escuelas conocidas como los profetas blancos, los dactilos, los kobdas, hacia la zona que actualmente se conoce como Mar Mediterráneo.
El hundimiento de la Atlántida abrió el Mediterráneo, que no era, todavía, un mar. Conforme el Mediterráneo se iba abriendo por el ajuste tectónico, los restos del continente atlante se iban hundiendo, lo que permitió que las naves de Noé viajaran a través de un nuevo mar, que se abría en el horizonte. A la vez, con mucha antelación, los diversos grupos ya se habían instalado en las regiones del Ática, Grecia, Egipto, Sudán, India, Tíbet, México, Estados Unidos, los Andes, etc. Grupos pequeños que, después, serían los promotores de nuevas culturas, de progreso, y de nuevas civilizaciones para todas aquellas tribus nómadas que vivían en aquellos lugares.
La Atlántida se destruyó porque las mentes de los seres humanos utilizaron las fuerzas del Universo para destruir la naturaleza, destruir la vida y destruir otros seres humanos.
A partir de aquí, la humanidad ya conoce su propia Historia.
Fuente: Extraído del Cap. IX del libro de Antonio Cerdán Caparrós, “Los Misterios de la Evolución”.