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| Descubre tu misión álmica en esta vida | |
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Nemesis CO-CREADOR@
Desde : 10/01/2009 He aportado : 24878
| Tema: Descubre tu misión álmica en esta vida Jue 2 Oct - 0:58 | |
| Aunque hay varias misiones álmicas según el alma de cada uno, a modo de resumen voy a explicar UNA de las muchas misiones álmicas de las almas encarnadas en la Tierra, repito, es un resumen, la información es mucho más amplia en cada misión álmica. Si te sientes identificado con lo que leas, habrás descubierto qué viniste a hacer aquí y ahora, así que te invito a que no esperes a cambiar y a que empieces EL PRIMER DÍA DEL RESTO DE TU VIDA: MISIÓN ÁLMICA 1: Te ves a ti mismo como un observador de la vida. Te gusta estar solo. Te interesan temas relacionados con el comportamiento humano, las leyes del Universo, el psicoanálisis, la verdad oculta de la historia, los códigos secretos de la vida, etc. Siempre quieres saber más, te gusta profundizar. Cuando algo te resulta aburrido no te involucras, sólo empleas tu tiempo en aquello que te hace aprender y que de verdad te interesa. Tienes muchos conocimientos pero nunca llegas a materializarlos porque piensas que no estás suficientemente preparado. Sueles ver a la mayoría de las personas como menos preparadas y profundas que tú. Aprendiste a estar solo de niño porque necesitabas huir de un progenitor autoritario, agresivo, abrumador, que no te permitía dar tu opinión libremente, y que no respetaba tus emociones ni las entendía, quizá fue un progenitor inmaduro y egoísta que sólo pensaba en sí mismo, pero que sin embargo, trataba de inmiscuirse en tu vida continuamente, por lo que no te quedó más remedio que aprender a evadirte y lo hiciste con el siguiente pensamiento inconsciente: “podrá tratar de controlar lo que hago, pero jamás controlará lo que soy”. Aprendiste a reprimir tus deseos para amoldarlos al adulto que mandaba y de esa forma tener los menos problemas posibles, y así, inconscientemente aprendiste a conformarte y a no reclamar lo que por derecho propio te pertenece. Como de niño tus deseos pasaban por el filtro del adulto intransigente, aprendiste a minimizar tus deseos, a no escucharlos, por eso, ahora piensas que no necesitas muchas cosas materiales y pides poco en ese aspecto. No te dejas llevar por modas ni por publicidad alguna, sigues tus propios criterios intemporales. Tienes dificultades para acabar lo que empiezas. En vidas anteriores sufriste daños físicos importantes, fuiste rechazado, repudiado y asesinado por tus descubrimientos, porque éstos ponían en peligro a las clases altas o a las religiones poderosas de la época, por eso tu mayor temor es existencial, en el fondo de tu corazón te da miedo vivir en la Tierra y por eso no te gusta mucho estar en la calle. Eres más bien casero. Puedes haber sufrido problemas alimenticios. No sientes deseos de brillar ni de sobresalir. Tu espiritualidad sabe que no hay nadie mejor que otro, sin embargo, tus grandes conocimientos espirituales y tus investigaciones terrenales te hacen lucir aunque no lo desees. Te da miedo mostrar esa luz porque tu historia de vidas pasadas, te ha demostrado que sobresalir supone el ostracismo, la tortura e incluso la muerte física. Y aunque en esta vida no te han torturado, ni te han expulsado de tu territorio, sí que has sentido la humillación, el ninguneo, y la envidia más cruel de personas muy cercanas y queridas. Te cuesta salir a divertirte. Te cuesta relajarte y disfrutar. Seleccionas muy bien con quien te relacionas. Prefieres estar solo a estar con alguien que no llene tus profundas inquietudes. Tienes problemas para experimentar el tiempo lineal y sentir el estar en el ahora en el mundo físico. TUS DONES SON LOS SIGUIENTES: Experimentas el tiempo universal. Te es fácil sentir la unicidad con todo lo demás. Sientes el tiempo “sin tiempo”, es decir, sabes sentir la eternidad de la vida. Eres un visionario. A lo largo de la historia, las personas con este tipo de misión álmica han sido las que han hecho avanzar al mundo con sus grandes descubrimientos en todos los ámbitos de la cultura. Eres valiente. Tu temor a estar en la Tierra te hace fuerte ante la muerte. No le tienes miedo a la muerte porque sabes mejor que nadie, que la muerte no existe y que en el otro lado todo es amor y no hay riesgo de que te hagan daño físico. Tu valentía es la energía que te permite buscar lo oculto y mostrárselo al mundo para su progreso. Buscas siempre el conocimiento de lo extraordinario, eso te lleva a encontrar grandes verdades que han sido ocultadas a la humanidad. Eres el alma encarnada con mayor facilidad para conectar con planos superiores, con todo el mundo espiritual. No eres codicioso, ni envidioso, no eres egoísta, más bien al contrario, amas la igualdad y te encanta cooperar y ayudar a los demás. Eres el alma con mayor facilidad para conectar con los animales y la naturaleza en general, puedes incluso escuchar sus mensajes. Te sientes en paz con los animales y seguramente has tenido grandes experiencias con ellos. Encarnas el prototipo de sabio. Tienes visión de águila. Llevas tantas vidas siendo un observador y un estudioso implicado de tal manera, que conoces a la perfección lo que los demás sienten y piensan, aunque no te lo digan. TU MISIÓN ÁLMICA EN ESTA VIDA EN LA TIERRA ES: Eres el más espiritual de todas las almas encarnadas, así que, viniste a aprender a echar raíces en la Tierra, en lo físico. Viniste a divertirte, para así, transformar todas las vidas pasadas de sufrimiento físico (torturas, violaciones, asesinatos, etc.) en alegría y diversión física. Debes dedicar más tiempo a tu cuerpo. Debes ser más humano cuidando más tu aspecto, tu imagen y tus relaciones con los demás, ¿cómo?: viajando más, dejando que los demás te enseñen a jugar, haciendo todas esas cosas que a veces criticas y te parecen superficiales, por ejemplo, yendo más a la peluquería, a comprar ropa bonita, a regalarte pequeños lujos terrenales. Y sobre todo, debes materializar toda tu sabiduría, tu sensibilidad y tu espiritualidad en servicio a la humanidad, ¿cómo?: deja de pensar que no estás suficientemente preparado, porque eso no es cierto, eres el más preparado de todo el “misionario álmico”, debes escribir un libro, o dar clases, curar, sanar, o hacer películas, canciones, vídeos, lo que sea, que puedas enseñar a los demás y ayudarles a ser más espirituales y a conocer la verdad que se esconde detrás de este mundo físico. El mundo espiritual es tu dominio, eres el rey o la reina de la comunicación con los planos superiores, aprovéchalo, y da a conocer toda tu paz, toda tu serenidad, toda tu bondad y grandeza álmica. Los demás te necesitan para avanzar y progresar en la Tierra. Deja de esconderte. Eres un visionario, un sabio, un mago, muestra tu luz, esta vez nadie ta va rechazar por ello. Deja de dudar de ti mismo. Lo que crees que sabes, lo sabes y eres de los pocos que tienen ese gran conocimiento, no te menosprecies, no te subestimes, eres GRANDE, eres un HÉROE, eres VALIOSO, eres SENSIBLE, eres como una POESÍA, muéstrate al mundo y éste se llenará de AMOR Y ARMONÍA. Un mundo sin tu conocimiento sería como un mundo sin música. Venga, sal ahí fuera y dibuja todas las notas del pentagrama de la vida, hay almas esperando a que lo hagas. http://www.reconciliacioncuantica.com | |
| | | Nemesis CO-CREADOR@
Desde : 10/01/2009 He aportado : 24878
| Tema: Re: Descubre tu misión álmica en esta vida Jue 2 Oct - 0:59 | |
| Descubre tu misión álmica (parte II) Tienes la certeza de que existe una fuente universal de amor incondicional y sabes que esta conexión con el amor te fue arrebatada. Por eso reclamas al mundo continuamente ese amor que ves que otros tienen y del que tú careces, sin embargo, una vez conseguido ese amor, dudas de él y lo sometes a pruebas continuas. Tu miedo a ser abandonado de nuevo hace que ahuyentes tu mismo a esa persona de tu lado, anticipándote así a un posible nuevo abandono (a pesar de que ese supuesto abandono sólo está en tu imaginación). En ocasiones le quitas valor a la persona que tienes al lado y te sientes atraído hacía personas difíciles de conseguir. Inconscientemente buscas en los altibajos emocionales una conexión intensa con el sentimiento de amor. Idealizas a las personas por las que sientes atracción. Buscas la originalidad. Te gusta sentirte especial, distinto a los demás, cuando no lo logras sientes como si los demás no te vieran, como si fueras invisible. Pareces vivir continuamente insatisfecho. Te comparas muy a menudo con los demás. Sueles tener sentimientos de ridículo, vergüenza y baja autoestima. Te gusta el mundo de lo esotérico. En tu infancia sentiste el abandono de alguna manera: bien, de forma literal, es decir, tu padre o tu madre o ambos se fueron de casa, o se divorciaron y dejaste de ver a uno de los dos, o fuiste dado en adopción, o viviste con tus padres, pero uno de los dos aunque estaba físicamente, no lo estaba emocionalmente, bien por inmadurez, bien por alguna enfermedad o algún tipo de adicción. Si no sufriste el abandono de ninguno de tus padres, la causa de pertenecer a esta misión álmica puede ser debida a haber sufrido la muerte física de forma repentina, trágica y temprana de un ser querido, un novio/a cuando eras muy joven. Puede ser que tu madre no tuviera suficiente leche y durante un tiempo mientras fuiste bebé pasaras hambre. También puede ser que por consejo del médico o por alguna moda cultural tu madre te apartara del pecho pasado el tiempo establecido para amamantar y sin darse cuenta te dejara insatisfecho. También se puede dar la situación de que la madre diera el pecho con prisa, nerviosa, con ganas de que el bebé acabara porque le hacía daño al succionar, o porque se le hacia tarde y debía marcharse, en ese caso, el bebé interpreta eso como si la madre rechazara la conexión con el hijo, y como la madre es la fuente de todo cuando uno es un lactante, el bebé no aprende a sentirse conectado con el amor primigenio, el amor incondicional al que todos tenemos acceso, y antes de sufrir ese abandono, aprende a desconectarse él de su propia madre, para no sentirse abandonado de nuevo, lo que se traduce en una nula conexión energética con el tercer chakra, el que está encima del ombligo. De igual manera, puede darse el caso de que por algún problema con la placenta, no te llegara dentro del vientre de tu madre el alimento necesario. En vidas pasadas sufriste hambrunas, puede ser que llegaras a morir de hambre o que ante la escasez, te vieras obligado a elegir a quien le dabas comida y a quien no. Convives con la sensación de que siempre falta algo. Te criticas a menudo, inconscientemente albergas la ilusión de que fuiste abandonado por tu culpa, porque no eras ni eres digno de ser amado. Puedes haber sufrido depresión. Puedes sentir melancolía. Lo más importante para ti en la vida es sentirte amado profundamente. Reemplazas ese amor intenso que reclamas con ciertos lujos terrenales. Te gusta sentir la emoción de lo “secreto”, eres capaz de llevar una vida pública y otra que sólo tú conoces. Tienes cambios de humor extremos. Eres capaz de amar u odiar a la misma persona en un espacio de tiempo corto. Con tal de no sentirte solo, eres capaz de soportar por parte de tu pareja situaciones de sumisión, humillación y dependencia. Necesitas que te dediquen tiempo, por eso alargas las conversaciones, puedes pasar horas al teléfono con tal de no sentirte vacío. Inconscientemente absorbes energía de los demás. Las personas lo notan e intentan no pasar mucho tiempo contigo y si lo pasan, acaban agotados. Es un bucle del que te es difícil salir, porque tú lo que necesitas es justo lo contrario, no sentirte abandonado, para lograrlo tienes que aprender a no absorber energía ajena, algo que explico más adelante en las técnicas para equilibrar tu energía álmica. Cuando estás con alguien muy generoso, muy intenso o muy apasionado a la hora de hablar, te sientes incómodo, es como si por un lado te sintieras atraído y por otro no, quizá porque ese tipo de personas, te recuerdan como es el amor primigenio y al mismo tiempo cuanto sufriste al perderlo. TUS DONES SON LOS SIGUIENTES: Tienes una gran capacidad para sensibilizarte con el sufrimiento ajeno y te gusta ayudar a los demás y apoyarles cuando lo pasan mal. Eres muy intuitivo. Eres inocente y jovial. La belleza es algo que sólo tú sabes ver en cosas que para los demás pasan desapercibidas. Eres un gran artista. A lo largo de la historia has mostrado al mundo la belleza, la estética y la armonía de todo lo que nos rodea. Gracias a ti el mundo en más bello. Te rodeas de creatividad, bien sea poniendo la mesa, decorando tu hogar o vistiendo acorde con tu gusto exquisito y original. Tienes la capacidad de conectar hechos que aparentemente no tienen relación entre sí. Eres el rey o la reina de las metáforas. Cualquier acontecimiento aparentemente insignificante, tú lo conviertes en un caleidoscopio lleno de luces, colores, sabores y olores convirtiendo lo cotidiano en sublime. De todo el “misionario álmico” tú eres al que más le gusta estudiar e investigar sobre el conocimiento de ti mismo, de tu interior. Te gusta profundizar en tu naturaleza más profunda. Eres discreto y respetuoso. Se te puede confiar un secreto porque jamás se lo contarás a nadie. Te pase lo que te pase, tienes la capacidad de renovarte y regenerarte. Eres como el ave fénix. TU MISIÓN ÁLMICA EN ESTA VIDA EN LA TIERRA ES: Eres el más artístico de todo el álbum álmico. Has venido a convertir este mundo en un lugar mucho más bello, mucho más estético. Como sufriste desnutrición material en otras vidas, y en ésta has vivido la desnutrición emocional, tu misión álmica es transformar ese vacío interior en una fuente de agua capaz de llenar ríos enteros, ¿cómo?: dándote a los demás, deja de imaginar que te van a abandonar porque esta vez no va a ser así. Crea una relación de pareja basada en la confianza. Cuando te veas dudando de la otra persona o buscándole defectos, obsérvate desde fuera, como si fueras un testigo de ti mismo y evalúa en qué medida es real lo que ves o estás intentando abandonar antes de que “supuestamente” te abandonen. Piensa que la vida cotidiana te aburre, no porque sea realmente aburrida, sino porque tú eliges inconscientemente intensidad en cada detalle para de esa manera paliar la falta de conexión con la fuente primigenia de amor. Para aprender a ser feliz con la vida “humana normal”, sé consciente de que utilizas este sistema de protección basado en despreciar la rutina o la cotidianidad por tu necesidad de tener una vida especial, y esta necesidad de sentirte especial o de tener una vida especial viene de creer inconscientemente que no eres digno de amor. No necesitas sufrir emocionalmente para llenarte de intensidad. De hecho, cuando aprendas a desbloquear esta resistencia te darás cuenta de que en la vida cotidiana, serena y pacífica está toda la intensidad y toda la profundidad del amor verdadero. El amor verdadero e incondicional no tiene opuestos, es todo lo que hay en el Universo, por eso, cuando vives inmerso en él, el vacío no existe. Ahora ya conoces de donde viene la falsa creencia de que te van a abandonar, no necesitas sentirte especial a base de llevar una vida de fantasía, basada más en las películas que en la realidad. La realidad es mucho más extraordinaria de lo que crees. El amor hacía otra persona basado en respetar lo que nos disgusta de él o de ella es mucho más profundo y te da mucha más felicidad que el cambiar de pareja continuamente o sentirte desgraciado por llevar una vida “normal”. Cuando sientas que desvías la atención hacía el pasado, hacía aquello que anhelas o hacía el futuro y empiezas a despreciar lo que ya tienes, acuérdate de lo que sufres yendo en pos de personas inalcanzables, y date cuenta de que esas personas “misteriosas” suelen ser egoístas e incapaces de amarse ni siquiera a sí mismos, no seas víctima del ego insaciable de personas con mucha forma pero poco fondo. http://www.reconciliacioncuantica.com | |
| | | Nemesis CO-CREADOR@
Desde : 10/01/2009 He aportado : 24878
| Tema: Re: Descubre tu misión álmica en esta vida Jue 2 Oct - 1:01 | |
| MISIÓN ÁLMICA Nº3 MIEDO PRIMIGENIO: EL RECHAZO • De pequeño pocas veces prestaban atención a tus necesidades. Eran más importantes las necesidades de los adultos que cuidaban de ti. • Cuando eras niño te acostumbraste a negar tus emociones más íntimas. Negaste cualquier situación negativa como fórmula para no sufrir. En tu familia se daban fuertes discusiones, es muy probable que hubiera alguien enfermo, o alcohólico, pero al día siguiente, después de la pelea, todo funcionaba como si nada hubiera pasado. De esa manera aprendiste a negar en tu interior lo negativo y aprendiste a centrarte en olvidarte de ello como si en realidad nunca hubiera sucedido. Ya no lo recuerdas, pero de niño manejaste la situación haciéndote la siguiente reflexión: “La discusión de ayer entre mis padres no existió, papá no es alcohólico, debí de soñar que se peleaban, debí imaginarlo todo”. Y así, de manera inconsciente aprendiste a negar tus sentimientos de miedo, o de vergüenza de tal manera que hasta creíste que te los inventabas. Ahora de adulto, estás tan perdido, que no sabes concentrarte en tus propias emociones y cuando logras concentrarte un poco tampoco estás muy seguro de si lo que sientes es real o no lo es. Por eso, le das más relevancia a lo que los otros opinan, sienten y deciden que a lo que tú opinas, sientes o decides. De hecho, te cuesta mucho decidir. • Tus deseos siempre están supeditados a los deseos de los demás. Cedes continuamente. Lo que los otros proponen siempre está por delante de lo que tú querrías. • Se te hace tarde habitualmente, porque tienes la tendencia a prestar más atención a las tareas secundarias y dejar en un segundo plano lo que de verdad tienes que hacer. • Le das la misma energía a los intereses secundarios que a los intereses principales, ya sean emocionales o profesionales, es más, los intereses primordiales para ti, habitualmente son los últimos que realizas o a los que menos atención prestas. Hacerlo así te perjudica, pero no eres consciente de ello. En tu infancia tuviste que madurar a una edad muy temprana porque los adultos que te cuidaban eran inmaduros, aprendiste a delegar tus propios intereses a favor de los intereses de dichos adultos, así que no aprendiste a poner en primer lugar lo que realmente te interesa a ti. Por eso ahora, no sabes distinguir entre tareas principales y tareas secundarias, y si logras saberlo, siempre dejarás en último lugar la tarea que más te interesa a ti, porque inconscientemente sientes miedo de poner tus intereses en primer lugar, porque crees que al hacer eso, te rechazarán, te abandonarán o te ignorarán, que es exactamente lo que ocurrió en tu infancia cuando reclamabas la atención que como niño te correspondía. • Lo que más te importa es la unión. No soportas que nadie se enfade, por esta razón eres capaz de convertir en tuyos los deseos ajenos y hasta entusiasmarte con ellos. • Ves siempre la parte positiva de cualquier opinión ajena. • Nunca te posicionas o te resulta difícil hacerlo. Te da miedo decir que “no”. • Tus principales problemas son: o Tomar decisiones o Posicionarte. Mostrar tu propia opinión o La ira pasiva • Vives conteniendo tu energía, tanto la positiva como la negativa. Te cuesta mucho mostrar tu enfado. Y también te cuesta mucho hacer demostraciones de amor. • Te gustaría desobedecer pero estás bloqueado por un deseo inconsciente de aprobación ajena. Te importa mucho lo que opinen los demás de ti. • Enfocas tu atención en averiguar con que opinión ajena estás de acuerdo y no prestas energía a averiguar cual es tu propia opinión, que puede ser diferente a cualquier otra. • Te cuesta dar el primer paso. Prefieres que los demás lo den primero y luego tú dejarte hacer. Esta permanente indecisión siempre es interna, hacía los demás pareces tener opinión propia cuando apoyas la opinión de otro. • Toda este miedo a posicionarte se debe a que de pequeño tuviste que resignarte con una situación familiar dolorosa que no pudiste cambiar, o que tu hubieses resuelto de forma distinta de cómo lo hicieron los adultos que estaban a tu cargo. Desde entonces arrastras la costumbre de querer que todo a tu alrededor sea paz, no soportas que nadie se enfade, y para que haya paz eres capaz de supeditarte a lo que ordenen las personas que con más facilidad se enfurecen. • Te cuesta deshacerte de cosas, te cuesta tirar o dar lo que ya no te sirve, está viejo o anticuado. Por la misma razón, acumulas en los armarios cosas que no utilizas por si acaso algún día las puedes necesitar. • Puede que algunas personas con esta misión álmica sean coleccionistas, pueden coleccionar cajitas, cómics, figuritas, lo que sea. • En tu infancia viviste muchas discusiones. Tus padres se peleaban continuamente. Como esa situación te hizo sufrir tanto, no aprendiste a canalizar la ira de forma saludable. Desconoces que la ira cumple una función muy importante a la hora de mostrar al mundo tu posición personal. Cuando las personas se enfadan descubren lo que no quieren y así dan un paso más en averiguar lo que quieren. Si nunca te enfadas, es difícil que descubras lo que en el fondo de tu corazón deseas. Tienes tu ira completamente anestesiada. Cuando muestras ira lo haces de manera inconsciente y siempre de manera pasiva, ¿cómo?: pues comportándote de manera muy testaruda, te comportas como un cabezota, también demuestras tu ira pasiva cuando no defiendes a la víctima de una situación por tu miedo a que el verdugo te rechace y deje de prestarte atención, se trata de una ira redireccionada, en vez de proyectarla hacía el verdugo la proyectas hacía la víctima. • La ira pasiva la puedes emplear también mostrándote indiferente, con cierta actitud como de estar por encima del bien y del mal, es algo que sueles hacer cuando te sientes rechazado, sea ese rechazo real o imaginado en tu mente de “niño herido”. • Normalmente culpas a los demás cuando las decisiones tomadas no han sido las correctas. No te responsabilizas de tus propios errores porque como en tu interior sabes que la decisión no la tomaste tú, la tomó otra persona por ti, en consecuencia no te haces responsable de “tus decisiones”. Pero la realidad es que deberías tomar tú la decisión que creas correcta y si luego no sale como esperabas, asumirlo y nada más, no pasa nada, los errores no existen, venimos a la Tierra a experimentarlo todo, no existen las experiencias buenas y las experiencias malas, sólo existen experiencias, todo lo que ocurre aquí es pasajero y nadie va a juzgarte por ello. • Al asumir como tuyos propios los intereses de tu pareja, ésta se convierte en el puntal en el que encuentras tu dirección en la vida, por lo que cuando hay amor entre los dos, esa fusión hace que te sientas lleno. Fusionarte con otra persona mediante el amor de pareja te permite dejar de sentir el vacío y la separación con la vida. • No te gusta manipular, ni beneficiarte de nadie, ni dominar a nadie, lo único que ansías es la fusión del amor de pareja. • Como te es más fácil crear energía para los intereses de tu pareja que para los tuyos propios, una relación de pareja es primordial para ti, es la única manera en la que consigues sentirte seguro y con un proyecto de vida. • Renunciar a una relación de pareja, por muy negativa para ti que sea, te resulta imposible, porque cortar con tu pareja supone para ti cortar con tu propia energía, es como si te quitaran un pie o una mano. La energía de tu pareja es tu energía, tú lo vives así, por eso prefieres ser sumiso y aguantar a terminar con la relación. • Al mismo tiempo el hecho de sentirte tan fusionado con tu pareja, hace que por dentro te sientas controlado. De la misma manera que anhelas esa fusión anhelas la independencia, porque no quieres rendirte a las exigencias de la otra persona. Ese conflicto interior acarrea una lucha interna tremenda, que no compartes con nadie y que te hace vivir con tensión. Te preguntas constantemente cual será la mejor decisión, si fusionarte o si independizarte, parece no haber luz al final de ninguno de los caminos. TUS DONES SON LOS SIGUIENTES: • Eres el más diplomático de todo el misionario álmico. • Ofreces un apoyo firme y honesto, al interesarte más lograr la paz que imponer la forma en la que tú harías las cosas, los demás sienten que tu apoyo es leal. • Sabes escuchar y aceptar a los demás. No necesitas entrometerte en la vida de nadie ni ejercer ningún tipo de poder sobre los demás, lo cual se traduce en que te llevas bien con todo el mundo y todos confían en ti para contarte sus cosas. • Eres muy buen amigo. Los demás siempre pueden contar contigo en cualquier circunstancia. • Sabes mejor que el propio interesado lo que realmente le conviene, y lo sabes, porque estás tan acostumbrado a ceder ante la opinión de los demás que has aprendido a identificar lo que le conviene a cada cual. Te has hecho un valioso observador de los errores y los aciertos ajenos, eso te convierte en un gran consejero. • Eres muy empático. Te resulta fácil ponerte en el lugar de los otros, incluso llegas a sentir las emociones que sienten los demás como si fueran tuyas. • Sabes amar incondicionalmente. • Cuando empiezas algo te gusta acabarlo. Tu testarudez se convierte en una virtud, en este caso. Pase lo que pase, si te comprometes con algo lo haces. TU MISIÓN ÁLMICA EN ESTA VIDA EN LA TIERRA ES: Tu misión álmica consiste en mostrar tu yo sin importarte la reacción que puedan tener los demás. Has venido a aprender a amarte lo suficiente como para que entiendas que tu postura ante la vida es única y es valiosa. Tienes derecho a saber que quieres, quien eres y a reclamarlo. Tienes que aprender a no unirte a personas conflictivas en aras de ser su salvador o salvadora, porque nadie salva a nadie, porque el mundo funcionaba solo antes de que tú vinieras y seguirá haciéndolo el día que te vayas, así que deja de preocuparte. Tienes que aprender a tener una posición concreta y directa y mostrarla a los demás sin temor de ser rechazado por ello. A fuerza de amoldarte tanto para conseguir la paz, has perdido tu identidad personal. Renuncia a esa pregunta interior que te haces constantemente “¿con quién estoy de acuerdo?”, reemplázala por esta otra cuestión “¿cuál es mi opinión personal sobre este asunto?” y reafírmala así: “me da igual si mi opinión coincide con el de la persona con mucha ira, si se enfada, que se enfade, no necesito la paz para sentirme fusionado con la vida, la paz de los demás no es mi responsabilidad, sólo mi propia paz es responsabilidad mía”. Que alguien se enfade contigo continuamente sin tu hacer nada, no significa que te rechaza, significa que no controla su ira, y significa que no tiene en cuenta el daño que te causa con cada agresión verbal. Tienes la tendencia de sentirte atraído hacía alguna persona de carácter difícil, para revivir situaciones similares a las peleas y gritos que tus padres tenían cuando eras niño, y al revivirlas actuar como tú hubieses querido que tus padres actuaran cuando eras pequeño, es decir, callando ante el agresor y así transformar en paz aquellas agresiones verbales y de manera inconsciente sentirte aliviado y dueño de la situación. Tu bloqueo infantil te hace necesitar a un verdugo continuamente. Necesitas un verdugo en tu vida porque necesitas salvar a ese verdugo y reconducirlo. El problema es que los verdugos nunca se dejan reconducir, viven en su sombra y ahí seguirán, mientras, tú pierdes tu vida y tu energía volcándote en esas personas. Hazte consciente de ello. Piensa que lo único que tu inconsciente desea es revivir continuamente aquella situación infantil frustrante, para seguir reclamando el amor del adulto que más gritos daba y del que te sentiste profundamente desvinculado y desatendido. Ponle cara y nombre a ese adulto, ¿era tu madre?, ¿fue tu padre?. Dile no a su amor enfermizo. Dile no a los conflictivos. Aprende a buscar el amor en personas tranquilas, dulces y sinceras y di “no” por primera vez en tu vida a los verdugos. Si no lo haces nunca encontrarás el amor verdadero, ni la amistad verdadera y desperdiciarás toda tu energía en intentar ser amado o necesitado por la persona equivocada. http://www.reconciliacioncuantica.com | |
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