Cuando se produce la ruptura en una relación de pareja se piensa que el mundo se derrumba. Te sientes superado y sin alternativas de acción: Miedo, ansiedad, vulnerabilidad, desesperación, bloqueo, ...
Algo que considerabas estable ha cambiado, pero no sabes como afrontar este cambio, cómo enfocar tu vida. Necesitas un período de adaptación, un tiempo para recuperar de nuevo la estabilidad y aceptar lo sucedido. Este periodo de tiempo se llama duelo.
En este período de ajuste emocional, las emociones fluctúan constantemente, son como una montaña rusa y para superar el duelo inevitablemente se pasará por seis etapas. No siempre siguen el mismo orden y la duración de cada una de ellas es variable en cada persona, incluso se puede volver a pasar por una o varias de ellas más de una vez.
• NEGACIÓN: No se acepta la nueva situación: "Esto no está pasando". Es un mecanismo de defensa para retrasar la reacción posterior. Se quiere negar la evidencia para protegerse de lo que implica la ruptura.
• RABIA: Es una reacción emocional a la realidad, al sentirse herido: "No me merezco esto" "¿Por qué a mi?". Aparece la rabia, el enfado, la ira con la vida, el mundo. Expresarlo, sacarlo de dentro es la mejor manera para liberarse de ella.
• CULPA: Se siente culpabilidad por la nueva situación o se busca esta culpabilidad en la otra persona o fuera de la relación: "La culpa de todo es mía/suya/del trabajo/de su madre/de su amiga/o...". Es una forma de buscar explicaciones a lo que ha ocurrido, de encontrarle sentido y poder justificarlo. Buscar culpables o convertirse en víctimas es improductivo, pero en cierto modo, es inevitable.
• NEGOCIACIÓN: Se trata de negociar con Dios, el destino o con quien esté involucrado en la situación: "Si esto cambia, yo cambiaré, haré lo que me pide" "Si vuelvo a ser más cariñoso/a igual vuelve conmigo". Es una nueva conducta de defensa, de querer volver a estar como antes, de retomar la situación.
• DEPRESIÓN: Las cosas han cambiado y la persona comprende que se encuentra en el final de algo, pero aún no ve el principio de lo que sigue: "Nada tiene sentido" "Nunca voy a encontrar a otra pareja". Se es consciente de lo que ha perdido y la pena puede provenir no solo de la pérdida de la persona, sino del tiempo que se compartió y del fracaso del proyecto de pareja.
• ACEPTACIÓN: La situación no cambia externamente, sólo queda cambiar internamente aceptando los hechos y modificando la escala de valores: "Veo claras muchas cosas en las que antes ni pensaba". Se han reestructurado ideas, pensamientos y creencias, se tiene un nuevo enfoque.
Aunque en un principio no te veas capaz de sacar algo bueno de esta situación, cualquier situación por negativa que sea nos aporta algo positivo. De hecho, aprendemos más de lo negativo, de lo doloroso, porque lo positivo no nos hace recapacitar. Es una valiosa oportunidad de crecimiento personal, te das cuenta que eres más fuerte y creativo de lo que pensabas, descubre nuevas facetas y habilidades que estaban escondidas dentro de ti.
Todo dolor acaba diluyéndose, sé paciente y da tiempo al tiempo. Es un proceso paulatino, sin prisa donde el resultado es un cambio profundo y de enorme crecimiento personal.
http://serfelices.org/parejas2/315-etapas-duelo-amoroso