Se ha escrito mucho sobre esta Ley a lo largo de la historia, no tan claro como ahora pero sí haciendo referencia a la mente humana y su poder “oculto”, al Universo y el poder de la naturaleza… El que ha ido directo al grano ha sido “El Secreto”, que explica claramente qué es la Ley de la Atracción, pero a la hora de aplicar lo que dicen en el libro algo falla, y después de unos meses intentando hacer todo lo que dicen sigue sin funcionar.
La Ley de la Atracción
La Ley de la Atracción dice: “Mantener cualquier imagen preconcebida de la inteligencia convierta la manifestación de esa imagen en una realidad”. Es decir, el acto de tener una imagen cualquiera en tu mente tiende a materializar, en el mundo real, objetos y situaciones que corresponden a esa imagen. Literalmente, tus imágenes mentales crean tu mundo.
Funcionamiento de la Mente
El esquema básico que sigue nuestra mente es el siguiente:
Palabras–>Pensamientos–>Sentimientos–> Vibración–>Realidad
Nuestra mente se divide en dos partes: la mente consciente y la mente inconsciente.
La mente consciente es la parte de la que se tiene constancia mientras se está despierto; en esta parte es donde usas tu razonamiento lógico, donde tomas las decisiones. Es la responsable de todos tus pensamientos mientras estás despierto.
La mente subconsciente o inconsciente, es la parte que queda oculta bajo el pensamiento consciente. Es la responsable de mantener las funciones involuntarias de tu cuerpo. Percibe, intuitivamente, muchas circunstancias de las que uno no se percata conscientemente.
La mente consciente es experta en lógica y razonamiento, pero no tiene el poder directo sobre su entorno.
La mente subconsciente posee el poder de moldear la realidad de acuerdo con tus ideas. Sin embargo carece de razonamiento lógico, es decir, no es capaz de analizar o evaluar la información.
Cuando le suministras una imagen a tu subconsciente, en efecto, le estás diciendo que cree esa imagen en la realidad, pero tu mente subconsciente no se cuestiona si esa imagen es buena o mala para ti.
Sabiendo esto, a partir de ahora, puedes cambiar las cosas, puedes decidir conscientemente qué imágenes quieres que reciba tu mente subconsciente, es decir, qué imágenes quieres que se hagan realidad.
Las posibilidades que puedes tener cuando explotes el poder creativo de tu mente subconsciente son infinitas.
Este poder es desconocido para la mayoría, pero es real. Tu mente subconsciente tiene un poder infinito a tu disposición para crear un mundo basado en tus imágenes mentales.
Ahora es el momento de explorar este recurso y poner a trabajar esta ventaja en tu favor para obtener lo que esperas de la vida.
Si alimentas tu mente con una imagen de ti mismo como alguien agradable y atractivo, tendrás muchos amigos, si le dices que eres inteligente e ingenioso tu talento mostrará tus habilidades mentales. Si das a tu mente una visión de amor y comprensión atraerás las relaciones que desees. Si tienes una imagen de ti mismo como alguien saludable y resistente a las enfermedades, te espera una vida larga y vigorosa. Si mantienen una imagen de riqueza y abundancia, vivirás prósperamente y el dinero no te preocupará.
Si por el contrario tus imágenes sobre la salud, amor, amistad, o dinero son negativas, ni que decir tiene, que tu vida será desagradable, por no decir otra cosa.
Tú tienes el control sobre las nuevas imágenes que quieras introducir.
Aunque en este momento tus imágenes sean negativas, porque en la mayoría de nosotros es así por la sociedad actual, puedes cambiarlas.
Estas imágenes negativas pueden ser eliminadas o sustituidas por otras positivas.
Imágenes Positivas
Un método efectivo a la hora de implantar imágenes, debe estar basado en un entendimiento adecuado de la forma que tu subconsciente tiene de funcionar. Si consigues tratar a tu subconsciente de la forma correcta, éste funcionará de forma fiable y predecible. Implantar tus imágenes positivas no es difícil, pero requiere mucha delicadeza. Hay una técnica expresamente diseñada para que tú seas capaz de implantar tus imágenes positivas. Es una forma infalible de informar a tu subconsciente de lo que quieres desde ahora y en adelante. Son las llamadas afirmaciones.
Las Afirmaciones
Mucha gente asegura que el descubrimiento de las afirmaciones es, sin duda el suceso más importante de su vida.
El primer paso para conseguir lo que uno quiere es saber qué quiere realmente. Quizás desearías tener más cosas de las que actualmente posees, pero no sabes exactamente de qué se trata. Estos sentimientos son generales y ambiguos, carecen de claridad y precisión. Para obtener resultados debes saber exactamente qué quieres hacer y qué cosas quieres tener, sólo si tienes todos los detalles, podrás formar imágenes de lo que quieres.
Ahora piensa, o escribe lo que deseas, no lo que necesitas, sino lo que deseas de verdad, sin ponerte límites. Piensa cómo te gustaría que fuera tu vida en realidad, sé tan específico como te sea posible; por ejemplo, si es dinero pon la cantidad, si es un coche pon la marca, el modelo, el color, etc, si lo que quieres es adelgazar pon los kgs. que quieres pesar… etc
Lo que pongas en ese papel debe tener una respuesta afirmativa a las siguientes preguntas:
¿Realmente lo deseas? (Debes tener un deseo ardiente por ese punto no un interés pasajero, cuanto pienses en eso debes sentir una respuesta emocional positiva.)
¿Es posible de realizar? (Ningún deseo es imposible de ser alcanzado si alguna vez alguien lo ha conseguido alcanzar)
¿Causará perjuicio a alguien? (En esta pregunta no te debes preocupar por los celos de otra persona cuanto tú consigas lo que quieres, se refiere más bien a daños físicos o mentales hacia otra persona)
¿Se contradice con algún otro deseo de la lista? (Esto es que si dos elementos de tu lista emiten energía en direcciones opuestas)
¿Es suficiente? (Aquí ten cuidado con tus condicionamientos negativos, por ejemplo, tú deseas tener 1.000.000 de euros, pero al ir a escribirlo, tu prudencia te lo ha impedido y has escrito 200.000 euros, porque con eso tienes de sobra para saldar tus deudas. Si es así cámbialo, escribe lo que de verdad quieres, no te pongas limitaciones)
Debes forzarte a pensar a lo grande.
Una vez que tengas escrito lo que de verdad deseas, ya puedes convertir cada uno de tus deseos en una afirmación.
Una afirmación, por tanto, es una frase que realiza una declaración específica sobre ti como si ésta fuera ya cierta. Una afirmación se crea con el propósito de implantar la imagen expresada en el subconsciente.
Para que una afirmación llegue a ser efectiva debe ser específica y positiva.
Tiene que ser específica, ya que el contenido de una afirmación debe ser expresado con el suficiente detalle como para poder ser fácilmente visualizada, cuantos más datos aportes más fácil será imaginar la imagen de ese elemento.
Además debe ser positiva, esto no es tan sencillo como parece. El uso apropiado del lenguaje es esencial.
Una afirmación debe ser formulada como si el hecho del que hables fuera algo ya llevado a cabo. Nunca debes escribir algo como “Yo, …., quiero un Mercedes CLK negro con llantas de aleación”, ya que tu subconsciente al oir esto pensará que “si lo quieres” es porque todavía no lo tienes. Lo correcto sería escribir “Yo, …., tengo un Mercedes CLK negro con llantas de aleación”. Tampoco escribas “Yo, …., voy a tener…” ya que si lo “vas a tener” es que todavía no lo tienes.
En definitiva, el tipo de afirmación que realmente funciona es en la que el elemento se describe como si ya lo tuvieras en el momento presente.
Haciéndolo del modo correcto tu subconsciente oye esa declaración y en ese momento tu imagen siendo propietario del Mercedes negro, es la que se implanta.
Una vez que tenemos nuestras afirmaciones, el siguiente paso es implantarlas en el subconsciente, para ello seguiremos tres pasos cada día:
Nada más levantarte y antes de que pasen 15 minutos, lee en voz alta tus afirmaciones pronunciando lentamente y vocalizando, esto hace que las imágenes penetren en tu subconsciente. Cuando el subconsciente oye tu voz afirmando algo, éste la cree. Después de leer cada una de las afirmaciones, visualiza la imagen de lo que acabas de decir. Visualizar es algo más que imaginar. Visualizar es construir una imagen completa y detallada en el ojo de tu mente. Cuando realizas una visualización creativa, puedes “ver” el objeto como si estuviera físicamente presente. Para usar este método de la visualización creativa, selecciona una imagen que se corresponda con tu afirmación. Cierra los ojos, toma aire y relájate durante un momento. Deja tu mente en blanco. Dirige tu conciencia hacia la imagen. Deja que tu mente la observe. Tienes que ver la imagen como si estuviera proyectada en una pantalla de cine. Y por último, disfruta de ella.
Una vez al día escribe una de tus afirmaciones repetidas veces (por lo menos 10 veces). De vez en cuando, es conveniente escribir las afirmaciones en primera, segunda y tercera persona, en orden rotativo.
Antes de dormirte, repite el proceso de por la mañana, es decir, vuelve a leer en voz alta y visualizar cada una de las afirmaciones.
La repetición es esencial para la técnica de las afirmaciones. Debes repetir tus afirmaciones una y otra vez. Una vez que en tu subconsciente se haya implantado la imagen del éxito todo empezará a ponerse a tu favor. La repetición de una afirmación es el modo más eficaz conocido para conseguir introducir una imagen en el subconsciente. Mediante esta repetición, tu subconsciente llegará a creer lo que tú le digas. Si somos constantes, lo conseguiremos. No te saltes un día, para que esto funcione tienes que esforzarte ese poquito.
Todo requiere su tiempo, hay que tener un poquito de paciencia para empezar a ver los resultados (dicen que entre 30 días y tres meses ya se empieza a notar el cambio, eso sí, si seguimos las instrucciones al pie de la letra).
http://elpodermentalylaleydeatraccion.wordpress.com/