1. Quiérete mucho. Este es el punto de partida. Debemos amarnos mucho y tal como somos. Los ángeles me han explicado que atraemos a nuestra vida las personas que vibran de acuerdo a las vibraciones que nosotros emitimos.
Por lo tanto, si te autojuzgas duramente, no te quieres o no te gusta lo que ere, inconscientemente atraerás un tipo de persona que quizás vea eso en ti y no te trate como en el fondo realmente deseas. Por eso, para atraer a tu vida el tipo de persona ideal, ámate.
2. Comparte tu amor. Luego de haber fortalecido tu amor propio, tu autoestima, compártelo. No temas hacerlo. Házlo sin esperar recompensa, pues, aunque suene contradictorio, esta es la forma en que realmente recibirás. Da y, por ley, recibirás.
3. Cree. Ten fe en que la felicidad es para ti y así será. Visualízate feliz junto a esa persona especial y de esa manera enviarás al Universo esa energía que poco a poco irá materializándose.
}Aquí algunas sugerencias que los seres de luz me han entregado para atraer el amor o para fortalecer la relación amorosa que ya tenemos:
- Visualiza aquello que desea. Bien sea que anheles para tu vida una nueva relación o que la que ya tienes sea más fuerte y armoniosa, practica la visualización.
Los ángeles me han enseñado que esta es una herramienta muy valiosa. Crea una imagen que en lo posible resuma aquello que más quieres (por ejemplo, puedes verte sonriente al lado de esa persona especial diciendo: “soy la persona más feliz del mundo junto a ti”). Mantén esa imagen, no la cambies. Cada día en lo posible, visualízala al menos tres veces al día por algunos minutos.
- Ten fe. En esta como en cualquier otra situación de nuestras vidas, la fe es lo más importante. Si haces una visualización constante pero dentro de ti no cree que vaya a suceder, así será. La fe es el verdadero motor para que las cosas se den, así que trabaja en ella, fortalécela.
- Suelta tu deseo. Luego de pedir a través de la visualización, los ángeles aconsejan que soltemos nuestro deseo. Dios se encargará de traerlo a nuestras vidas de la mejor forma posible (que solo El en realidad sabe).
Este punto está íntimamente relacionado con el punto anterior, ya que consiste en confiar en que luego de pedir se nos dará y por ende, no debemos preocuparnos. Solamente, debemos estar atentos a recibirlo cuando llegue, para disfrutarlo al máximo!
Un último consejo: para avivar o hacer que haya una energía más armoniosa con la pareja, imaginar que ambos están cubiertos por un rayo de luz rosa (el rayo del amor), como si estuvieran dentro de una burbuja.
Se puede visualizar esa luz saliendo del corazón y se dirige al corazón de la otra persona. Luego de ello, la luz se expande y rodea a ambos quedando como dentro de una burbuja.
El rayo rosa es el rayo del amor y su vibración trabaja en el cuerpo emocional de cada persona logrando una mejor actitud hacia la otra y hacia la relación.
Esto, obviamente, si forma parte del Plan que Dios tiene para ésta, ya que no se puede violar ni el libre albedrío ni la voluntad Divina.
El Arcángel Chamuel (o Samuel) es el Arcángel del Amor y junto a su grupo de ángeles está siempre atento a ayudarnos en nuestras relaciones de pareja comenzando por sembrar sentimientos de amor, compasión, respeto, tolerancia y perdón en nuestro corazón.
Nos apoya en el proceso de eliminar resentimientos, falta de perdón o rencores que podamos sentir y no nos permiten vivir a plenitud nuestra relación.
En cuanto a la relación como tal, Chamuel envía sus rayos de amor para revivirla si está apagada e interviene cuando hay un malo entendido o un disgusto para que los ánimos se calmen entre las dos personas y haya una buena comunicación.
Y para quienes aún no tienen pareja o quieren conocer nuevos amigos, Chamuel es experto en propiciar nuevos encuentros!
Ana Mercedes Rueda