Tu vida y quien eres no trata de tonterías tales como el temor, la violencia o estar herido. No necesitas nada de eso en tu agenda.
Cuando comprendas quien eres en verdad, vas a descubrir un cuidado que trasciende cualquier cosa que le suceda a tu cuerpo. Vas a entender que los asuntos del Espíritu son más importantes que los del mundo. Lo que verdaderamente importa es quién eres por toda la eternidad cuando dejas este mundo. Tu Alma trasciende cualquier cosa física, lo cual quiere decir que está destinada a liberarse del mundo físico y cualquier cosa de naturaleza negativa.
El siguiente gran paso es que tu amor se haga presente, para que reconozcas que Jesús eres tú.
Trabajamos con La Luz de Dios en un proceso de amor viviente. Si segues cualquier camino y no encuentras el amor de Dios en ese camino, entonces déjalo y busca otro que lleve el amor. Debe haber amor de Dios y amor por Dios. Debe haber amor por la conciencia de Luz que viene a través de toda la gente, ya que eso es Dios.
La vida es toma de conciencia. La vida es amor.
John Morton y John-Roger