Cuando uno comienza a practicar desdoblamiento o viaje astral y ya siente los diversos síntomas que lo caracterizan, de pronto puede ser que en algunas oportunidades se oigan voces, murmullos, gritos, etc. Esto no es un problema si uno sabe que es lo que está pasando porque esas voces que vienen del astral, son las manifestaciones de las diversas entidades que existen allí.
Muchas veces estas voces son amables y bien entonadas, otras son agresivas e intimidantes, como fuere, es importante saber que los que generan esas voces, son en primer lugar, todos nuestros agregados psicológicos, nuestros defectos, pecados le llama la cristiandad. Estos valores positivos y negativos, en el astral son independientes y tienen cuerpo energético, entran y salen de nosotros y se manifiestan cuando quieren. En el mundo tridimensional usan nuestro cuerpo físico para hacer sus fechorías.
Cuando estamos en ese momento previo al desdoblamiento o viaje astral y ya estamos con los síntomas, debemos saber que estamos conscientes de nuestro cuerpo físico y de nuestro cuerpo astral, como esto es así podemos percibir además del mundo tridimensional el mundo astral. Por eso es que oímos esas voces, porque estamos conscientes. Lo que ocurre es que estamos percibiendo dos mundos al mismo tiempo.
Cuando ocurra esto lo mejor es mantener la serenidad y tranquilidad y no perder los papeles de ninguna manera. Muchas veces lo mejor es decir con energía y autoridad “¡CALLATE!” y las voces callarán. Si no se callan es que no tenemos autoridad ni energía y entonces esas entidades, entre otras cosas nos asustaran.
El camino del despertar en el astral esta lleno de trampas y barreras. Lo importante de todo esto es saber que las trampas las ponemos nosotros mismos y las barreras también. Hacemos esto porque hay una parte nuestra, bien egóica que sabe que despertar es dejar el mundo y dejar de hacer lo que todo el mundo hace, esa parte es la que nos tiende trampas y nos pone obstáculos en el desdoblamiento. Esa parte es la que genera esas voces muchas veces para amedrentarnos y desanimarnos de practicar desdoblamiento o viaje astral; cuando no pueden amedrentarnos, entonces se vuelven amigos y supuestamente nos ayudan en el astral y nos muestran mundos alucinantes que no son reales. El practicante debe darse cuenta de todo esto para no ser engatusado y perder el tiempo.
Si uno logra estar sereno cuando oye las voces y luego logra salir de su cuerpo, encontrará allí a los propietarios de esas voces. Se verán como humanos, con diferentes rostros o tendrán formas mostruosas, ellos son nuestros defectos o valores positivos y negativos. Si uno lo desea puede hablar con ellos. No hay que temerles porque son parte de nuestra psicología y aunque se pongan ofensivos, agresivos, etc., simplemente hay que ordenarles que dejen de actuar así. Si no hacen caso y se abalanzan sobre uno habrá que luchar y cuando se lucha lo mejor es acabar con la entidad.
Otras voces vienen propiamente de entidades que no son parte de nuestra psicología, muchas no les intereza para nada que despertemos en el astral porque nos usan de diferentes maneras y si uno despierta ya no podrán hacerlo. Lo mismo va para con estas entidades, si uno es fuerte y tiene autoridad y energía, ellas sencillamente no pueden hacer nada. Si mostramos alguna debilidad ellas nos atacarán o usaran esas debilidades a su favor.
Sea cual fuere las voces que oigamos en el momento de estar desdoblándonos, no hay que hacerles caso, hay que seguir con la practica y salir al astral. Una vez que uno ha abandonado el cuerpo físico, entonces puede saber de què se trata.
Lo cierto es que estar consciente en el astral es una tarea bien complicada que exige mucha disciplina y energía y si no tenemos la disciplina y energía necesarias, por más que nos desdoblemos, estaremos conscientes a medias, y en ese estado, seremos fácilmente engañados o sometidos por las entidades de ese mundo.
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por gerundio Hoy a las 16:47
