Si uno nunca se vaciara,
no tendría espacio para lo nuevo.
Sin duda, evolucionar constituye
una infidelidad al pasado,
a las antiguas opiniones de uno mismo.
Cada día deberíamos cometer una pequeña traición
hacia nuestras opiniones tan firmemente establecidas.
Se trataría de un acto optimista, esperanzador,
que garantizaría la fe en el futuro,
una afirmación de que las cosas pueden ser
no sólo diferentes, sino mejores.
Hanif Kureishi