Si te sientes despechado o despechada porque tu pareja te abandonó o no quiso estar más contigo. A pesar de que tu amor seguía vivo y ahora sufres porque te hace falta. Existe una mezcla de emociones, en donde coexisten la tristeza de la separación con el cariño que existía, la ira del abandono con el fuego de la pasión que existía entre los dos. Es el momento de tomar la decisión de superar la separación matrimonial a pesar de que se amaba y aún existe el sentimiento.
Las emociones no se borran sino que se reemplazan. No debes intentar que el amor desaparezca sino proponerte reemplazarlo por otro más fuerte. Aunque no lo creas, siempre existen mejores alternativas a las que tienes, y mejores personas allá afuera esperando por encontrarte.
Las personas no son indispensables así como no lo es nada en la vida. No te aferres a los recuerdos ni te acostumbres a lo hermoso que era. Es el momento de salir a disfrutar de las oportunidades que por montones te puede ofrecer la vida.
Haz una lista de los amigos y de todos tus conocidos. Aquellas bellas personas que por la relación dejaste de frecuentar y te alejaste. Es el momento de volver a llamarlos e invitarlos a salir, para entretenerte y salir de la desilusión que te agobia por la separación.
Es necesario pensar en cambiar de lugar, de vivienda y de los espacios que te recuerdan a tu ex-pareja. Porque existen lugares, momentos, restaurantes, parques, actividades que te fueron familiares y que no es conveniente aferrarse a ellas. La costumbre es el peor consejero para superar la separación matrimonial.
Has una lista de las actividades que te apasionan y te gustaría hacer, pero que en la relación de pareja no realizadas. Es el momento de aprovechar la situación de la separación para disfrutar todo aquello que te gusta pero dejaste de lado. A veces por sacrificio o porque tu pareja no te servía de cómplice.
Es cierto que al amar se gana mucho pero a la vez se pierden cosas. Por ello, la separación tiene dos caras de la misma moneda, la triste y la amable, la desilusión y la oportunidad. En tus manos se encuentra la llave de abrir lo positivo y ver el lado optimista del cambio.
Para poder superar una separación matrimonial cuando se ama, el camino es no mentirse con falsas esperanzas de que se puede regresar al pasado. Lo correcto es reconocer que por bueno que fuera, se hace necesario modificar el rumbo, las costumbres y los hábitos. Salirte de tu zona de confort y arriesgar para que encuentres de nuevo la felicidad.
Todo en la vida se puede superar, inclusive la separación matrimonial, si te convences y decides que ese es el camino. Las falsas esperanzas y los recuerdos te atan al pasado, y se hace necesario aferrarse al futuro, a la fe y la esperanza.
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