Aunque hoy en día las jóvenes inician sus actividades sexuales a muy temprana edad, esa experiencia esta cargada de curiosidad, temores, por el simple hecho de no saber si se está en la edad apropiada para dar ese paso. Muchas jóvenes de generaciones anteriores vivieron estados de culpa que las hizo sufrir mucho por haber tenido relaciones con un hombre para luego enterarse que el cuento que les habían contado no era precisamente cierto. También debo decir que muchas otras jóvenes se “aventaron” a vivir su sexualidad sin ningún tipo de restricción, ahí están las hippies, las primeras feministas, esas que con tanta crueldad e ingratitud son severamente criticadas por las propias mujeres. Como eran momentos de experimentación y de marcar los espacios de libertad, se cometieron excesos y actualmente ambas experiencias tal vez nos sirvan para decidir por dónde, en qué momento y con quién. Pero ese es un trabajo individual.
La mayoría de las mamás y papás aseguran (aunque yo creo que sin mucho conocimiento de causa) que lo ideal para tener una relación sexual es cuando se está preparada física y mentalmente para ello. ¡Uppsss! ¿cuándo es eso? ¿quién lo determina? ¿dónde se aplica el examen?
Por otro lado, millones de mujeres niñas en todo el mundo engrosan las cifras de madres jóvenes que se embarazaron durante su primera relación sexual. O sea, ni siquiera tuvieron tiempo de explorar su sexualidad, su cuerpo, su erotismo, al novio, su relación, responder a sus preguntas y saber qué estaba sintiendo, cuando se encontraron con un tremendo problema en casa que les implicaría dejar la escuela, estar permanentemente regañadas, sentir culpa por haber defraudado a sus papás, sentir pena con sus amigos y amigas, y la no menor encomienda de criar a un ser humano.
O sea que esto de las relaciones sexuales es una compleja decisión donde deben tomarse en cuenta aspectos para los cuales no se está preparada en la pubertad o adolescencia. O en los cuales ni siquiera se piensa en ello. Entonces, ¿cómo pedir una valoración tan compleja? ¡Si los propios adultos se equivocan! Y pese a ello, son ellos quienes se erigen como los jueces implacables. Por eso para los papás a veces es más fácil decir: “mejor no le entres” y en lugar de valorar todos juntos la situación, prohiben o generan miedos y culpas en torno a la sexualidad.
Pero, ¿cómo prohibir si lo que se sienten son fuertes impulsos por tocar y ser tocada? Pero lo más probable es que puedas saber si estás lista, cuando al menos te pongas a reflexionar (no a filosofar) sobre tus habilidades sexuales básicas. ¿Qué edad debería tener una chica o mujer antes de comenzar a explorar el sexo? Las costumbres sociales de la familia, de la comunidad, y de la sociedad de cada chica determinan probablemente cuándo se le permite volverse sexualmente activa. Cuanto más joven comienza la pubertad una chica, más joven sea probablemente cuando se vuelve activa sexualmente. Esto es porque sus caracteres sexuales secundarios, como los senos, atraen la atención de chicos más grandes, y quizá porque no puede ignorar indefinidamente su impulso sexual que se desarrolla. A menudo ella es menos renuente a tener sexo que las chicas más grandes. Lo cierto es que en general, cuanto más tiempo espera una chica joven a explorar el sexo de pareja, mejor. La razón por la que las mujeres jóvenes deben posponer el sexo en pareja es porque nuestra sociedad no las prepara correctamente para ello, no porque sea natural o correcto esperar.
Las mujeres que se han vuelto activas sexualmente a una edad temprana usualmente desean haber esperado más tiempo para hacerlo, incluso si tienen sentimientos positivos hacia estas experiencias tempranas. La mayoría de estas mujeres miran hacia atrás y se dan cuenta de que no estaban preparadas para volverse sexualmente activas cuando lo hicieron. Usualmente no desarrollaron completamente sus habilidades sexuales básicas sino hasta cinco, diez, o incluso veinte años después que comenzaron a involucrarse en el coito.
Hay situaciones en las que definitivamente las chicas no deben volverse activas sexualmente. No hay razones por las que una mujer joven sienta que “tiene que” involucrarse en el sexo. Si ella siente de esta manera, hay algo terriblemente equivocado en esta situación. Si alguien te dice que “debes” o que “tienes que,” entonces “no deberías.” No existe ninguna razón absolutamente para que tengas que tener sexo, punto. Debes tener sexo solamente porque quieres, porque deseas explorarlo, y porque quieres dar Y recibir placer sexual. No lo hagas por amor, porque todos lo están haciendo, o porque es “adulto.” Si no sientes que puedes retirarte de una situación sin tener sexo, entonces debes alejarte corriendo de ella.
El amor es la última razón para tener sexo. Si tu pareja te ama realmente, no te pedirá que te vuelvas activa sexualmente antes de estar preparada. Si no te sientes completamente cómoda con la situación, no es correcta y necesitas salirte de ella. Las chicas que enfrentan esta situación necesitan a alguien para apoyo emocional. En ausencia de esta persona, más que probablemente comenzará a tener sexo, incluso si ella sabe que no debe. Los padres y cuidadores primarios son esenciales en la vida de una mujer joven. Sin embargo el debate está abierto y tu opinión no puede quedar fuera de este espacio.
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