Este es un tema que por décadas fue un tabú, era mal visto e inclusive hasta mencionarlo causaba escozor a muchas personas, aunque muchas de ellas, desconocían a ciencia cierta el significado. Pero hoy en día la visión de la sociedad ha cambiado y ya se pude hablar libremente de las preferencias sexuales de cada individuo, por eso, y por si existiera alguna duda sobre qué son la homosexualidad y la bisexualidad, y cuáles son las diferencias entre ellos, en esta ocasión aclararemos los significados.
Podemos definir a la persona homosexual como alguien que se siente atraído física y emocionalmente por otra persona de su mismo sexo, y en cambio la persona bisexual es aquella que siente atracción por diferentes personas, sin importar su género.
Si hacemos hincapié en la cuestión de la atracción es porque muchas personas que ejercen una sexualidad heterosexual pueden ser homo o bisexuales por diversos motivos que les impiden ser fieles a sus sentimientos. También existen personas heterosexuales que por distintas razones, entre ellas el dinero, mantienen relaciones homo o bisexuales, sin estar verdaderamente atraídos por ellas.
Existen múltiples y muy variadas maneras de sentir y vivir la sexualidad, y la importancia de ésta, reside en el centro íntimo de cada individuo y es esencial para su realización y felicidad.
Por otro lado, debemos entender que la orientación sexual es una atracción emocional, romántica, sexual o afectiva vertida hacia otros. Se distingue fácilmente de otros componentes de la sexualidad que incluyen sexo biológico, identidad sexual (el sentido psicológico de ser hombre o mujer) y el rol social del sexo (respeto de las normas culturales de conducta femenina y masculina).
Y dentro de ese contexto, podemos encontrar a personas con una orientación homosexual es decir, a los que se las denomina a veces gay (término acuñado en la década de los ochentas) y lo mismo pueden ser hombres como mujeres, a quienes particularmente también se les conoce como lesbianas.
Por otro lado existen las personas bisexuales, que lo mismo pueden experimentar una atracción sexual, emocional y afectiva hacia otras personas de su mismo sexo, pero también del sexo opuesto.
Es importante también, aclarar que la orientación sexual es diferente de la conducta sexual porque la primera se refiere a los sentimientos y al concepto de uno mismo, en cambio la segunda (conducta sexual) se refiere a los actos físicos y costumbres al practicar el sexo.
Existen muchas teorías acerca de los orígenes de la orientación sexual de una persona.
La mayoría de los estudiosos de conductas humanas, concuerdan en señalar que la orientación sexual es el resultado de una interacción compleja de factores biológicos, cognitivos y del entorno. En la mayoría de las personas, ésta se moldea a edad temprana. Además, hay pruebas importantes recientes que sugieren que la biología, incluidos los factores hormonales genéticos o innatos, desempeñan un papel importante en la sexualidad de una persona.
Es importante reconocer que existen probablemente muchos motivos para la orientación sexual de una persona y los motivos pueden ser diferentes para las distintas personas.
El ser humano no puede elegir ser gay o heterosexual. Para la mayoría de las personas, la orientación sexual surge a principios de la adolescencia sin ninguna experiencia sexual previa. Si bien podemos elegir actuar de acuerdo con nuestros sentimientos, los psicólogos consideran que la orientación sexual no es una elección consciente que pueda cambiarse voluntariamente.
Profesionales de la salud mental afirman que la homosexualidad no es una enfermedad, ni un trastorno mental o problema emocional. Más de 35 años de investigación científica han demostrado que ésta, en sí misma, no se asocia con trastornos mentales ni problemas emocionales o sociales. Y no una enfermedad mental como antiguamente se creía... Nada más alejado de la realidad!
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por gerundio Hoy a las 13:00
