¿Cuáles Son Las Cadenas Que Te Atan?OK, hoy quiero escribir un poco diferente.
Más bien quiero hablarte. Esto prácticamente sería como la transcripción de una conversación entre tú y yo ¿Vale?
Perfecto, si me acompañas unos minutos, me gustaría hablarte un poco de tu éxito, de tus deseos por salir adelante, triunfar en la vida y alcanzar la plenitud que mereces.
Te considero mi amigo/a, y estoy totalmente seguro de que mereces todo aquello que deseas. Sin embargo ¿Por qué parece que tardan tanto tus sueños? ¿Hay algo que te esté deteniendo ahora mismo?
Mira, un problema que yo tenía personalmente, era el de creer que no podía ser feliz en todo. Que no había felicidad completa… Esa fue una mentira que me creí desde muy pequeño, y como sabrás, no fue muy productiva que digamos.
Pero hay otra peor, y es cuando la gente nos dice: “No se puede ser bueno en todo”. Está bien, no podremos ser astrónomos, físicos, matemáticos, pintores… etc., al mismo tiempo (a pesar de que unos cuantos personajes en la historia de hecho lo fueron).
Pero lo que sí podemos lograr tú y yo, es el éxito en todo lo que nos propongamos.
Te voy a contar un secreto. Hace algunos años yo me consideraba condenado al fracaso en el amor. Y ¿Sabes qué? tenía todas las evidencias para creer cada vez más en ello.
Aparte de eso, quería dinero, y quería suficiente como para ni siquiera pensar en él. Quería ir a cualquier lugar de la ciudad y pedir cualquier cosa (en un restaurante, por ejemplo) sin mirar la parte derecha de la carta.
También quería ser muy bueno en un deporte, tener un hobbie, aprender más sobre computación y diseño de páginas web (mi pasión) y ser más atractivo.
Quería tener un mejor cuerpo y también ser más sociable. Viajar alrededor del mundo, tener muchos dispositivos tecnológicos y mucha, pero mucha autoestima.
En definitiva lo quería todo. Pero ¿Sabes cuál es el problema? El problema NO es querer tantas cosas. Ni siquiera es la falta de enfoque que puede generar frustración. Ni la falta de claridad en ciertos aspectos.
El verdadero problema es que yo no creía que todo eso fuera posible de lograrse… ¡Al tiempo!
Entonces empecé a enfocarme en una sola cosa. Empecé por mis estudios, y claro, al poco tiempo de no estar preocupado por mi cuerpo, empecé a engordar.
Luego, empecé a hacer ejercicio y aprendía cada vez más sobre los sistemas. Pero de vez en cuando me daban depresiones y un día estuve al borde del suicidio (quien lo creyera…).
Empecé a trabajar duro entonces, en mi actitud, mis pensamientos y mi carácter. Conocí el documental EL SECRETO y cambié mi diálogo interno, entre otras cosas.
Ahora, el problema es que no tenía ni un centavo. Así que decidí crear una empresa, y tuve todo tipo de dificultades (eso si, fue emocionante). Y en general, parecía que siempre faltaba algo.
Esto no hacía más que recordarme aquél viejo adagio sobre la felicidad incompleta… Pero dentro de mí yo sabía que tenía que haber un modo mejor de vivir.
No te imaginas la cantidad de gente que me decía: “Tú no sabes nada de la vida, madura…” cuando yo les decía que tenía que haber mejores caminos y mayor felicidad y plenitud.
Afortunadamente, yo sabía que había gente exitosa, y quienes me decían eso, por lo regular eran literalmente fracasados comunes.
Yo he tenido bastantes dificultades, como tú. No fue fácil en principio adecuarme al éxito, y por eso fue que empecé a estudiarlo fuertemente.
Un día me di cuenta de que si bien no es posible lograr resultados inmediatos, sí es posible ser exitoso en TODO.
Ser absolutamente exitoso en Todo lo que te propongas no es más una utopía o una vida ideal, yo lo empecé a vivir y lo sigo viviendo.
Mi hobbie por un tiempo fue tocar la batería. Curiosamente tenía tan implantada en mí la música, que la primera vez que me propuse practicar, un amigo que estaba realizando un curso (si, estudiando cómo tocar la batería) me pidió que le diera algunos consejos.
¡Era mi primera vez!
Y no me pasó sólo con eso, me pasó con muchas cosas. En matemáticas me volví muy bueno, a pesar de que en el colegio las odiaba. En el gimnasio podía resistir 2 horas de ejercicio cardiovascular (para algunos quizás sea poco, pero para mí era toda una hazaña). Y pronto estaba ganando más dinero (mientras estudiaba) que mis amigos ingenieros ya graduados.
Y como sabes, no te cuento todo esto para mofarme de mi éxito… Eres mi amigo, y uno no hace eso con los amigos. Te lo cuento porque sé que puede motivarte.
Te lo cuento, porque quizás por el momento tengas dudas sobre ti mismo, y porque quizás creas en ese viejo (y destructivo) dicho, de que no se puede ser exitoso en todo…
… quiero que sepas que hubo momentos tan difíciles en mi vida, que hasta me quedaba sin comida durante una o dos semanas… Sobreviviendo sólo con agua.
Cuando yo te digo que tengo algo para enseñarte sobre el éxito, es porque realmente aprendí a ser exitoso desde bien abajo. Vivo en Colombia y como te imaginarás, la situación general aquí no es la mejor.
La población colombiana en general es muy negativista. Todo lo ven por el lado malo, esperan siempre lo peor de las personas y hay deshonestidad por doquier.
Pero afortunadamente habemos personas que queremos cambiar esto. No te conozco personalmente, no sé dónde estás o quien eres, no sé si seas colombiano o no, pero quiero que sepas que me siento orgulloso de ti.
Estás aquí, ahora, leyendo esto, demostrándome tu deseo más noble por crecer, por mejorar, por unirte a este grupo de personas que tratamos de marcar la diferencia. Vamos lento, pero seguro. Paso a paso, sin orgullos, sin resentimientos. Dejando atrás los malos recuerdos y las buenas experiencias que adquirimos con cada tropiezo y caída.
Quizás estés en una situación mejor que la mía, quizás no. Pero hay algo seguro, y es que tanto tú como yo, podemos mejorar, crecer, pasar al siguiente nivel, evolucionar mentalmente.
Y te lo digo en serio, lo he vivido en carne propia y he visto a muchos de los que me han escuchado, vivirlo también.
Muchas personas me envían correos y comentarios con sus increíbles testimonios. No estoy seguro de que todos sean ciertos, pero algo me dice que estamos marcando la diferencia, y tampoco quiero hacerme de héroe, porque la información que te envío en su gran mayoría ya existía antes de que yo naciera.
No hay nada inventado aquí, nada nuevo y brillante, sólo técnicas, tácticas, estrategias y principios antiguos, probados y que funcionan.
Los derroteros del éxito los tenemos una vez que empezamos nuestra travesía hacia la plenitud total.
Pero ¿Sabes qué detiene a muchos? El miedo. El temor a no poder lograrlo. El temor a defraudar a sus seres queridos. A sus hijos, padres o amigos.
Yo temía no poderle ayudar a mi abuela con los gastos de la casa, no terminar la universidad y no obtener buenas notas. Tenía muchos temores, y dichos temores no se esfumaron de inmediato.
Trabajé bastante en mejorar mi autoconfianza, pues igualmente que la oscuridad (que no es más que ausencia de luz) el miedo es ausencia de seguridad en sí mismo.
Y hoy todavía tengo temores, y todavía me equivoco (¡mucho!
) pero no dejo que eso me detenga.
Y no quiero que eso te detenga a ti tampoco.
Sé que no soy la mejor persona del mundo, pero busco cada día superarme a mí mismo. Compito contra el Juan Sebastián de ayer, supero mis propios récords y me tomo como base para alcanzar mayores alturas.
Y tú también puedes hacerlo. Puedes empezar por decidir qué es lo que realmente quieres en esta vida (independientemente de si son muchas cosas).
Puedes proseguir estableciendo estrategias para lograrlas, y saber y confiar en el hecho de que puedes triunfar en todo, y que lograrás el éxito sin importar las dificultades y los obstáculos.
Cualquiera que sea la barrera que te esté impidiendo avanzar, podrá ser eliminada y apartada de tu camino.
Los obstáculos están allí para hacerte más fuerte y darte lecciones, no los veas como algo negativo, acostúmbrate a aprender de ellos y a superarlos.
Con el tiempo te volverás mucho más habilidoso en ello, y será muy divertido emprender nuevos proyectos. Aparte de eso, si tienes en cuenta el tema financiero, en algunos meses podrás tener más tranquilidad al contar con una buena base financiera.
No olvides ni descuides cada aspecto de tu vida. No creas que por mejorar uno debes descuidar el otro. El amor es tan importante como el dinero y la salud. De igual manera es importante que te cuides, que tengas autoestima y un buen autoconcepto.
Ninguna de estas cosas son negativas si las pones en buen uso.
Y finalmente, quiero recordarte algo que a muchos se les olvida (pero sé que a partir de hoy, a ti no): Eres responsable de todo lo que pasa en tu vida.
Sí, ya sé que lo dije antes, pero vale repetirlo: TODO en tu vida, es tu responsabilidad.
Si te caes, es tu responsabilidad. Si te roban, es tu responsabilidad. Si pierdes, es tu responsabilidad.
Una enfermedad es creada desde tu mente subconsciente, y se genera a raíz de los pensamientos negativos (esto último está demostrado científicamente!!!).
No culpes a nadie, y hazte responsable de todo. Tus fracasos, por más culpa de otros que parezcan, son tu culpa. Y mientras más aceptes esa responsabilidad y busques aprender para no cometer futuros errores, mejor será tu vida.
Estarás más tranquilo y más feliz al saber que llevas las riendas.
Pues como yo, sé que tienes un deseo ardiente por crecer y mejorar. Acompáñame en este camino, vamos de la mano, sé que nos podemos ayudar y aunque estamos quizás a miles de kilómetros de distancia el uno del otro, el apoyo y los buenos deseos trascienden fronteras.
Fuente:
http://www.sebascelis.com/cuales-son-las-cadenas-que-te-atan/