Por lo general vivimos más en nuestra cabeza que en nuestra propia realidad. Nos perdemos constantemente del vivir. No estamos despiertos. Esta es una invitación para que vivas tu vida conscientemente y le saques provecho a tu día a día.
Las demandas de nuestra sociedad actual nos piden correr. Es como si el tiempo no alcanzara lo suficiente para cumplir con nuestras labores diarias y lograr las metas que nos hemos propuesto. Corremos, nos agotamos, nos cansamos y luego, al final de la vida nos preguntaremos cuándo vivimos realmente? Debemos aprender a fluir.
Es importante poner un alto en el camino. Comenzar a vivir tu día a día totalmente y a sacarle sentido al por qué estás aquí. Es hora de bajarse de la rueda de hámster donde corres interminablemente sin ir a ningún lugar. Bájate ahora mismo y comienza a vivir aquí, pues en realidad es lo único que tienes: tu momento presente.
Intensifica tus momentos estando 100% en tu momento presente.
Escucha atentamente cuando alguien te esté hablando, préstales el 100% de tu atención. Escucha con tus oídos y con tu cuerpo, regala tu presencia y tu atención a todo lo que ocurre a tu alrededor. Siente el sonido de la música, las voces, los pájaros, el viento y porque no, también escucha el silencio.
Observa toda la magia que se despliega ante tus ojos cuando observas realmente. Cuando fué la ultima vez que viste a alguien a los ojos? Cuando fué la ultima vez que observaste con atención los entornos por los que transitas cada día? Cuando fué la ultima vez que observaste las estrellas? Tus ojos te acompañan todo el tiempo y están allí para que observes, en las grandes y pequeñas cosas las maravillas de la creación.
Respira profundamente. Sabías que tu respiración siempre te indica como estás en un momento determinado? Si te sientes mal, angustiado, alegre, cansado, excitado, tu respiración siempre te dirá como estás! Toma tiempo para que el oxigeno entre de manera tranquila y profunda en tu organismo. Pausa durante el día y respira. Igualmente, siente el aroma de los perfumes, de las flores, de la naturaleza, de una buena comida! Estás viviendo!
Degusta tus alimentos con la mayor plenitud, agradecimiento y apreciación posible. Utiliza tu boca como una puerta por la cual solamente entran y salen cosas buenas, buenos alimentos, buenas palabras y miles de sonrisas!
Toca y siente todo aquello que entra en contacto contigo: las personas, los abrazos, las caricias de tus seres amados. Siente el viento, el agua cuando te duchas cada mañana, siente tu cama cuando tu cuerpo descansa en las noches. Observa cada acción, cada movimiento, tus pasos al caminar siéntete que estás viviendo aquí y ahora.
“Si sales de tu cabeza y te anclas en tus sentidos podrás finalmente experimentar que te encuentras vivo”
https://dianafernandezcoaching.wordpress.com/2014/04/12/intensifica-tus-momentos/#more-265