'Sexo en Nueva York' nos enseñó que no hay que llamarlas hasta el juevesEl titular que corona no es más que un residuo conversacional que en una ocasión escuché, y es por ello que no conozco al dedillo el razonamiento que Carrie Bradshaw hizo al respecto; porque, aunque 'Sexo en Nueva York' fuera de HBO (canal de calidad supermachote en ocasiones), no estoy programado genéticamente para mantener la atención durante más de 10 segundos sobre ninguno de sus capítulos. Un poco como lo que me pasa con 'Girls'. Pero eso no quita para que pueda establecer una teoría válida al respecto desde el punto de vista masculino, que, como otros himnos precedentes, se convierta en guía de conducta válida para vosotros, jóvenes compañeros.
El jueves es el epicentro de la semana. Pero es que está muy lejos del lunes y muy cerca del viernes, que es mañana ya, haríais muy bien en argumentar. Sí, pero es que la distancia que hay del jueves al viernes se puede hacer eterna esperando ese wasap que os desbarate y/o reorganice la agenda del fin de semana. Así, que, silencio: es el epicentro.
La razón es que a esa chica prometedora de pelo azabachado dispuesto en casacada, dientes blancos y grandes, sonrisa franca, ropa casual pero elegante, y, si me apuráis, piercing en zona indeterminada entre labio, lengua aleta nasal o zona superior de la oreja izquierda, la conocisteis el viernes o el sábado pasados, arrancándole al final de la velada -entre carcajadas- su número de teléfono o su tuiter, que no es lo mismo, pero es igual.
No os preecipitéis con el wasap. Requiere un esfuerzo intelectual para el que seguramente no estéis preparados ”
A partir de ahí quedan múltiples opciones a la hora de establecer contacto con ella, pero antes de que la cosa se enfríe y tu currículum se convierta en una especie de bruma amorfa entre todos los nombres y números de teléfono con los que la chica del piercing trafica (porque es realmente deseable y los candidatos son manada), tienes que establecer contacto con ella. Lo dice la Biblia.
A modo de calendario semanal con pros y cons, pasamos a relatar la crónica de tu victoria de la semana que viene, que será quedar con ella sin interferencias del tipo, amigos, amigas, discoteca, ruido y descontrol. Solos tú, ella y ese café o copa poco cargada que esperemos no cristalicen en ese café o copa poco cargada de más que te arrinconen de una vez y para siempre tras la triste verja de la friendzone.
DOMINGO
Eres un valiente, eso no se te puede negar. No has esperado ni 48 horas para pegar un puñetazo en la mesa, pero tu gesto, lejos de parecer galante puede ser calificado de amateur. Dependiendo de tu edad podemos ser condescendientes con ello, pero un número suficiente de derrotas antes de los 30 te mostrarán con meridiana claridad que normalmente ellas ya tienen planes de brunch o de misa o de cine o de licor café after meal con sus amigas gallegas, y todavía no saben qué impresión les causaste exactamente como para pronosticar si vas a devenir en poso duradero. No has dado tiempo para que te eche de menos ni para que idealice el enigma que debes suponer para ella. Déjale ese día de reflexión. Además (y este es el escenario más horrible imaginable), puede llegar a pensar que ese acercamiento implica un deseo de veros inmediatamente, con su correspondiente sospecha de que la alternativa sea quedarte en casa viendo telefilmes. Cambiarla por tan poco es casi insultante. En serio, contente, vaquero.
LUNES
Es lunes y el fin de semana ya es un bonito recuerdo en la retina de los dos. Mientras haces esos informes para Fernández, al cual te planteas ahogar en un futuro cercano, te sirven de analgesia fogonazos de sus rápidas respuestas (de las de ella, no de las de Fernández) y brillos deslumbrantes de sus preciosos ojos de color indeterminado (estaba oscuro). Podrías abordarla vía telemática con un ¿Qué tal pasaste el domingo, guapísima? a la hora del café, pero ni eres Carlos Lozano (nadie más tiene esos hoyuelos) ni quieres serlo. Así que sigue reservándote tántricamente.
MARTES
El martes es complicado de lidiar porque ya ha pasado tiempo suficiente para haberte multiplicado en su cabeza como una metástasis del amor, pero aún es pronto para vislumbrar el próximo fin de semana, por lo que un primer acercamiento vía wasap podría eternizarse con interminables y ambiguas charlas que no sabes si van a llegar a buen puerto. De hecho, toda la química que parecíais destilar en aquella baldosa de bar puede desintegrarse como una pompa de jabón caso de que ella no sea lo suficientemente audaz para ti en la comunicación escrita, o padezca emoticonitis, o sea una absoluta garrula ortográfica. Y a ti te gustó por su físico y la promesa de un bonito futuro en común. No querrás ser tan frívolo como caer en el desánimo porque no es capaz de mantener la tensión intelectual. O peor, muchacho: lo más seguro es que seas tú el que no esté a la altura, así que nada, guarda la ropa y espera una miajita más como el salvaje ejército de William Wallace.
MIÉRCOLES
Hay opiniones encontradas con respecto al miércoles, porque algunos ya hablan sin complejos del “miernes”, pero son hipsters y os caen mal. Por lo tanto el fin de semana, pese a esta interferencia trendy sigue estando tan lejos como al principio del artículo y no resulta censurable ser un poco tradicionales en cuanto a querer quedar el sábado. Ánimo con lo de aguantar la respiración. Ya sólo queda un poco.
JUEVES
Hemos llegado. Aquí las razones de que el jueves sea el día adecuado:
1. Habéis sido disciplinados cortándoos todo este tiempo porque ella sabe que podríais haber flaqueado y valora vuestro autocontrol jedi.
2. También es apreciable que tengáis una vida laboral y social lo suficientemente rica como para no tener que obsesionaros con esa estrella fugaz que seguramente siga siendo fugaz pese a todo.
3. Si le interesáis de verdad, quizá no el viernes, porque ella también tiene vida social envidiable y planeó un concierto con sus amigas (más feas que ella, porque las guapas se juntan a veces con feas para destacar. Es así, no me lo he inventado yo, no puedo hacer nada al respecto y además me da igual) hace tres semanas; pero, hey, de haber revoloteado en su cabeza durante este tiempo como ella lo ha hecho en la vuestra, puede que aún cuente cintura como para haceros un hueco en su sábado, y a partir de ahí, en su corazón.
Es sin duda vuestra mejor opción. Coged ahora el móvil y esperad que no os timara con alguna cifra (o que vosotros no estuvierais demasiado borrachos cuando os peleasteis con la pantalla táctil al anotar su número).
BONUS TRACKS
LUNES DE ENTUSIASMO
Si vuestro corazón es puro y ella parecía superbuena persona, además de torpe con las estrategias, quizá valore esa eyaculación precoz conductual. Dependiendo de que no sea una Marla Singer de la vida, es posible que hasta diga a sus amigas entre risitas: “Mirad que mensaje más mono me manda aquel chico tan mono del otro día”. No es que le vaya la zoofilia, es que algunas chicas de buena familia hablan así, monamente, y os convienen porque son de las que dan la mano por la calle y se esfuerzan por quereros. El que ella sea proclive al flirteo a campo abierto a partir de ese momento no debe desanimaros, que os conocemos y sólo os gustan las que lo ponen really hard. Un poco de coherencia, por favor.
VIERNES DE OPTIMISMO
Vas tan de sobrado que has desafiado la regla del jueves que 'Sexo en Nueva York' tardó seis años en asentar y a mí me ha llevado cuatro folios desmenuzar. Si vais a pasar de ella, no sé por qué habéis leído hasta el final, pero, hey de nuevo, enhorabuena... veo que tenéis los arrestos de conocerla un viernes y mostraros impasibles hasta el siguiente, llamarla a las 4 de la mañana cuando no habéis encontrado una sustituta y conseguir que os coja el teléfono. De ser así, venid a la redacción y os cedo el puesto de consejero sentimental.
Fuente:
http://www.revistagq.com/articulos/hay-que-llamarlas-en-jueves-sexo-en-nueva-york/18708