Sueña en Grande“Si lo puedes soñar, lo puedes lograr.”
La Navidad nos invita a soñar y a compartir, y con el mágico día de Reyes se cierra esta etapa de cambios y de reflexión, en la que hemos reconocido logros y aprendido de los errores para abrir una nueva página de nuestra historia en la que todo vuelve a ser posible. Sin embargo, saber lo que queremos no siempre es fácil. ¿Cuándo fue la última vez que escribiste la carta a los Reyes Magos? No subestimes el poder que tiene escribir tus deseos de tu puño y letra, es un ejercicio muy poderoso que te ayuda a definir tu futuro ideal y a fijarlo en tu subconsciente. Sin embargo, igual que de niño/a no pedías en tu carta “juguetes” sin más, sino que especificabas exactamente qué tipo de juego querías para que no hubiera lugar a dudas, no sirve desear simplemente dinero o felicidad, o “que este año que entra sea mejor que el que se va.” ¿En qué exactamente quieres mejorar?
Imagina cómo te gustaría que fuera tu vida en el futuro, en todos los aspectos y sin limitaciones. Esos sueños van a hacerte de guía como la estrella que te lleva a tu destino, y van a darte claridad y un motivo para avanzar. Después traslada esos sueños a metas a largo, corto y medio plazo. Hay deseos que te pueden parecer inalcanzables desde donde estás hoy, pero si abres otras posibilidades se ven nuevos horizontes. A veces las personas no somos capaces de visualizar nuestra vida más allá de unos meses. Es verdad que el futuro es incierto, sin embargo, si tenemos una dirección, nuestras decisiones nos llevarán hacia donde soñamos estar. Para ello funciona hacerse un collage con fotos que evoquen esos sueños y tenerlo en un lugar visible para ti.
Tras ello, haz el ejercicio de imaginar tu vida dentro de tres años, y luego piensa qué tendría que hacerse realidad exactamente durante este año que comienza para acercarte a ese futuro ideal que has diseñado, a esa visión que tienes de tu vida y sigue estos 3 pasos:
Primero escribe objetivos concretos anuales y conviértelos en objetivos trimestrales, detallados de forma clara, y medibles, tanto en cantidad como en temporalidad. Desglosa a la vez esos objetivos en otros objetivos de desempeño mensuales y en los hitos que has de ir alcanzando paulatinamente para acercarte a ellos.
Una vez que tienes esto es hora de diseñar un plan de acción estratégico, con las tareas y actividades claras que tienes que hacer para alcanzar tus metas.
Luego programa estas tareas en tu agenda y enfócate en ellas, actúa, no te acuestes un solo día sin haber dado un paso hacia tus sueños y sin tener claro qué vas a hacer al día siguiente que te acerque a ellos.
Cuando tienes claro qué hacer cada mes, cada semana y cada día, porque estás enfocado/a en tu propósito, no hay nada que pueda alejarte de tus sueños. Si estás pensando en emprender tu propio negocio o ya tienes una empresa es porque eres una persona soñadora y no te resignas a vivir una vida mediocre. Por eso es fundamental que tu visión profesional esté alineada con tu visión personal, no podemos separar lo uno de lo otro, y aunque a veces sea necesario poner prioridades y sacrificar parte de tu vida para conseguir ciertos resultados, no puedes olvidar lo qué es verdaderamente importante para ti y el motivo por el cual estás trabajando. Una visión poderosa está basada en unos valores sólidos, así que, identifica esos valores fundamentales en tu vida, aquello que quieres conseguir, más allá de cosas materiales.
Descubrir todo esto es una aventura de exploración interior, donde se cruzan límites para entrar en territorios a veces desconocidos y encontrar tesoros ocultos. Cuando atraviesas esos umbrales identificas tu misión y potencias tus talentos. Entonces hallas tu causa, como un héroe o heroína, y ya nada te para. Si eres uno de esos héroes el Taller de liderazgo Consciente “Despierta el Emprendedor en ti”, es para ti. Pídeme más información pinchando aquí.
Fuente:
http://www.coachemmagarcia.es/suena-en-grande/