Por qué falla una relación de pareja? Una de las razones puede ser que no se haya elegido bien al compañero o compañera.
Otra, que los componentes de la pareja evolucionen hacia intereses incompatibles.
Otra, que den por extinto ese nexo llamado “amor”.
Y, una más (que es de la que vamos a hablar), que se deteriore progresivamente la comunicación entre los miembros de la pareja.
Los psicólogos advierten que aquellas parejas en las que predominan las interacciones negativas (broncas, reproches y demás) son más propensas a separarse tras los primeros años de convivencia.
Así como que las parejas que se comunican muy poco y apenas comparten sus afectos, pueden correr la misma suerte, sólo que años más tarde.
¿Qué puede ayudar a mantener viva la relación?
Risas y juegos
Que no se pierdan esas ganas de jugar, de reír y de bromear con la pareja.
Además de que reina el buen ambiente, esto actúa de “pegamento” para la relación y, en muchas ocasiones, ayuda a resolver conflictos (o a que no se hagan más grandes).
Novedades compartidas
Probar nuevas actividades con la pareja es enriquecedor para ambos.
Los dos comparten experiencias, se sienten mejor en la relación, más cercanos a su compañero/a y más contentos con la vida en general, a la par que se alejan de uno de los principales enemigos de las relaciones: el aburrimiento.
Y no es difícil llevarlo a la práctica. Basta, por ejemplo, con practicar un hobby en pareja, conocer juntos un lugar nuevo o, quizás, un nuevo tipo de comida.
Gratitud
Tan importante como hacer cosas agradables para la pareja es saber agradecerlas. La simple palabra “gracias” hace un enorme bien a la convivencia.
Cuando ambos sienten apreciado lo que mutuamente se aportan, la relación se fortalece.
También es importante cultivar la gratitud, simplemente, por el hecho de estar al lado de la otra persona.
Quizás eso sea difícil cuando el compañero/a saque al otro de sus casillas. Pero, para estos casos, los psicólogos nos recomiendan un simple truquillo: imaginar cómo sería la vida sin esa persona o cómo nos sentiríamos si algo malo le ocurriese.
Lo segundo es un poco morboso, pero funciona. Y sirve para atenuar el enfado del momento.
Triunfos compartidos
La pareja no está sólo para apoyarse en los momentos más duros. También es importante compartir los logros (grandes o pequeños) de los dos miembros de la pareja.
Las parejas con esta saludable costumbre también experimentan una mayor satisfacción con su relación y tienen menos conflictos.
¡A celebrar cosas! Cualquier pequeña victoria es buena.
Las relaciones de pareja (y todas) suponen algo de trabajo. Aunque, muy agradable, en el caso de las 4 propuestas anteriores, ¿no te parece?
http://tusbuenosmomentos.com/2012/12/recomendaciones-relacion-pareja/