El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) provoca la destrucción progresiva del sistema inmunitario, las defensas del organismo se van debilitando poco a poco. El VIH se multiplica en las células infectadas y puede seguir multiplicándose e infectando nuevas células. El organismo puede permanecer en aparente equilibro durante años hasta que manifiesta síntomas. No tiene cura, pero sí tratamiento.
Para que se produzca contagio el virus VIH tiene que penetrar en el organismo. Se transmite por 3 vías:
Vía sexual con penetración sin preservativo (secreciones vaginales y semen). Casi la mitad de los contagios viene por esta vía, la mayoría en relaciones heterosexuales (30%) y también en homosexuales (16%).
Vía sanguínea (sangre e instrumentos en contacto directo con esta como agujas y jeringuillas). Cerca del 40% de los casos se contagian por esta vía.
Vía madre-hijo (leche materna de madre seropositiva).
¿Cómo prevenir el VIH?
Usar siempre preservativo en relaciones sexuales con penetración (vaginal, anal, oral). Hay muchos métodos anticonceptivos que te protegen del embarazo: anticonceptivos orales, la mini-píldora (sólo contiene progestina), el DIU, SIU (sistema intrauterino), diafragma, parche, anillo vaginal, ligadura de trompas o vasectomía... Sin embargo, el preservativo, masculino y femenino, es él único que impide el contagio de sida y otras enfermedades de transmisión sexual.
Ante la duda, hazte la prueba de VIH. Para evitar el contagio lo más seguro es mantener relaciones sexuales con preservativo con pareja estable no infectada por VIH o que no haya mantenido relaciones sexuales de riesgo con personas seropositivas. Pero muchas veces el pasado sexual de la pareja es incierto, además, el 30% de los portadores de VIH no sabe que lo son. Siempre que se hayan mantenido relaciones sexuales de riesgo sin preservativo conviene hacerse una prueba específica de VIH, es gratuita y anónima.
No compartas agujas, jerininguillas, cepillos de dientes ni cuchillas de afeitar. Si te haces un tatuaje o piercing asegúrate de que el material empleado sea estéril o de un sólo uso.
Los infectados con VIH deben extremar las precauciones para no propagar el virus. Informar de tu estado a la pareja sexual y usar siempre preservativo es un deber moral. Si estás embarazada sométete a tratamiento para reducir el riesgo de transmisión del sida al hijo/a y evita dar de mamar al bebé.
Tratamiento del VIH
Los tratamientos antirretrovirales son una terapia combinada de fármacos que no acaba con el virus pero sí reduce el riesgo de avance del virus e impide que las células infectadas reproduzcan nuevas partículas de VIH. En la actualidad el tratamiento de VIH permite controlar la infección, mejorar la calidad de vida del paciente y alargar la esperanza de vida, que hoy en día supera los 25 años desde el diagnóstico.
Más info:
http://www.hogarutil.com/salud/salud-familiar/prevencion-cuidados/201011/sexo-seguro-protegete-sida-7393.html#ixzz2tzIJE4IV