Muere lentamente quien no viaja, quien no lee,
quien no oye música, quien no encuentra gracia en sí mismo
Muere lentamente quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.
Muere lentamente quien se transforma en esclavo del hábito
repitiendo todos los días los mismos trayectos,
quien no cambia de marca,
no se atreve a cambiar el color de su vestimenta
o bien no conversa con quien no conoce.
Muere lentamente quien evita una pasión
y su remolino de emociones,
justamente éstas que regresan el brillo a los ojos
y restauran los corazones destrozados.
Muere lentamente quien no gira el volante cuando está infeliz
con su trabajo o su amor,
quien no arriesga lo cierto ni lo incierto para ir atrás de un sueño
quien no se permite, ni siquiera una vez en su vida,
huir de los consejos sensatos……
¡Vive hoy! ¡Arriesga hoy! ¡Hazlo hoy! ¡No te dejes morir lentamente!
¡No te impidas ser feliz!
Martha Medeiros